Renault es una firma con mucho arraigo en España. Sí, es un fabricante de origen francés, pero fue de los primeros en desembarcar en España hace ya muchos, pero que muchos años. Fue con F.A.S.A., en Valladolid, que los franceses pudieron poner sus productos en circulación en una España casi cerrada a cal y canto, por el autoritarismo del gobierno de Franco y su obsesión por la autarquía. Suerte que poco a poco se fueron abriendo las fronteras y las cosas cambiaron drásticamente.
No obstante, hasta ese momento, todo lo que tenían los españoles se fabricaba en España, o bien, tenía un precio altísimo por los aranceles que tenía que pagar la empresa importadora. Así pues, Renault comenzó a fabricar sus coches en Valladolid –donde todavía siguen, aunque F.A.S.A. ya no está– y por supuesto, de allí salieron las unidades del Renault 5 que se vendieron en nuestro país, sin olvidarnos, claro está, los Renault 5 Copa y Copa Turbo, las versiones nacionales de los Renault 5 Alpine y Alpine Turbo –en Reino Unido se comercializaron como Renault 5 Gordini–.
El Renault 5 Copa era, básicamente, un R5 Alpine, pero fabricado en Valladolid y se llamó Copa por una sencillísima razón: para hacer referencia a la copa monomarca que Renault España organizó en nuestro país. Un movimiento de marketing que finalmente se convirtió en una denominación mítica. Hay que decir que aunque por dentro eran un calco, por fuera no era así. En las fotos hemos puesto son del Renault 5 Alpine francés, ya que no hay fotos disponibles del R5 Copa para su uso editorial, Si tomamos esas imágenes como punto de partida, habría que eliminar los adhesivos laterales y el color negro, pues el R5 Copa español solo estuvo disponible en naranja, amarillo y blanco.
Con el lanzamiento del R5 Copa en España, Renault lo puso todo patas arriba, pues no había nada, o casi, que ofreciera las prestaciones del Copa, gracias a un motor de cuatro cilindros y 1.397 centímetros cúbicos, capaz de rendir 93 CV –con carburador de doble cuerpo– y mediante un cambio manual de cinco relaciones, enviar dicha caballería al eje delantero y alcanza los 175 km/h.
Hoy día, son cifras que parecen de un utilitario accesible y simplón, pero en la década de los 70 el coche era un tiro y presumía, por si fuera poco, de una relación potencia-peso de 109 CV por tonelada.
Pero no era solo potencia, en el apartado del chasis también había cambios importantes. La suspensión era de tipo independiente para los dos ejes, con triángulos superpuestos delante, barras de torsión y estabilizadoras más gruesas, así como llantas específicas cubiertas con neumáticos muy racing –eran muy similares a los que se usaban en las carreras con lluvia–.
El Renault 5 Copa fue el coche de la Copa Nacional Renault desde 1977, cuando reemplazó al Renault 8, hasta 1981, cuando fue sustituido por el Renault 5 Copa Turbo. Con este coche lograron sus primeras victorias gente como Luis Pérez Sala o Luis Villamil.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS