Cuando conocimos la fecha en que la pretenden impedir la comercialización de vehículos contaminantes –vehículos de cuatro ruedas o más ruedas, por cierto, las motos no están afectadas por esa normativa–, todo parecía estar relativamente lejos. Se hablaba de 2035, había tiempo para desarrollar una infraestructura mínima y para que los usuarios se acostumbren y adapten sus hábitos, que sufrirán algunos cambios. El caso es que no es una fecha tan lejana, sobre todo en la industria del automóvil, que le vio las orejas al lobo y ha centrado gran parte de sus esfuerzos en el desarrollo de tecnología eléctrica para los coches.

Y así estamos, en un momento en el que los coches con motores de combustión dominan, y con enorme diferencia, las ventas anuales, mientras el grueso de los usuarios todavía no sabe donde podrá cargar su coche en caso de tener que ser eléctrico –aquellas con grandes cuentas corrientes, ya tienen coche eléctrico y lo cargan en su casa– y tampoco sabe si realmente podrá comprarse uno, pues los precios no son, por decirlo de alguna manera, populares. Y si queréis un ejemplo, el nuevo Peugeot E-208 tiene un precio de partida de 35.100 euros, sin descuentos ni promociones, claro.

Pero esto no va de Peugeot, va de BMW, un fabricante que, hasta el momento, no ha querido poner fecha al último motor de combustión salido de sus instalaciones, pero al mismo tiempo, trabaja incansablemente en el desarrollo de su tecnología eléctrica. De hecho, BMW fue de los primeros en atreverse a lanzar un coche eléctrico cuando todavía no había casi nada en el mercado, aunque para ello, creo una submarca que solo tuvo dos coches y por un cambio en la estrategia, desapareció. Hablamos de BMW i y de coches como el BMW i3 o el BMW i8, un eléctrico y un híbrido, ambos de diseño, desarrollo y producción bastante particulares.

Ahora la marca no se complica tanto y poner en circulación vehículos eléctricos menos especiales, aunque no por ello peores, ni mucho menos, simplemente, ahora forman parte de la gama como un modelo más, como ocurre con el BMW i4, con el BMW i5, con el BMW i7, con el BMW iX1… y como pasará con el BMW M3, que al parecer, llegará en 2027 y será eléctrico. Es evidente que será todo un acontecimiento, pero también será el adiós definitivo al espíritu original del M3 en una transformación hacia lo que muchos han denominado la pérdida de alma de los coches, si es que quedaba alguna todavía.

Y no son rumores, son declaraciones de Frank Weber, el jefe de desarrollo de producto de BMW, quien ha hablado del BMW M3 durante la presentación del BMW i5 en Portugal. Como cabe esperar, los datos son nulos, o casi, todo lo que vayamos a decir ahora es simple especulación, una vuelta a las posibilidades que rodean a un BMW M3 eléctrico, que no son precisamente pocas y que empiezan con el empleo de la plataforma Neue Klasse, la nueva base para los coches eléctricos de la marca, que comenzará a rodar en 2025 y que fue prestada hace no mucho.

Conocer esta noticia nos ha hecho acordarnos, casi al instante, del prototipo eléctrico que BMW M lleva tiempo dando forma, un i4 Gran Coupé con cuatro motores eléctricos y un supuesto espíritu ///M llevado a más. Esta configuración de motores será la que use el próximo BMW M3, aunque no dispondrá de la absurda e irrelevante –por común entre los eléctricos– potencia del prototipo, que cifra en algo más de 1.300 CV. Cuando llegue a producción, se habla de unos 660 CV, aunque desde Carsales asegura que serán un muchos más: un megavatio –1.000 kW, 1.360 CV–.

Frank van Meel, el actual director ejecutivo de BMW M, afirmó que un BMW M3 totalmente eléctrico sería el mejor de todos los tiempos, pero no dio pistas de cuando podría ocurrir algo así, de hecho, en una entrevista con Carsales dijo que “si pudiéramos hacer un modelo M puramente eléctrico, está claro que tiene que ser mejor que el actual y debería conducirse como un M, así que desde ese punto de vista, diría que no hay necesidad de temer al futuro, incluso si tendríamos una transmisión electrificada”.

A dichas declaraciones, las cuales se hicieron en agosto de 2023, tenemos que añadir lo que dijo Weber durante la presentación del BMW i5: “quizá algunos echen de menos el sonido, pero les encantará el rendimiento del coche. Será increíble. Queremos presentar algo que demuestre que Neue Klasse ya es muy ambicioso. Pero esto es hacer algo muy por encima de lo que la gente está acostumbrada hoy en día. Esto vendrá con el M3 y no estará muy lejos del lanzamiento inicial del Neue Klass como línea de productos”