El Mercedes-AMG SL 63 dirá adiós en un futuro muy próximo. Así lo ha confirmado la prensa alemana, haciendo referencia a las fuentes de la división AMG, quienes informan que los ejemplares actuales en producción de la versión más potente de la gama SL saldrán de la fábrica antes de finalizar el mes.

Si eso termina siendo cierto, sería una mala noticia para los fanáticos de los roadsters más lujosos de Mercedes-AMG, ya que el SLC está programado para ver la tumba en 2020. El Clase C Cabriolet y Clase S Cabriolet también parecen que están en el punto de criba. ¿Por qué? Las ventas de estos modelos son anecdóticas en comparación con los SUV de la casa. No, el futuro del automóvil pasional no está viviendo sus mejores momentos.

Desde MB Passion apuntan a que es difícil que el V8 biturbo de 5,5 litros del Mercedes-AMG SL 63 cumpla con los estrictos estándares de emisiones de Europa como la razón principal de su extinción. Lo cierto es que podrían haber incorporado en su vano el actual V8 biturbo (M177) que se utiliza en el resto de la gama AMG, pero en Affalterbach se han concentrado más en su GT y A 45 que en mantener el SL fresco como una margarita.

“Podemos confirmar que la producción del SL 63 finalizará en este mes, lo que cierra el ciclo de vida normal planificado”, dijo el portavoz de Mercedes-Benz a Carscoops

La actual generación del Mercedes SL (R231) lleva con nosotros desde 2012 y, a su vez, partía de una profunda remodelación del presentado en 2002 (R230). Cuatro años más tarde recibió un profundo lavado de cara, en el que se actualizó su imagen y se integraron nuevos motores turboalimentados, tanto de seis como de ocho cilindros. Sería una falacia decir que los años no le empiezan a acusar, pero también sería decir que no es una máquina aún elegante.

Parece que Mercedes nos está haciendo la puñeta a los más petrolheads. Tras la desaparición de los motores de ocho cilindros de alta cilindrada atmosférica, la de los 12 cilindros con el Mercedes-AMG S 65 Final Edition y la próxima extinción de la propulsión en la gama AMG, llegamos al fin de un icono dentro de la casa de la estrella. De momento, tan solo el SL 63 es el afectado, pero, ¿cuándo nos abandonará por completo? Todo apunta a un futuro no muy lejano.

Dicho sin rodeos, a Mercedes-Benz no le interesa seguir actualizando un diseño ya anticuado. Sin embargo, desde la marca ya están trabajando en la nueva generación del SL, que obtendrá una plataforma común con el AMG GT de la nueva generación, así como un techo plegable de tela al estilo del original 300 SL.