Hay que ver la que se ha montado con el Alfa Romeo Milano. En lugar de ser noticia por la novedad que representa y por todo lo que puede aportar a la marca, resulta que su denominación ha creado todo un debate político que les ha obligado a cambiar el nombre del modelo, cinco días después de su presentación. Así, ya no es Alfa Romeo Milano, es Alfa Romeo Junior, haciendo uso de un nombre con mucha historia en la marca.

Según parece, un funcionario del gobierno italiano, el ministro de Industria Adolfo Urso, declaró que el nombre “Milano” estaba prohibido por ley, básicamente, porque el coche no se fabricaba en Italia –se fabricará en Polonia–, unas declaraciones que, para muchos, es llevar la normativa a un extremo sin sentido. Sin embargo, Alfa Romeo, en un comunicado con una enorme franqueza, anunció que el nombre del coche pasaría a ser el de Junior, a pesar de que desde la marca creen que el nombre cumple con todos los requisitos legales y que, además, hay cuestiones mucho más importantes que el nombre de un nuevo coche.

Urso afirma que el nombre es una indicación engañosa de que el coche se fabrica en Italian y se basa en una ley introducida en 2002 para proteger el etiquetado de origen de diferentes productos, como vinos o quesos. Una interpretación totalmente inusual de una normativa que ha provocado que el señor Carlos Tavares, CEO de Stellantis, haya salido a la palestra para dejar claro que Urso ha confundido productos como la pasta o la pizza, con coches. Es más, afirma que el coche es totalmente italiano porque se ha diseñado y concebido en Italia por italianos, solo se fabrica en otro lugar porque sale más barato y acaba declarando que hoy, Europa es un lugar con un proteccionismo exagerado, cuando resulta que viajamos de un lugar a otro sin mostrar documentos porque somos parte de un “país ampliado”, de una Europa común.

El cambio de nombre decidido por la marca, busca promover un entendimiento mutuo, pero de paso, le agradecen al gobierno italiano la publicidad generada por este debate, que además, le otorga al coche una historia más que interesante de cara al futuro del modelo. Sobre todo cuando ya lleve tiempo fuera de catálogo y empiece a estar mejor visto como clásico.

Jean-Philippe Imparato, el CEO de la marca, ha comentado que: Somos perfectamente conscientes de que este momento quedará grabado en la historia de la marca. Es una gran responsabilidad, pero al mismo tiempo es un momento emocionante. La elección del nombre Junior es completamente natural, ya que está fuertemente ligado a la historia de la marca y ha estado entre nuestros favoritos y entre los favoritos del público desde el principio. Como equipo, elegimos una vez más compartir nuestra pasión por la marca y hacer del producto y de nuestros clientes la prioridad. Decidimos cambiar el nombre, aunque sabemos que no estamos obligados a hacerlo, porque queremos preservar la emoción positiva que siempre han generado nuestros productos y evitar cualquier tipo de polémica. La atención que hemos recibido en los últimos días a nuestro nuevo compacto deportivo es bastante emocionante, ya que tuvimos un número sin precedentes de visitas al configurador en línea, lo que provocó que el sitio web se bloqueara durante un par de horas.

El nombre Junior no es nuevo en Alfa Romeo, ya se empleó en la década de los 60 para un coche, el Alfa Romeo GT 1300 Junior, el cual se presentó en Balocco el 26 de septiembre de 1966. El nombre también se empleó en algunas versiones del Alfa Romeo Spider y para el Alfa Romeo GTA 1300 Junior.

Alfa Romeo GT 1300 Junior

Alfa Romeo GTA 1300 Junior

Alfa Romeo Spider Junior