La marca de origen sueco Polestar, responsable de fabricar solo vehículos eléctricos siempre orientados a ofrecer altas prestaciones, nos acaba de presentar un prototipo que no llegará a la producción. Bueno, en realidad sí, pero no como esperabas. Este Polestar Synergy será fabricado en serie como Hot Wheel, gracias a la colaboración establecida entre Polestar y Mattel, la empresa propietaria de los derechos de explotación de este nombre comercial.
El Polestar Synergy, que está presente, en forma de maqueta a tamaño real, en el Salón del Automóvil de Múnich (IAA Mobility) que se celebra estos días en la capital bávara, trae cuenta del concurso de diseño auspiciado por la marca. El tema de este concurso fue el rendimiento sostenible. De hecho, parece difícil que en el contexto de Polestar se promuevan objetivos diferentes para este tipo de certámenes.
De los 600 participantes en este concurso, tres fueron los ganadores elegidos. En realidad, fueron dos los diseños exteriores que fueron declarados ganadores, mientras que para su interior se escogió una sola de las propuestas presentadas. Con respecto a las primeras, los galardonados fueron Devashish Deshmuckh y Swapnil Desai, ambos asentados en París. Por su parte, el responsable del diseño de su habitáculo fue Yingxiang Li, de origen chino y quien quiso centrarse en ofrecer un interior muy similar al de cualquier vehículo de competición actual.
Enhorabuena a los ganadores. Su visión y el trabajo en equipo con nuestros diseñadores ha dado lugar a un coche verdaderamente atractivo. La colaboración con Mattel para las próximas ediciones del concurso de diseño de Polestar y los venideros modelos a escala de nuestros coches de producción proporcionarán una mayor popularidad a la marca y al concurso. Todo ello demuestra que los vehículos eléctricos —reales o como juguetes— pueden ser tan excitantes como los vehículos de combustión, si no más”, comentó Thomas Ingenlath, presidente ejecutivo de Polestar
Se puede percibir en su interior esta orientación hacia la competición. Incorpora un único asiento, que además exhibe sus pertinentes arneses de seguridad, como si estuviera dispuesto a acoger a su piloto en cualquier momento para adentrarse en un circuito, aunque en realidad sea una maqueta. Son numerosas las pantallas presentes en este habitáculo, que cuenta con detalles en tonos amarillos, ya habituales en algunos modelos de la marca de origen sueco. Para acceder a él, se levanta el cristal a modo de cúpula que lo recubre, como si se tratara de un avión de combate.
Y es que, a la vista de su silueta, el Polestar Synergy es un hipercoche que no nos sorprendería ver formando parte de la parrilla de salida de cualquier carrera de resistencia en la actualidad. Para cohesionar las dos ideas distinguidas con el diploma acreditativo de haber ganado el concurso de diseño, el equipo de Polestar trabajó durante seis meses con los firmantes de las propuestas originales. Sus nombres, por cierto, están inscritos en la carrocería, justo tras la ventanilla y junto con su correspondiente bandera nacional, al estilo de cualquier coche de ralis.
Una vez que finalice el Salón del Automóvil de Múnich —el próximo día 10 de septiembre— esta maqueta del Polestar Synergy comenzará una gira que permitirá obsevarlo en vivo en diferentes lugares del mundo. Comenzando por Estados Unidos, este concept seguirá la ruta marcada por los Hot Wheels Legends Tour, antes de transformarse en una de estas miniaturas.
David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS