El mundo de los rallyes siempre ha sido el lugar casi perfecto, para el nacimiento de grandes máquinas. Coches como los Ford Cosworth, el Mitsubishi Lancer EVOLUTION, Lancia Delta HF Integral o, como no, el Subaru Impreza WRX STI. Coches que han robado el sueño de cientos de miles de aficionados, ocupando las paredes de los más jóvenes y las cuentas corrientes de aquellos que se lo podían permitir y coches que ahora tienen su réplica en el Toyota GR Yaris.

Por ahora, podemos considerar al Toyota GR Yaris como un auténtico heredero de los rallyes, mientras que el resto de coches mencionados no son más que un mero recuerdo y una inversión al alza en el mercado de los coches usados. Los precios suben cada año, alcanzado cifras poco coherentes, aunque subirán más después del último lanzamiento de Subaru, sobre todo echando un ojo a su diseño. Se ha puesto en circulación, o se pondrá en poco tiempo, el nuevo Subaru WRX, probablemente el último WRX con motor de combustión y probablemente, un coche que tendrás que conformarte con mirar en fotos.

El Subaru WRX, o Impreza WRX como lo conocemos por estos lares, nació con el único objetivo de arrasar en el Mundial de Rallyes. Llegó para reemplazar el Legacy RS RA allá por 1992 y desde entonces, se ha convertido en un mito. Cada generación del Subaru Impreza WRX ha sido más rápida y eficaz que la anterior, un coche de competición homologado para circular por vías públicas, aunque esto cambió hace unos años. Subaru no está presente en el Mundial de Rallyes y el WRX se transformado en una “simple” versión potente y rápida, mucho menos radical que antes y también, mucho menos racing y pasional.

Con rasgos del Subaru Levorg

Desde hace algunos años, el Subaru WRX no llega a tierras europeas y tampoco lo hará la quinta generación del modelo, que presume de ser la más tecnológica. Sin embargo, estéticamente también parece la menos racing y radical, con unos pasos de rueda y unos paragolpes que lucen unas protecciones plásticas muy “crossover”. Las tendencias de mercado actuales y los directivos de las marcas, son culpables de este tipo de acciones, que afean un poco la historia del modelo y difuminan tanto su enfoque deportivo como el cliente objetivo. ¿Este coche busca los mismos clientes que anteriormente o quieren abrir el abanico con nuevos potenciales clientes?

Olvidando un poco este tipo de cuestiones, puramente banales y claramente influenciadas por gustos personales, no podemos pasar por alto que el diseño del nuevo Subaru WRX está inspirado en el Subaru Levorg. El frontal es casi el mismo, cambia la parte baja del paragolpes y la rejilla de la calandra (de tipo panal de abeja en el WRX). El nervio que recorre el lateral desde el paso de rueda frontal hasta el paso de rueda trasero, también parece inspirado en el Levorg, aunque en WRX tiene una carrocería mucho más musculada, con unas caderas bastante anchas y marcadas.

Justo en la parte contraria al frontal, eso es, en la trasera, encontramos nuevamente un aire crossover que no gustará a los más acérrimos del Subaru WRX. La parte baja del paragolpes luce una enorme pieza de plástico negro bajo la cual, aparece un minúsculo difusor y cuatro salidas de escape, colocados dos a dos. Aquí no hay rasgos del Levorg, al menos no son tan evidentes, aunque se nota claramente la falta del característico alerón sobre la tapa del maletero, una pieza que debería montar el STi, del que por el momento no se sabe nada.

No podemos negar que desprende cierta agresividad, muy típica de Subaru, pero como muchos de los diseños actuales, resulta muy pesado a la vista. Es un coche con mucha chapa a la vista y poca zona acristalada, con unos pasos de rueda de formas cuadradas que debido a sus protecciones plásticas destacan demasiado. Le falta la ligereza de otras generaciones, da la impresión de tener un peso elevado.

Subaru Global Platform, nueva plataforma pero mismo motor

La quinta generación del Subaru WRX no solo llega con nuevo diseño, también hace uso de una nueva plataforma que mejora en todo a la anterior, siempre según los datos de la propia marca. La rigidez torsional ha aumentado en un 28 %, mientras que la rigidez del monta de anclaje de la suspensión aumenta nada menos que un 75 %. La dirección, de doble piñón, es más precisa y su “feeling” es más natural según afirman desde la marca, al tiempo que destacan, como siempre, el empleo del sistema “Subaru Symmetrical AWD” y el “Active Torque Vectoring” (sistema de reparto de par vectorial).

Se espera que el nuevo Subaru WRX sea uno de los sedanes más deportivos del mercado, sobre todo por comportamiento, aunque ofrecerá una versión “GT” con suspensión de control electrónico con tres posiciones: comfort, normal y sport. También cuenta con modo de conducción a través del mando SI-Drive con muchas opciones de personalización.

Bajo el capó los cambios son pocos. Se mantiene el bloque de cuatro cilindros boxer, pero aumenta la cilindrada hasta los 2.4 litros para rendir una potencia similar, 202 kW (275 CV) y 349 Nm de par entre 2.000 y 5.200 revoluciones. Solo rinde tres caballos más, mientras que el par es el mismo. El cambio es manual de seis relaciones, pero se puede solicitar con un cambio CVT con levas en el volante (a todas luces, una transmisión poco acertada), que ofrece ocho posiciones prefijadas.

Interior nuevo, más digitalizado

Entrar en su habitáculo es entrar en un nuevo mundo para el Subaru WRX, donde el diseño es muy similar a otros modelos de la marca, pero destaca por la adopción de una enorme pantalla para el sistema multimedia. Una pantalla de 11,6 pulgadas colocada en posición vertical, al más puro estilo Tesla, que por primera vez en Subaru, ofrece función de pantalla dividida. El resto es “muy Subaru”, con un diseño general sobrio pero de buen aspecto general.

Hay fibra de carbono, costuras rojas y un equipo de sonido Harman Kardon junto a unos nuevos asientos Recaro. Si se quiere contar con todos los sistemas ADAS que se puedan encontrar actualmente, hay que seleccionar las versiones con cambio automático.

No se han comunicado precios ni llegada al mercado, que se espera para comienzos de 2022, aunque también se espera que no llegue a Europa, como las últimas generaciones.

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