El Holden Efijy Concept, tal como indica su nombre, era un concept car de la división HSV (Holden Special Vehicles) del fabricante australiano, siendo presentado en el Australian Motor Show de Sidney del 2005. Por entonces la industria del motor australiana no estaba en riesgo de inminente desaparición.
Este personal coupé de aspecto radical reinterpretaba las clásicas líneas de diseño de un icono local, el FJ Holden de 1953. Con un chasis tomado de un Chevrolet Corvette C5, bajo su capó reposaba un motor V8 de 6 litros de cilindrada (5.970 cm3) que entregaba 645 CV y 775 Nm de par motor máximo a 4.200 RPM. Esta potencia se transmitía al suelo al eje trasero a través de un diferencial de deslizamiento limitado y una caja de cambios automática de cuatro velocidades, también adoptada del Corvette.
A diferencia de la mayoría de los coches personalizados, que partían de un modelo ya existente, el Holden Efijy se creó a partir de una hoja en blanco. El padre de la criatura fue el diseñador jefe de Holden de por entonces, Richard Ferlazzo. Aunque era un coche de exhibición en cualquier salón del automóvil, nuestro protagonista rompía la costumbre de ofrecer una visión de futuro, echando una mirada hacia atrás en el un bello pasado.

Tomando como ejemplo la semilla plantada por Larry Erickson con su personal visión del Cadzilla de finales de los 80, se buscó un Cadillac Coupé del 49 y Richard Ferlazzo empezó a realizar algunos bocetos en papel. A partir de este momento y con la bendición de sus jefes, realizó un modelo a escala de 1:3 en arcilla, de forma que con un modelo tridimensional pudo refinar más aún su idea antes de pasar al modelo a escala real.
Uno de los condicionantes cruciales para el desarrollo del coche fue el coste de producción, que tenía que ser aprobado por el departamento de gestión económica de Holden. Eso significaba que debía hacer uso de lo que encontraba en los talleres de diseño e ingeniería de la marca, debiendo ajustarse a un presupuesto de 200.000 dólares, unos 180.000 euros al cambio actual.
Sobre una estructura de acero se creaba una armadura de paneles de fibra de vidrio para darle fuerza estructural; sobre esta se colocaba la arcilla para modelarla cuidadosamente y darle el aspecto definitivo. Esta maqueta se utilizó para crear el molde a partir de cual se produciría la carrocería de fibra de vidrio.

La superficie de arcilla se cubría con una fina lámina de plástico denominada DiNoc, que era adhesiva y se aplicaba con agua, al igual que una calcomanía. Esta lámina de DiNoc se eliminaba cuando se pasaba a realizar los moldes de los diferentes componentes de la carrocería (puertas, capó, tapa del maletero). Después se montaba el molde para crear una carrocería de fibra de vidrio formado por 18 piezas en total.
El diseño y fabricación del salpicadero y otros elementos de su interior se realizaban con el mismo procedimiento, construyéndose en arcilla a escala real. La pintura utilizada tenía que ser la correcta, no valía cualquier tono, por lo que se buscaban colores que le diesen un tono siniestro, y el color Soprano Purple era perfecto para dotarle una estética total de los años 50. Este tono tomaba como base un azul metálico, superpuesta con múltiples capas de “caramelo rojizo” translúcido para darle un tono profundo y oscuro que enfatizaba sus curvas.
Se consiguió reflejar el espíritu original del modelo de 1948 en detalles como los paragolpes delanteros y traseros, el pilar A, la rejilla frontal, las insignias y la luz trasera central montada en el maletero. Los faros fueron diseñados a medida y producidas por Holden, con tecnología LED con la ayuda del fabricante Osram.

Estos faros constaban de tres LED de alta intensidad, rodeados de anillos -también LED- que parpadeaban en color ámbar cuando se activaban los intermitentes. En el interior de las carcasa de los faros se generaban unas temperaturas muy altas, por lo que se les dotaron de unos ventiladores para refrigerarlos.
Se tomaron los asientos del Corvette, debidamente modificados para el Efijy, tapizados en una piel de color crema, al igual que el interior del techo, la parte inferior y el volante. El panel de los instrumentos principales recordaba al original Fj, mientras que el resto de los controles se ubicaban en un panel situado en la consola central, que se ocultaba a la vista cuando el coche no se utilizaba. En este panel también se controlaba un sistema de audio Rockford Fosgate, que incluían los altavoces y el amplificador.
Al mismo tiempo se tomó el chasis del Corvette C5, perfectamente diseñado para aceptar dicha carrocería. Este chasis tenía la tradicional estructura de escalera, con dos largueros longitudinales unidos por diversos travesaños. No resultaba difícil cortar es chasis por el centro y añadir una nueva sección, alargando el tubo de torsión donde se ubicaba el árbol de transmisión. Las suspensiones eran independientes, con tecnología neumática de última generación.

Cuando se terminó la fase de pintura de la carrocería se le añadió el chasis modificado del Corvette, introduciendo el grupo motriz, un V8 LS2 aportado por General Motors. Una carrocería de líneas tan voluptuosas como las suyas debía incorporar un propulsor a la altura, y este V8 LS2 era perfecto
Era un coche grande, con 5.160 mm de largo, 2.200 mm de ancho y tan solo 1.270 mm de alto. Sus ruedas no le iban a la zaga, con unas llantas de 20 pulgadas delante y 22 pulgadas detrás, realizadas en aluminio mecanizado y de diseño macizo que le proporcionaban una pureza de líneas extraordinaria. Estas llantas iban calzadas con unos neumáticos Dunlop SP Sport-9090 255/35 ZR delante y 285/30 ZR detrás.
Los enormes frenos procedentes de Harrop Engineering, con discos de 381 mm de diámetro delante y detrás, eran perforados, ventilados y ranurados, con seis pistones en las pinzas delante y cuatro detrás; eran de una eficacia asombrosa.
Para los amantes de los vehículos de diseño neo retro y dotados de poderosos motores atmosféricos de gasolina, pero con un equipamiento de seguridad de máximo nivel de nuestro tiempo, este Holden Efijy Concept es un representante sumamente interesante, enorme, potente y atractivo como pocos. Lástima que por estas latitudes no sepamos aprovechar estas inconmensurables obras de arte.

Ginés de los Reyes
Desde que tengo conciencia me llamó la atención cualquier cosa con ruedas. Aprendí a montar en bicicleta al mismo tiempo que a andar, y creo que la genética tiene algo que ver: mi padre adoraba los coches, les ponía nombres, mi abuelo conducía y participaba en el diseño de camiones, y le privaban los coches...¿Chasis en escalera de un C5? No me parece justo. Vale que es americano y bruto (el vette) pero no tanto.. decir que esa estructura es una escalera parece como decir que comparte el chasis con un Defender.
Y hablar de eficacia en la frenada, de prototipos como este es siempre un supuesto, no creo ni que llegase a frenar desde 50kmh nunca.
Me encanta este concept, lo mejor en “neoretro”
Feliz 2020!