El Corvette siempre ha sido un coche especial, el superdeportivo visto desde los ojos de un estadounidense y con una personalidad muy marcada. La última generación, con el motor central, perdió algo de esa personalidad, pero ganó en prestaciones y en comportamiento, mientras que también adoptó una imagen más afilada, pero lo mejor de todo, es la llegada del motor con cigüeñal plano del Corvette Z06.
Sin embargo, como ya es costumbre, Hennessey no ve lo suficientemente potente al Z06 y se ha puesto a trabajar en el modelo. El resultado es, lógicamente, espectacular, porque si de algo saben estos de Texas, es de sacar potencia de casi cualquier motor que caiga en sus manos. Y por lo general, en Hennessey son amantes de los compresores volumétricos, o “supercargadores”, como los llaman en la “Tierra de las oportunidades”.
Los artistas de Texas han tomado como base de partida el V8 6.2 TL2, que en su versión de producción, con aspiración natural, rinde 500 CV y 630 Nm, y le han realizado algunos cambios para aumentar esas cifras de forma considerable. Lo primero ha sido buscar un buen supercargador, al que acompañan con un intercooler aire-agua hay un escape con mayor flujo –que no forma parte del kit, se ofrece como opción–. También se reprograma la gestión electrónica. El resultado son 718 CV y 854 Nm de par. Sí, es más potente que el Z06, pero curiosamente, no se parte del mismo de dicha versión.
“El Corvette C8 Stingray original es un automóvil extraordinario, pero Chevrolet dejó margen para mejorar las prestaciones del motor V8. Nuestro emocionante paquete de sobrealimentador “H700” se integra a la perfección con la caja de cambios de doble embrague de ocho relaciones, y nuestro escape suena mucho más agresivo que el original”, comenta John Hennessey, fundador y CEO de Hennessey Performance.
Se puede montar en cualquier Corvette C8 con el motor LT2, pero no es, ni mucho menos, barato. El coste del kit, que incluye el supercargador, el intercooler, la programación de la gestión electrónica, gráficos específicos para la carrocería, unas llantas más ligeras y hasta el escape más abierto, asciende a 46.732 euros, tarifa a la que debemos sumar el precio del coche. Si solo se quiere la modificación de motor –sin escape–, el precio es de 32.700 euros –más coche–.
“Teniendo en cuenta que nuestra potencia y par superan al Z06 de fábrica, el Hennessey H700 es posiblemente el superdeportivo de alto rendimiento con mejor relación calidad-precio del mundo”, agregó John Hennessey.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS