El miércoles día 18 de diciembre se confirmó definitivamente la fusión entre FCA y PSA. Dos conglomerados automovilísticos, capaces de fabricar anualmente 8,7 millones de unidades conjuntamente. Todavía no se han fusionado por completo, para que esto se consume quedan al menos 12 meses, pero cuando ocurra se colocarán como la cuarta potencia mundial entre las automovilísticas.

Pero no solo será una empresa grande por producción, también lo será por número de trabajadores y por número de fábricas. La plantilla resultante estará alrededor de los 400.000 trabajadores, repartidos en 44 fábricas productivas en Europa, 21 de PSA y 23 de FCA, de las cuales, 16 están en Italia. Y esto sin contar las fábricas que tiene FCA en otros lugares como Estados Unidos.

Dentro de este enorme conglomerado, España aporta tres plantas de producción y 14.000 empleados directos (indirectos son muchísimos más), que son responsables de un millón de unidades al año. Las tres plantas pertenecen a PSA, ya que FCA no tiene presencia industrial en España desde que la rama de vehículos industriales, con Iveco a la cabeza, se escindiera en 2011 quedándose con plantas en Madrid (las instalaciones de la antigua Pegaso) y en Valladolid.

Las fábricas españolas aparentemente fuera de peligro

Según parece, cuando la fusión se haya hecho efectiva, habrá que realizar muchos ajustes y afectará tanto a los modelos que ahora se producen como a las fábricas disponibles. No se tiene intención de cerrar ninguna planta productiva, aunque hay muchas que se encuentran trabajando por debajo de sus posibilidades. Esto afecta sobre todo a las instalaciones italianas, que producen la mitad de los vehículos que podrían montar anualmente.

En España, las fábricas del grupo representan la máxima producción de vehículos que se alcanza en España. Actualmente, el Grupo PSA es el primer fabricante de vehículos en nuestro país y sus tres factorías superan las 900.000 unidades al año. La planta de mayor productividad es la situada en Figueruelas (Zaragoza), que entre enero y octubre de 2019 ha fabricado 394.273 ejemplares. Se trata de las instalaciones que PSA ha adquirido con la compra de Opel y que fabrican el Opel Corsa, el Opel Crossland X, Opel Mokka X y el Citroën C3-Aircross y que en 2018 fabricó un total de 447.514 unidades.

La segunda planta española por producción es la de Vigo, que pertenece a Citroën desde la década de los 50 y que entre enero y octubre de 2019 ha fabricado 330.058 unidades. De esta factoría salen un buen número de modelos: Peugeot Partner/Rifter, Citroën Berlingo, Opel Combo, Toyota Proace City, Citroën C4 Space Tourer, Citroën C-Elysée, Peugeot 301 y Peugeot 2008. Además, tanto esta planta de Vigo como la de Zaragoza, comenzarán en 2020 con la producción de modelos eléctricos: el Peugeot e-2008 y el Opel Corsa-e. En 2018 salieron de estas instalaciones 398.333 unidades.

Por último está la fábrica de Villaverde, en Madrid. Es la menos productiva de las tres con 45.703 unidades, aunque, también hay que decir, que solo fabrica un modelo: el Citroën C4 Cactus, que en 2018 alcanzó las 70.973 unidades. Tiene capacidad para acoger mucha más producción y actualmente opera el 40% de sus posibilidades. Atraviesa un expediente regulador de empleo temporal hasta finales de 2020, cuando, a priori, recibirá la producción de la próxima generación del Citroën C4 que, además, también contará con variante eléctrica.

No obstante, hay que recordar que Carlos Tavares, máximo responsable de PSA, visitó Zaragoza cuando Opel fue absorbida por el grupo francés para “avisar” a los trabajadores que debían bajar el coste por coche al nivel de PSA Vigo o habría despidos e incluso posible cierre de la fábrica. Al final los trabajadores aceptaron varios acuerdos y a cambio, recibieron la producción del Opel Corsa-e. De hecho, el propio Tavares afirma, cada vez que viene a España, que Mangualde (Portugal) y Kenitra (Marruecos) son más eficientes.

Fuerte inversión de PSA en España

Uno de los apartados más importantes que afectan a las plantas españolas, es la inversión de 1.000 millones de euros para la fabricación de coches eléctricos. En concreto, Vigo se queda con 660 millones, Figueruelas con 250 millones y Villaverde, con 144 millones.

Dicha inyección de capital podría ser explotada por FCA que actualmente no tiene vehículos eléctricos. Están preparando la llegada del FIAT 500e así como una versión eléctrica del FIAT Panda con el mismo motor. La fusión de PSA podría generar más oportunidades para FCA en cuanto a electrificación, pues además del Peugeot e-2008, la planta de Vigo fabricará las variantes eléctricas de la Peugeot Partner, del Citroën Berlingo, del Opel Combo y del Toyota Proace City.

FCA tiene en ese segmento el FIAT Dobló, que se fabrica en Bursa (Turquía). Por el momento no hay planeada ninguna versión eléctrica de este modelo, pero podría cambiar con la fusión y la planta de Bursa no está preparada para el trabajo con tecnología eléctrica, cosa que la fábrica de Vigo si, pudiendo acoger la producción de este hipotético modelo.

Además, Tavares recordó en el mes de octubre, durante la visita del Rey Felipe VI a Figueruelas, que PSA es el fabricante número uno de España, que tienen una cuota del 22% y que esperan seguir con esa progresión.