China, el país que para los fabricantes globales de automóviles era una especie de “El Dorado”, acaba de dar un aviso de posible agotamiento de la demanda, y su posible entrada en un periodo de contracción económica. Los datos de ventas de automóviles el pasado mes en el país asiático se han desplomado un 11,6%, la mayor caída de ventas en 7 años.
Según los datos que ha proporcionado la Asociación China de Fabricantes de Automóviles, en septiembre se vendieron 2,39 millones de vehículos, un descenso del 11,6%, y el tercer descenso consecutivo, lo que ha hecho saltar todas las alarmas entre analistas y fabricantes. Ya en julio las ventas cayeron un 3,8% y en agosto un 4%.
Estas cifras pueden ser consecuencia de la recientemente iniciada guerra comercial entre EEUU y China, a lo que puede haberse sumado una economía que no pasaba por su mejor momento, según vaticinaba el Fondo Monetario Internacional, rebajando su previsión de PIB para China del 6,4% al 6,2%. Los analistas también predicen que este año, por primera vez desde 1990, el mercado se contraerá. Con todas las cautelas del mundo, porque ya conocemos a los analistas económicos, parece que se avecinan nubarrones como los del smog en este país comunista.
“La industria del automóvil ha impulsado el crecimiento económico en China durante años. Ahora está retrocediendo”, dijo Xu Haidong, asistente del Secretario General de la Asociación China de Fabricantes de Automóviles.
El consultor de Automotive Foresight, Yale Zhang, ha realizado estos comentarios respecto a la caída de ventas: “Es muy alarmante e incluso está causando pánico entre algunos fabricantes de automóviles y proveedores. Esto se debe a que el mercado ha estado creciendo sin parar cada año durante más de 20 años, y esas compañías hacen planes basados en el crecimiento”. Esto me recuerda a una frase que escuché en su día: “Invierte en casas, que nunca bajan”. Parece que en China les deben haber lanzado el mismo mensaje.
En cuanto a los fabricantes no chinos, las ventas de septiembre en este país tampoco les han ido nada bien: GM ha caído un 14,9 %, VW ha caído un 10,5% y Ford ha caído un 43%, mientras Peugeot, Hyundai, Kia y Honda afrontan también problemas muy graves de ventas. Parece que los días de “vino y rosas” en China están tocando a su fin, así que los fabricantes tendrán que ingeniárselas para descubrir otro “El Dorado”, sobre todo después del batacazo de ventas en Europa en septiembre, debido a WLTP. ¿Alguien en la sala ha dicho “países del norte de África”?
Pablo Mayo
Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.Interesantes datos. Los chinos se van a ir quedando de apoco con varias empresas reconocidas, estas bajas no dejan de ser una oportunidad para muchos, el día que empiecen con los eléctricos no paran más. Hace más de una década que vivo leyendo crisis en muchos lados sin embargo no se ve.
Se pone interesante de cara al podio mundial de 2018, porque el mercado chino es el más importante para VAG. ¿Sacará pecho Carlos Ghosn a final de año?
Como todos los mercados, tarde o temprano llega el punto de saturación y se detiene el crecimiento. Sera interesante ver qué hacen. Prepara las palomitas.
Quedarán diez fabricantes chinos de los actuales cincuenta… …de coches eléctricos, y en cinco años hablaremos de ellos como si llevaran décadas entre nosotros.
El que no corra a electrificarse al 100% en China, no lo va ni a oler en un lustro el mercado.