Hace un par de años Caterham nos presentó su modelo Super Seven 1600, retrotrayéndonos a los modelos de los 70 y 80 que identifican a la marca. Hoy los nuevos Caterham Super Seven 600 y Super Seven 2000 nos vuelven a teletransportar a aquellos años, manteniendo la esencia, pero actualizando la técnica para que nada falle. Estos maravillosos kit cars ofrecen un “sabor” retro como salpicaderos con detalles en madera pulida o colores clásicos, están orientados a celebrar dentro de poco el 50 cumpleaños de la compañía.
La opción más humilde es el Caterham Super Seven 600, destinado a una conducción pura de acceso para la gama. Este Super Seven 600 está propulsado por un motor turboalimentado de origen Suzuki de 660 centímetros cúbicos, cuyos 84 CV nos pueden parecer pocos para las potencias que se manejan hoy en día para los coches pasionales. Esos 84 CV son más que suficientes para mover con soltura sus 500 kg hasta los 97 km/h en 6,9 segundos (0 a 60 mph).
Comparte chasis con el Caterham Seven 170, y no está disponible en el tamaño de chasis grande debido a su orientación y su limitada potencia. Su precio ronda las 30.000 libras, unos 34.300€, y se puede adquirir montado o en kit para montarlo en casa.
La estética acompañada de los nuevos colores hará las delicias de los más nostálgicos
Su hermano mayor, el Caterham Super Seven 2000, es la versión más llamativa entre estos nuevos modelos. El motor Ford Duratec de 2 litros de cilindrada que hace que tarde solamente 4,8 segundos en alcanzar los 97 km/h tiene 182 CV. Este tiempo es del modelo con chasis de suspensión de-Dion tomado el Caterham Seven 360, aunque en este caso si se puede adquirir con el chasis grande, ventajas de los kit cars. Este modelo está disponible por unos 47.750€ sin opciones.
La estética de los nuevos Caterham Super Seven 600 y Super Seven 2000 está plagada de guiños retro como las aletas delanteras, los detalles cromados repartidos por todo el vehículo, incluso la tornillería vista en el parabrisas. Ambos montan neumáticos Avon ZT7 en llantas de 14 pulgadas denominadas “Juno”, de estética retro con el aro pulido. El tapón del depósito cromado, el volante Moto-Lita forrado en cuero y el panel trasero tapizado con moqueta son detalles que siguen llevándonos a los orígenes de estos Caterham, pero no todo es retro, las ópticas traseras son LED.
Para estos nuevos Caterham se ofrecen cuatro colores exclusivos que nunca antes se habían ofrecido en un modelo de la marca: Ashdown Green, Fawn, Windsor Blue y Bourbon. También pueden acompañarse de los centros de rueda en dorado o en el color de la carrocería para continuar con la estética de las raíces de Caterham. Al ser un coche en kit hay infinidad de opciones de personalización, entre los que se encuentra el material del que está hecho el salpicadero, si la jaula antivuelco va forrada en piel o no, las ópticas frontales de alta intensidad, incluso se permite sustituir las aletas delanteras por otras más discretas.
En cuanto a la mecánica, también cuentan con opciones, como un diferencial de deslizamiento limitado, suspensión regulable, o una barra estabilizadora trasera para hacer más deportivo su comportamiento. En España no se comercializa en kit debido a la normativa, aunque montaría con mucho gusto uno de estos Caterham rememorando el Meccano de la infancia. Para los que solo nos podemos permitir soñar, dejo los configuradores del Caterham Super Seven 600 y Super Seven 2000.
Francisco Javier Rodriguez
En la época en la que pasaba el día dibujando coches, alguien me preguntó: ¿pero a ti te gusta más la mecánica o la carrocería de los coches? Esa misma semana leí el Manual del Automóvil de Arias Paz. Tenía 14 años, esa simple pregunta es la razón por la que estoy aquí, desde entonces no he parado de aprender sobre lo que se convirtió en mi pasión.COMENTARIOS