Victoria de Hamilton gracias a la estrategia ganadora de Mecedes, algo impensable, pues los Ferrari de Leclerc y Vettel salían en la primera línea de parrilla. La “campanada” del fin de semana la dio Verstappen, tanto en clasificación como en carrera, pero no por nada positivo.

La clasificación nos traía la sorpresa de Verstappen que, con un coche mucho más afinado que el resto, se colaba en la pole en la Q3. Por detrás le seguían los Ferrari de Leclerc y Vettel, seguidos a su vez por Hamilton, Albon y Bottas, que tenía un accidente muy aparatoso en los últimos compases. Sainz y Norris aupaban a la séptima y octava plaza a los McLaren, que se habían comportado con un ritmo muy consistente el fin de semana.

Pero la parrilla de salida no quedaría así. Verstappen hablaba con la prensa y confesaba que no había frenado con las banderas amarillas del accidente de Bottas, mejorando su tiempo anterior y consiguiendo la pole. Esto evidentemente incumple el reglamento, lo que propició la investigación de los comisarios. Sanción de tres posiciones por hablar demasiado, saliendo cuarto. La pole era para Leclerc.

Comenzaba la carrera en Ciudad de México y en la salida Verstappen vuelve a liarla. Impacta con Hamilton, al que rompe parte del fondo plano de la parte izquierda y se sale de la pista, perdiendo posiciones. Aunque esto no sería todo. Su neumático trasero izquierdo tenía un pinchazo, así que tenía que entrar en boxes a cambiar gomas, saliendo el último. No sería su última polémica, pues a lo largo de la carrera en su remontada ha realizado varios adelantamientos peligrosos, impactando contra algún otro piloto.

Ahora, un inciso. Me parece totalmente impresentable la actitud de este chaval. Parece que piensa que está jugando a algún videojuego de carreras en modo “Dios”, sin tener daños en su coche en caso de impacto. Me parece una falta de respeto hacia este deporte y el resto de sus compañeros.

Mientras tanto, Sainz aprovechaba el rifirrafe entre Hamilton y Verstappen para situarse en cuarta posición, tras Leclerc, Vettel y Albon. Su compañero Norris también hacia una buena salida, llegando hasta la sexta plaza. Si hubiera acabado la carrera en la vuelta cuatro, el resultado de McLaren habría sido espectacular. Pero había 71 vueltas por completar y el sueño inicial se convertiría en pesadilla.

Leclerc entraba muy pronto a cambiar neumáticos, destapando su estrategia de dos paradas. Mientras los dos Mercedes y Vettel, que circulaba en cabeza, se quedaban fuera. Sainz le seguía, entrando temprano copiando su estrategia, poniendo duros -blancos-. Esto sería el comienzo de la pesadilla para el español, que no tenía ritmo con estas gomas. Parece que al McLaren se le tragantaba este compuesto.

Por delante, Leclerc iba escalando posiciones, pero debía entrar en boxes de nuevo. Hamilton entraba en boxes para intentar el undercut a Vettel, que se mantenía en pista. El ritmo del inglés era muy bueno e iba recortando tiempo a Vettel poco a poco.

Tras todos los cambios de neumáticos terminados, Hamilton encabezaba la carrera, seguido de Vettel, Botas y Leclerc. Parece que al monegasco siempre le toca la estrategia mala, penalizándole en exceso. Sin embargo, a veinte vueltas para el final, parece que iba a llegar a los tres primeros, aunque una pasada de frenada ha roto sus planes.

Finalmente, Hamilton se ha llevado la victoria, seguido de Vettel y Bottas. Leclerc se ha tenido que conformar con la cuarta posición, saliendo desde la pole. Sainz terminó el 13º, en una carrera que ha demostrado que una parada era la decisión más óptima.

Próxima carrera en Estados Unidos la semana que viene. Si queréis consultar las clasificaciones, podéis pasaros por nuestra página de Fórmula 1.