Ferrari eléctrico. La combinación no parece ser de las mejores, pero sabemos que la firma de Maranello no es como las demás y ya lo hemos visto con el Ferrari Purosange. Así, pues, ¿qué pasará con el Ferrari eléctrico? Hay muchas incognitas, pero también muchísima expectación.

La firma italiana representa, por así decirlo, la última resistencia, el perdurar de los motores V12 atmosféricos y de altas revoluciones, mientras el resto de fabricantes los retiran del mercado, ya sean atmosféricos o turboalimentados. También es justo reconocer que Ferrari lo tiene más fácil, pues su producción, más limitada que la de otras marcas que tenían motores de 12 cilindros en su catálogo, le permite ciertas libertades que los demás no tienen.

Aun así, sabemos que habrá un Ferrari eléctrico a partir de 2026, aunque no hay fechas concretas. La marca ha dicho que lo tendrá listo antes de finales de 2026 y lo único que podemos afirmar, es que no será como otros coches eléctricos. De hecho, según parece, juzgaran la baza que mejor se les da: las sensaciones y las emociones.

Los chicos de CarBuzz han descubierto un par de patentes, presentadas ante la oficina de patentes de Estados Unidos –USPTO, por sus iniciales en inglés–, que muestran lo que podría ser un sistema de retroalimentación auditiva orgánica, o dicho de otro modo, un sistema con el que se pretende generar sonido durante la conducción sin recurrir, como los demás, a unos altavoces.

Dichas patentes muestran un sistema que está relacionado directamente con la transmisión y tiene como objetivo, según cuentan desde la publicación yankee, de informar al conductor sobre el comportamiento del eje motriz, de forma que permita reaccionar de forma instintiva.

Uno de los problemas al conducir un coche eléctrico, es que no hay información auditiva, no hay ruido que te informe sobre determinadas cosas y el conductor no es consciente de como se comporta la transmisión. Desde Ferrari quieren paliar esta peculiaridad de los coches eléctricos con lo que ellos describen como un “conducto acústico”, un dispositivo neumático vinculado al eje motriz a través del cual, la presión del aire y las vibraciones pueden canalizar esa retroalimentación a quien conduce.

Es un sistema puramente neumático y por ello, para evitar tener que usar soluciones tan artificiales como los altavoces, se agregan resonadores para amplificar o reducir el volumen del ruido que llega al habitáculo. Por supuesto, si el coche tienen dos motores eléctricos, habrá dos conductos, uno para cada motor. El sistema contará con unas válvulas controladas electrónicamente y ofrecerá la posibilidad de bloquear completamente el sonido para circular totalmente en silencio.

Pero no acaba aquí la cosa, pues las patentes publicadas por CarBuzz muestra la posibilidad de instalar otro conducto adicional, que envié el sonido al exterior. No en balde, un Ferrari sin sonido, sería una de las cosas más raras dentro del mundo del automóvil, ¿verdad?

No obstante, todavía hay más, pues un segundo sistema propone aprovechar el aire para generar más ruido mediante unos “instrumentos aerófonos”. Lo más llamativo del sistema, es que, básicamente, se trata de un órgano de tubos en los bajos del coche, los cuales, gracias al aire que pasa a través de ellos, generarán ese sonido tan apreciado por los amantes de los coches de altas prestaciones. Por supuesto, contarán con válvulas gestionadas electrónicamente para abrir o cerrar el paso del aire. Aire que llegaría a órgano a través de las tradicionales aberturas en la carrocería.

Es evidente que Ferrari no está conforme con el silencio de los coches eléctricos y nos sorprenderá a todos con mucha originalidad.