Como no podría ser de otra forma, el desarrollo del, por el momento, Ferrari F250 –esa es la denominación interna del proyecto, según algunas fuentes– sigue su curso y empieza a ser algo normal ver unidades de pruebas por los alrededores de Maranello. Además, al tratarse del reemplazo del Ferrari LaFerrari, toda a atención se centra en estas unidades desarrollo que, por otro lado, están camufladas de forma apreciable.
No es un coche cualquiera, no es un deportivo más, es la máxima expresión de lo que saben hacer en Maranello y hay que mantener lo máximo posible en secreto. El caso es que vivimos en la era de la conectividad, mantener cosas en secreto es, cuanto menos, complicado, cuando no resulta imposible. Por eso, el camuflaje de las mulas de desarrollo ha llegado a otro nivel en el cual, además de los diferentes apósitos que se añaden a la carrocería, se emplean, directamente, carrocerías de otros modelos para ocultar el trabajo hasta el último momento.
En el caso del proyecto F250 no se ha empleado la carrocería de otro coche, al menos no lo parece a simple vista y destaca por recuperar, entre otras cosas, el alerón trasero. La última vez que Ferrari recurrió a un ala en la parte trasera en un coche “de calle”, había lanzado al mercado el Ferrari F50. Todo lo que vino después del F50 no empleó elementos aerodinámicos como el alerón, pero ahora parece que vuelven a explotar sus cualidades y además, con uno de gran tamaño.
Un vídeo publicado en Youtube hace unos pocos días, nos deja ver nuevamente una de las unidades de desarrollo, o quizá, la misma unidad de otras ocasiones, aunque con ligeros cambio -a partir del minuto 6:59–. No hay diferencias estéticas, aunque la presencia de una cantidad importante de camuflaje impide toda opción de apreciar cambios. Sin embargo, al parte trasera sí que deja a la vista algunas partes ocultas en otras veces, como la zona central, donde se encuentran los escapes, con forma trapezoidal y bastante grande.
Todo es muy exagerado en la parte trasera, con enormes salidas de aire y un difusor que parece tener dimensiones colosales. No hay lugar para compromisos, tal y como se puede apreciar incluso con camuflaje.
Podría ser cosa del camuflaje, pero parece ser un coche bastante largo y especialmente bajo, aunque la zona frontal no será así, pues salta a la vista que el camuflaje deforma esta zona que, por lo visto hasta el momento, no podemos imaginar como será. Dudamos que se inspire en ninguno de los modelos a la venta actualmente, esta saga siempre ha tenido personalidad propia, pero tampoco sería extraño que, por ejemplo, tomara algo del Daytona SP3. De hecho, por proporciones recuerda vagamente al mencionado modelo.
La información sobre su apartado técnico todavía es muy limitada, casi inexistente, pero se prevé que no haya ni rastro de un motor V12. Se espera la incorporación de un grupo motor híbrido, sea un V6 un V8, y no solo por normativas, sino también por mantener la relación con la Fórmula 1, tan característica de Ferrari.
En el vídeo publicado, además del Ferrari F250 –recordar que es solo el nombre interno del proyecto–, también aparece una unidad del que, en teoría, será el reemplazo del 812 Superfast, solo que oculto bajo la carrocería de un Ferrari Roma algo más grande de lo habitual.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS