El año 2021, lejos de hacer olvidar el nefasto 2020 gracias a la recuperación y al regreso a la normalidad, está haciendo olvidar el pasado por mantener la desazón y las malas predicciones que, ahora, parece que podrían llegar a 2022 e incluso a 2023. Así al menos lo afirman desde Volkswagen, fabricante que ya vaticina que la crisis de los semiconductores no acabará en 2022 y que estará haciendo estragos hasta 2023.
Posiblemente, la crisis de los semiconductores sea un tema menor para mucha gente, ¿Qué más da si fabrican un millón de coches menos? Tampoco es para tanto, ¿no? El tema es que resulta ser mucho más complejo, porque al fabricar ese millón de unidades menos, empiezan a peligrar los puestos de trabajo, tanto directos como indirectos (no olvidemos la cantidad de trabajo que genera esta industria de forma indirecta…). Vamos, que no nos hemos recuperado del palo que nos ha dado la pandemia y vamos directos a por otro, sin contar con la aparición de variantes del virus y demás, aunque esto ya es tema para que lo traten otros.
La noticia la ha publicado el medio alemán Manager Magazin y en ella se puede leer que Volkswagen se está preparando para un año 2022 complicado. La predicciones de los especialistas de la marca aseguran que la crisis de los chips durará hasta 2023, haciendo caer la producción hasta los 8 millones en 2022, frente a los 9 millones en 2023. De hecho, también se espera que 2021 registre pérdidas.
Desde la compañía, hicieron unas declaraciones a Reuters en las que se afirmaba, que estaba previsto una reducción de la escasez de semiconductores en 2022, pero era una reducción pequeña y durante toda la primera mitad del año las cosas serían delicadas y poco estables. BMW y Mercedes tienen previsto una situación similar, con un año 2022 complicado, al menos al inicio. En Porsche también preveen un futuro difícil, según el CEO de la marca, Oliver Blume, cualquiera que crea que la crisis de los chips se calmará el próximo año está muy equivocado.
Se estima que la escasez de semiconductores cuesta a la industria 210 millones de dólares en ingresos perdidos y se han producido cerca de 7,7 millones de vehículos menos.
En Estados Unidos, por ejemplo, se cuenta que marcas como Ford, tienen superficies gigantescas ocupadas por vehículos que parecen estar terminados, pero en realidad están esperando que haya stock suficiente de chips para terminar con su montaje. En España también se pueden encontrar zonas con enormes cantidades de vehículos esperando, pero lo peor son los paros en la producción en diferentes plantas.
Una de las soluciones que han encontrado algunos fabricantes para aliviar el problema, es eliminar ciertas versiones del catálogo. De hecho, se han eliminado, por lo general, las versiones de acceso a distintos modelos, obligando a concentrar las ventas en las variantes que más beneficios aporta. Gracias a esto, en BMW, por ejemplo, se espera que haya un incremento de los beneficios con respecto a los números de los últimos meses cuando arranque 2022.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS