La familia AMG GT sigue creciendo, y con la llegada del Mercedes-AMG GT S Roadster, ya cuentan con tres descapotables, cuatro coupés de dos puertas, tres coupés de cuatro puertas y dos modelos solo para correr en circuito. El nuevo miembro es el GT S Roadster, es decir, inmediatamente por encima del GT Roadster, que ya tiene de lo suyo.
Es un término medio entre los 476 CV del GT Roadster y los 557 CV del GT C Roadster, con unos muy razonables 522 CV. En par máximo la diferencia es mínima con el modelo siguiente, sus 670 Nm a 1.900-5.000 RPM solo son 10 Nm menos y se acaban 500 RPM antes. Pecata minuta. En prestaciones, eso supone hacer 100 km/h en 3,8 segundos -una décima más- y una punta de 308 km/h en vez de 316 km/h. Vamos, que solo lo van a notar en Alemania o con cronómetro en la mano.
El GT S Roadster tiene, al igual que el GT C Roadster, la suspensión deportiva AMG RIDE CONTROL con Adaptive Damping System para permitir al conductor seleccionar el tarado y respuesta que más le apetezca con el AMG DYNAMIC SELECT controller. También cuenta con el bloqueo de diferencial trasero de control electrónico en vez del mécanico del GT Roadster a secas.
También comparte con su hermano mayor el escape deportivo Performance (variable), las dimensiones de las llantas y neumáticos, o el sistema de frenado con discos composite (390 y 360 mm). Opcionalmente puede tener los frenos AMG high-performance con discos de 402×39 mm delante y 360×32 mm detrás y las pinzas pintadas con la insignia AMG Carbon Ceramic instrita en ellas.
En el comunicado de prensa no se dan precios, pero sabemos que llega en primavera. Sabiendo que el GT Roadster cuesta 160.800 euros y el GT C 192.600 euros, estará ahí en medio. Afortunados sean los que puedan disfrutar de semejante belleza.
Javier Costas
Me gustan los coches desde que tengo uso de razón (o antes). Tras haber conducido más de 400 coches aquí sigo, divulgando y aprendiendo a partes iguales sobre las cuatro ruedas. Vosotros habéis hecho que se convierta en mi pasión.COMENTARIOS