Si hay un lanzamiento al que estamos esperando como agua de mayo, es, sin duda, el Pagani C10. No hay creación de esta firma italiana que deje indiferente a nadie y con el C10, el reemplazo del Huayra, es lógico esperar nuevamente un bombazo. Hasta el momento, la firma de Horacio Pagani ha sabido muy bien administrar sus pasos, lanzando un único modelo en cada ocasión, lo suficientemente bueno como para aguantar en el mercado muchos años sin que su diseño, ni sus prestaciones, noten el paso del tiempo. Es más, ahí está el sensacional Pagani Zonda, que se ha negado a morir gracias a los clientes, que no dejan de pedir nuevas versiones super exclusivas.
Ya vimos un pequeño adelanto a través de la publicación de una imagen del modelo, pero no del modelo real, sino de una recreación digital que cuadraba bastante con las formas que se atisbaban bajo la tonelada de camuflaje que llevan todas las unidades de desarrollo, así como por la publicación, junto a la imagen, de unos documentos donde aparecía el nombre de Pagani C10. Denominación, por cierto, que no era oficial, al menos de momento. El próximo Pagani podría llamarse así o no.
Por aquel entonces, también se habló sobre su fecha de presentación: el mes de septiembre y al parecer, es una fecha totalmente acertada, pues se espera que el Pagani C10 debute oficialmente en un par de semanas, en Milán. Pagani ha publicado un breve “clip” en Instagram, donde aparece Horacio dibujando en una hoja de papel y, aunque no se aprecia gran cosa, sí que aparece el nombre de “C10”, así que podría ser, finalmente, el nombre oficia del sustituto del Pagani Huayra. Ojo, que aparezca la denominación C10, no quiere decir que sea la que Pagani use en el modelo de producción…
Está claro que su presentación será uno de las más esperadas del año, y por ahora, sabemos muy pocas cosas. Podemos afirmar, sin miedo a equivocarnos, que tendrá un motor V12 biturbo de origen Mercedes, el mismo que se encuentra tras los asientos del Pagani Huayra, al que debería superar en potencia. El Huayra BC, el más potente hasta el momento, rinde 754 CV, pero se espera que el Pagani C10 no baje de 800 CV, incluso se ha llegado a decir que podría rondar los 900 CV.
Se dice, aunque no con mucho entusiasmo, que el Pagani C10 podría contar con electrificación, es decir, que será un híbrido. Pagani anunció en 2018 que estaba trabajando en el desarrollo de un modelo eléctrico, pero sus clientes no quieren esos coches y se detuvo el trabajo para centrarse, hasta que sea posible, en los motores V12, que es realmente lo que quieren aquellos que se pueden permitir el lujo de llevarse a casa un Pagani. Evidentemnete, la normativa europea, que dará cierta tregua a los fabricantes de nicho, tiene mucho que ver en esa decisión. La producción de Pagani es muy, muy reducida y sus coches no se usan todos los días, su aportación a la polución general es ínfima.
De todas formas, merece la pena recordar que el próximo Pagani C10 se ofrecerá con cambio manual, una auténtica rareza en el mercado, sobre todo teniendo en cuenta que no hay deportivos con motores V12 y cambio manual desde hace décadas. Ni siquiera el Huayra tiene cambio manual y eso, por cierto, les hizo perder ventas y provocó que Horacio decidiera ofrecer esa opción en su reemplazo.
Hay algunos clientes que no compraron el Huayra porque no lo ofrecimos (el cambio manual). Mis clientes quieren sentir emociones al conducir: no les importa el puro rendimiento o el tiempo de los cambios. Hoy en día, los doble embrague de alto rendimiento como Ferrari, han llegado a ser tan perfectos que usarlos de forma automática o manual es lo mismo. Si usted quiere dar un paseo un domingo por la mañana, quiere estar involucrado en la conducción. Mire el T.50 de Gordon Murray: se agotó a pesar de que ‘solo’ tiene 650 CV. Es muy ligero, tiene caja de cambios manual y un V12 que va muy alto. No necesitas 2.000 CV para emocionar al conductor”. – Horacio Pagani en declaraciones a Quattroroute
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS