Es mejor llegar tarde que no llegar nunca. El Toyota Yaris Cross es el primer B-SUV que Toyota lanza al mercado desde el fracaso del Urban Cruiser. Es uno de los segmentos más competidos en la actualidad, y el recién llegado tiene argumentos para lograr una buena posición entre los más vendidos. De hecho, Toyota aspira a ser uno de los líderes.
La marca nipona ha seguido todos los elementos de la receta para crear un SUV: un diseño que entre por los ojos -agresivo, musculado, alto, ruedas enormes-, atención hacia la funcionalidad y el espacio disponible, eficiencia adecuada a los nuevos tiempos y la guinda: que podrá ser 4×4.
En un mercado dominado por tricilíndricos gasolina de tracción delantera, el Yaris Cross ofrecerá una versión con eje trasero acoplable. En vez de utilizar un tradicional árbol de transmisión cuenta con un motor trasero. No añade potencia al total, solo peso, pero mejora la motricidad en superficies resbaladizas, principalmente asfálticas.
No se trata de un simple Yaris vestido de plásticos. La plataforma es la misma, GA-B, con la misma distancia entre ejes, 2.560 mm. Ahora bien, el Yaris Cross es 240 mm más largo porque tiene un voladizo delantero 60 mm más largo y uno trasero elongado 180 mm. La justificación para ello es contar con más espacio interior, por lo de la funcionalidad.
Respecto a un Yaris está 30 mm más alto, la carrocería en sí es 60 mm más alta, por lo que la ganancia en altura total es de 90 mm. De ancho engorda 20 mm. En total, hablamos de 4,18 m de largo, 1,76 de ancho y 1,56 de alto. Dicho esto, sus habilidades todoterreno con tracción simple son prácticamente las mismas que las del propio Yaris. Eso sí, el Yaris Cross puede tener asistente al control de pendientes.
Será el único híbrido puro de su clase, así como el único híbrido que opta a tracción total. Combina un 1.5 tricilíndrico de ciclo Atkinson con un motor eléctrico delantero para rendir 116 CV y homologar unos 5,3 l/100 km de gasolina en ciclo WLTP. La versión 4×4 (AWD-i), al ser más pesada, añadiría al gasto unas décimas. En cualquier caso, consumirá más que un Yaris.
¿Qué sabemos del sistema de tracción total? Funciona como en otros híbridos de Toyota. Normalmente se comporta como un tracción delantera, estando el motor trasero desactivado. Cuando hay pérdidas de tracción en el eje delantero se transmite electricidad al motor trasero para compensar.
Esto es útil sobre asfalto empedrado cuando llueve -o con lluvia densa-, con nieve o con algo de arena. No dicen nada del barro, pero algo hará. Aún no tenemos detalles sobre las versiones, pero sabiendo que tendrá llantas de hasta 18″, podemos especular con que se refieren a las topes de gama, las más equipadas y de mayor consumo. Y es que 18″ son muchas para 116 CV, entorpecen la aceleración y el consumo. Las medidas de las ruedas en las fotos son 215/50 R18 con gomas Dunlop.
El color de la unidad de las fotografías es Brass Gold, tendencia entre colores para parecer más valioso
Sabemos también que tendrá una mayor capacidad de maletero que el Yaris, con asientos de abatido independiente (40:20:40) y doble piso de carga, así como la posibilidad de abrir el portón pasando el pie por debajo de un sensor oculto tras el paragolpes. Además, contará con un cinturón para asegurar la carga y que no vaya deambulando aleatoriamente en las curvas.
Del interior Toyota solo comenta que es “más espacioso”, y podemos esperar exactamente lo mismo que ya ofrece el Yaris. Eso incluye los sistemas de seguridad Toyota Safety Sense (como el control de crucero activo por radar), Android Auto, Apple CarPlay, pantalla táctil, cambio automático, etc. Toyota no ha proporcionado más detalles en ese sentido. En las fotos se aprecia un climatizador bizona, el Yaris lo tiene monozona, así como asientos calefactados, instrumentación mixta analógica/digital, freno de estacionamiento automático, etc.
Hasta Europa no va a llegar hasta mediados del año que viene, cuando empezará la fabricación en Valenciennes (TMMF, Francia) con una tirada anual de 150.000 unidades -por lo menos- y una cuota de segmento del 8 %. Previsión que no me extrañaría que se viene sobrepasada en un contexto sin crisis del coronavirus y posteriores ondas expansivas.
Al mercado japonés va a llegar antes. El Toyota Yaris Cross -mismo nombre- llegará al mercado doméstico en agosto, producido localmente por Toyota Motor East Japan, y no exportarán a Europa. En mercados distintos al nuestro se podrá elegir con motor gasolina normal, el 1.5 Dynamic Force, tanto con cambio CVT como seis velocidades manual, siempre 4×2. Puede que se exporte a Canarias, que va por su cuenta en ese sentido.
Javier Costas
Me gustan los coches desde que tengo uso de razón (o antes). Tras haber conducido más de 400 coches aquí sigo, divulgando y aprendiendo a partes iguales sobre las cuatro ruedas. Vosotros habéis hecho que se convierta en mi pasión.Le habría sentado muy bien el nombre de Urban Cruiser.
(Es el hijo de un Rav4 y un Yaris)