En el contexto actual de incertidumbre acerca del futuro próximo del automóvil, el Salón del Automóvil de Múnich está sirviendo para que salgamos de dudas acerca de los planes —eléctricos en todos los casos— de las marcas, especialmente en cuanto a la configuración de sus gamas en tiempos venideros. El IAA Mobility le ha servido a Mercedes-Benz para confirmar que la electrificación no borrará sus modelos del segmento C de su catálogo. BMW, por su parte, nos ha mostrado la referencia para sus nuevos vehículos eléctricos, con un concept que debería estar muy cercano al futuro BMW i3, o Serie 3 eléctrico. Las noticias acerca de Audi, aunque también asentada en Baviera, no nos llegan desde su capital, sino desde el Reino Unido. Autocar ha conversado con el director de desarrollo de la marca de Ingolstadt, Oliver Hoffman, y ha averiguado que la plataforma MEB-EVO del Grupo Volkswagen dará lugar a varios modelos eléctricos, sucesores de los representantes actuales del segmento C en la marca de los cuatro aros.

El primero de estos modelos eléctricos de acceso podría ser el próximo Audi A3, nunca antes del año 2027. Desde hace un año que existe confirmación de este extremo, aunque habrá de ser renombrado para seguir la nueva nomenclatura de la marca, que reserva los números pares para los modelos eléctricos. Así, se espera que este futuro automóvil sea conocido como Audi A2, una denominación que despierta nostalgias al recordar el urbano con carrocería de aluminio que la marca comercializó —con menos éxito del que probablemente merecía— entre 1999 y 2005.

Como apuntábamos al inicio, esta gama de modelos estará construida sobre la plataforma MEB-EVO. Actualmente, la sopa de letras de arquitecturas eléctricas de Volkswagen requiere de cierto trabajo de descodificación. La plataforma MEB, originariamente desarrollada para articular los modelos eléctricos de mayor volumen del grupo y que sustenta al actual Audi Q4 E-tron, se ha visto afectada por importantes problemas, especialmente relacionados con la integración del software. De este modo, el gigante de Wolfsburgo comenzó a trabajar en otras arquitecturas, como la PPE, también lastrada por serias dificultades. Finalmente, han recurrido a un colaborador externo, para terminar de dar salida a los numerosos proyectos paralizados en la actualidad.

Audi continuará fabricando automóviles del segmento C, construidos sobre la plataforma MEB-EVO, una vez se haya producido la electrificación completa de su gama

A partir de los aprendizajes que han supuesto para el Grupo Volkswagen estos fracasos, han diseñado una evolución de su plataforma eléctrica primigenia, denominada MEB-EVO y que será la empleada por Audi en su gama de automóviles eléctricos de acceso. En este sentido, su rendimiento se encuentra limitado por los 400 voltios a los que trabaja, aunque ello no impide que pueda soportar potencias de carga de entre 175 y 200 kW. Su implementación supondrá también que se ofrezcan versiones de propulsión por primera vez en un Audi compacto, desde la aparición del Audi A3 en el catálogo de la marca en 1996. Por supuesto, las versiones superiores, una de ellas el equivalente al actual Audi RS 3, equiparán un motor en cada eje para contar con tracción total.

Aunque estos datos proceden de otras fuentes, Autocar también ha podido saber que las diferentes posibilidades de empaquetamiento derivadas de las arquitecturas eléctricas serán aprovechadas por los diseñadores de la marca en los relevos de baterías de las versiones actuales del Audi A3. Tanto la opción compacta de cinco puertas como la de formato sedán crecerán en sus dimensiones absolutas, aunque se alterarán sus proporciones. En este sentido, los voladizos serán más cortos y la cabina ganará protagonismo, con un capó delantero que también verá reducida su longitud.

Oliver Hoffman ha confirmado, asimismo, que en su catálogo convivirán automóviles de combustión interna y de baterías equivalentes, en cuanto a sus segmentos, durante algunos años. De hecho, antes de 2025 se prevé que la marca lance al mercado hasta una veintena de nuevos modelos. A partir del año 2026, todos los nuevos productos comercializados con los cuatro aros en su frontal contarán con trenes de potencia eléctricos.