Cuando se creó el Escarabajo dudo mucho que en la mente de Volkswagen estuviese siquiera que derivase en un deportivo de culto como el Porsche 356, pero siempre hay un aficionado que pone solución a un problema que no se ha planteado. El Escarabajo carecía de versión deportiva, pero este aficionado ha creado el sleeper perfecto, un Volkswagen Escarabajo turbo muy discreto equipado con un Garrett GT-2871 que sopla a 1,40 bar. La eterna discusión entre conservar la pátina y dejarlo impoluto, aquí no tiene un claro vencedor, veamos qué más esconde este Escarabajo.
Si planteamos a alguien realizar una lista de coches humildes deportivos, el Escarabajo no estará en esa lista, y no es para menos, cualquiera que haya montado en uno de ellos sabrá que es de todo menos deportivo. Con menos de 30 CV está claro que, a pesar de dormirnos sobre el acelerador, es difícil superar los vetustos límites de velocidad. Pero si ya es notable montar un turbo del tamaño del Garrett GT-2871 en un coche que cuenta con inyección de combustible, imaginaos alimentándolo con un doble carburador Holley 600.
Esto viene acompañado de un cigüeñal y bielas CB Performance, colectores CB Performance Street Eliminator y varillas de empuje Chromo, entre otros. Las tareas de lubricación y abastecimiento de combustible son realizadas por una bomba Holley Red, una admisión Clyde Berg y una bomba de aceite Gene Berg. Con toda esta lista de piezas, como podéis imaginar, entregará más del doble de la potencia que entregaba cuando salió del concesionario, pero, por desgracia, el propietario no lo ha subido a un banco de potencia.
Como toda preparación que se precie, y, sobre todo, en esta preparación en la que es probable que se triplique la potencia, el propietario ha dotado al Escarabajo de suspensiones mejoradas y frenos de disco en los dos ejes, lo mínimo para conseguir transferir toda la potencia al suelo y frenarla antes de que sea demasiado tarde. En cuanto al exterior, nada parece indicar que este viejo Escarabajo cuenta con mucha más potencia. Subrayado por la pátina adquirida a lo largo de los años, lo único que no es de serie en su exterior es el juego de llantas BRM y su salida de escape de gran diámetro hacia el suelo, que deja huérfanas las hendiduras del viejo escape.
Si nos asomamos a su interior, podemos ver un par de relojes para controlar el turbo y las revoluciones del motor, pero el resto del interior se mantiene de estricta serie, ocultando el verdadero carácter de este Escarabajo. Este Volkswagen Escarabajo turbo se subastará en Glendale 2024, en el State Farm Stadium del 5 al 9 de marzo. También se ofrecerán clásicos estadounidenses como el Chevrolet Corvette Pace Car Edition Coupe de 1978, y leyendas japonesas como un Nissan R34 Skyline GT-R M-Spec Nur del año 2002. Está claro que no hay coche malo ni antiguo para las preparaciones, solo hace falta contar con el presupuesto necesario y la idea clara de lo que se quiere realizar, al menos mientras la legislación nos lo permita.
Francisco Javier Rodriguez
En la época en la que pasaba el día dibujando coches, alguien me preguntó: ¿pero a ti te gusta más la mecánica o la carrocería de los coches? Esa misma semana leí el Manual del Automóvil de Arias Paz. Tenía 14 años, esa simple pregunta es la razón por la que estoy aquí, desde entonces no he parado de aprender sobre lo que se convirtió en mi pasión.COMENTARIOS