El SEAT Toledo 1M, o dicho de otra forma, el SEAT Toledo de segunda generación, es uno de los mejores modelos que ha tenido la firma española desde que entraron en la órbita de Volkswagen. Tenía diseño, prestaciones, una terminación más que decente y motores potentes. No debemos olvidar, que el SEAT León, era básicamente un Toledo al que habían cortado el pequeño tercer volumen y le habían modificado ligeramente el carácter para hacerlo más deportivo y juvenil. Pero solo ligeramente, porque si de algo presumía el Toledo, era de comportamiento en carretera y de eficacia. Sobre todo cuando se trataba de versiones como el SEAT Toledo 1.8 20vt Sport.
SEAT reemplazó, con el Toledo 1.8 20vt, al Toledo V5, el máximo exponente en la gama del Toledo. Se perdía cierta categoría al dejar de lado un motor como el V5 atmosférico, pero el mítico 1.8 de 20 válvulas turboalimentado no era precisamente un mal motor, más bien todo lo contrario, y su presencia sirvió para que el Toledo ganara en prestaciones y en respuesta al acelerador, entre otras cosas, como un mayor carácter por el temperamento del motor. Además, con esta versión, en acabado Sport –también se podía escoger con acabado Signa–, el Toledo se ponía a la altura del Škoda Octavia RS, un modelo con el que compartía motor y que gracias a su puesta a punto y a su relación precio-prestaciones, se ganó el respeto de la prensa especializada y también de los aficionados.
De hecho, la prensa especializada no tenía más que halagos para el bloque 1.8 20vt, y no por sus 180 CV, sino que las alabanzas era para todas las versiones, desde el menos potente de 150 CV, hasta el más prestacional con 225 CV. Solo había una pega con este motor, o eso se decía, y es que cuando se exprimían todas sus capacidades, el consumo se disparaba, fácilmente, hasta los 15 litros cada 100 kilómetros.
El motor 1.8 20vt siempre fue un buen propulsor, y todos los modelos que lo montaban siempre presumieron de buenas prestaciones. La velocidad máxima, por ejemplo, era de 229 km/h, mientras que el 0 a 100 km/h lo completaba en ocho segundos, los 400 metros se completaban poco después, ya que SEAT afirmaba que los recorría, desde parado, en 15,7 segundos. El kilómetro con salida parada lo completaba en 28,5 segundos y entre los datos interesantes, el 0 a 160 km/h lo podía hacer en 18,6 segundos.
Pero no todo eran datos, porque el Toledo destacó por una buena relación calidad-precio, de hecho, una de las mejores. Si lo comparamos con su hermano aquí mencionado, el Octavia RS, el SEAT Toledo 1.8 20vt era más barato y no por ello más lento o peor. SEAT pedía por el Toledo 1.8 20vt Sport 21.305 euros en 2002, si sumamos inflación, el precio actual sería de 33.853,64 euros. Es decir, todavía mantendría una gran relación calidad-precio frente a muchos rivales.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".La principal diferencia era la ausencia de la quinta puerta respecto a la generación anterior y a su primo-hermano, que le restaba bastante versatilidad.
Eso es. Un pequeño fallo en cuanto al planteamiento del coche. Y lo podrían haber “corregido” tras el lanzamiento del León, porque este sí tenía cinco puertas y no creo que hubiera sido difícil adaptar la carrocería.