La casa de subastas RM Sotheby’s tendrá entre sus filas para la próxima subasta de Monterey (California) un Ferrari 250 GTO de 1962, tal vez el mejor vehículo de toda la colección, por lo que se convertirá en una de las subastas más emocionante hasta la fecha. El 250 GTO fue, por méritos propios, la última y mejor evolución de la famosa familia 250 de Ferrari, que se estrenó en 1953 y terminó con los últimos GTO en 1964.
En total, solo se produjeron 36 ejemplares de los 250 GTO, todos los cuales han sobrevivido a nuestros días. Considerado ampliamente como el diseño más bello de la casa del cavallino, el modelo en cuestión fue uno de los coches de carretera/carreras más exitosos que la marca haya construido, y se adjudicó la victoria general o la primera de su clase en casi 300 carreras en todo el mundo.
Décadas más tarde, el Ferrari 250 GTO se ha convertido en el “Santo Grial” de cualquier coleccionista de coches, gracias no solo a su increíble pedigrí, sino a un grupo de coleccionistas franceses que organizaron la primera reunión de propietarios de GTO en 1982. Ocurre cada cinco años y, desde sus inicios, la única entrada en este exclusivo club es la propiedad, haciendo que el GTO sea el boleto más popular en el mundo de los colectores de automóviles.
“Estamos encantados con la oportunidad de ofrecer un legendario Ferrari 250 GTO en una subasta”, dice Shelby Myers, especialista en coches de RM Sotheby’s. “Debido a la evolución de la tecnología y de las normas de seguridad que siguieron, el GTO fue el final de una era en la que los pilotos realmente se ensuciaban las manos. Este fue el último coche que podía estar aparcado en tu garaje, ser llevado hasta pista, ganar la carrera y, luego, conducir con él de vuelta a casa.”
Este Ferrari 250 GTO con chasis nº 3413 GT, es el tercero de las 36 unidades construidas y comenzó su vida como un coche de primera serie
Bajo las instalaciones de Ferrari, el GTO fue el coche de pruebas conducido por Phil Hill para la carrera de Targa Florio de 1962. El coche fue vendido a su primer propietario, uno de los clientes de corsarios favoritos de Ferrari, Edoardo Lualdi-Gabardi. El piloto italiano entró con el GTO en diez carreras a lo largo de 1962, ganando todas menos una (en la que se colocó 2º en la clase) y asegurándole el campeonato nacional italiano GT ese año. El increíble éxito en pista de Lualdi-Gabardi con uno de los primeros GTO contribuyó significativamente a consolidar lo que se convertiría en la leyenda y legado del Gran Turismo Omologato como se conoce hoy en día.
El Sr. Lualdi-Gabardi recibió un segundo GTO en 1963 con chasis nº 3413 que, poco después, fue a parar a manos del piloto de carreras Gianni Bulgari. Bajo la propiedad de Bulgari como del subsecuente Corrado Ferlaino, el GTO ganó fácilmente en su clase en el Targa Florio de 1963 y 1964. El deportivo italiano impugnó un total de 20 carreras en un período donde nunca estuvo involucrado en un accidente y tan solo una vez no pudo terminar. Un caso raro y una hazaña increíble para cualquier vehículo de carreras.
El chasis nº 3413 es uno de los cuatro GTO mejorados por el carrocero Scaglietti y uno de los siete en lucir esta carrocería
Después de sus años como corredor, el GTO ha pasado por una cadena ininterrumpida de propietarios que incluyen a algunos de los coleccionistas más importantes de Ferrari. En el 2000 fue adquirido por su actual propietario, el Dr. Greg Whitten, presidente de Numerix, entusiasta de los coches y exarquitecto jefe de software en Microsoft. Bajo la propiedad de Whitten, el GTO ha competido en eventos de época en todo el mundo durante las últimas dos décadas, así como en cuatro de los recorridos de aniversario del GTO. Maravillosamente mantenido en condiciones originales, se estima que este 250 GTO pueda alcanzar un precio comprendido entre los 38 y 51 millones de euros, lo máximo que se haya ofrecido nunca en una subasta.
El trabajo de carrocería de Scaglietti en esta unidad añadió un spoiler trasero e intermitentes bajo los faros principales. Con un interior cuyos asientos están tapizados en tela de color azul, encontramos en el vano un motor V12 tipo 168/62 competizione, un motor de 250 GT con especificaciones GTO. Aunque la caja de cambios y el eje trasero son los originales con los que el coche salió de la fábrica de Ferrari, el motor de serie fue guardado como oro en paño y convenientemente conservado, incluido en el precio, aunque no montado.
“No puedo pensar en un lugar mejor que nuestro evento de Monterey, una subasta que ha sido testigo de la venta récord de algunos de los automóviles más importantes de la historia, donde presentaremos un ejemplar tan excepcional de coche del carreras más exitoso de Ferrari y el más buscado del mundo, punto final”, agregó Myers.
Si queréis ver más imágenes, tanto actuales como históricas de este ejemplar, acudid a la página de RM Sotheby’s, nunca lo veréis tan de cerca.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS