La marca americana ha presentado en Los Ángeles su nuevo pick-up de doble cabina con una estética bastante similar a la del Wrangler, en la que se mantiene la icónica parrilla de siete ranuras de la marca. Se podrá adquirir con sendos motores V6: un 3.6 gasolina –probablemente el más demandado al otro lado del charco- con la posibilidad de montar un cambio automático de ocho velocidades o manual de seis, y un EcoDiesel de 3 litros con cambio automático de ocho velocidades -disponible en 2020-.
Sus capacidades como “mula de carga” son notables: hasta 725 kg de carga útil en su caja y hasta 3.470 kg de capacidad de remolque con el paquete que Jeep denomina Max Towing (opcional).
Sus cualidades como todoterreno son cortesía de los sistemas Command-Trac y Rock-Trac (tracción en dos ruedas o cuatro, con o sin reductora), bloqueo electrónico de los ejes delantero y trasero, diferencial de deslizamiento limitado, desconexión electrónica de la barra estabilizadora -exclusiva en el segmento- y los neumáticos todoterreno de 84 cm de diámetro.
Cuenta con una capacidad de vadeo de 76 cm, ángulo de ataque de 43,6 grados, ventral de 20,3 grados, de salida de 26 grados y una altura libre al suelo de 28 cm
Utiliza un esquema de suspensión de cinco brazos en la suspensión delantera, que utiliza un brazo de control lateral y cuatro brazos de control longitudinales. Las barras Panhard hechas de acero forjado controlan el movimiento lateral del eje con un mínimo cambio de ángulo durante el recorrido de la suspensión. El esquema de la suspensión trasera de cinco brazos, cuenta con dos brazos de control de acero forjado superiores e inferiores para el control longitudinal y, al igual que en el delantero, con una barra Panhard para el control del eje lateral. Los brazos de control están ubicados debajo de los largueros del chasis.
Para el infoentretenimiento, el archiconocido Sistema Uconnect de cuarta generación compatible con Apple CarPlay y Android Auto y la posibilidad de elegir entre pantallas táctiles de 7 u 8,4 pulgadas en función de los acabados, que serán cuatro: Sport, Sport S, Overland y Rubicon. De manera exclusiva para el Rubicon, cuenta con una cámara todoterreno delantera situada detrás de la ranura central de la parrilla, que permite ver con facilidad los obstáculos del camino.
El cuadro de instrumentos puede disponer de una pantalla LED de información TFT de 3,5 o 7 pulgadas, según versiones. En cuanto a iluminación, los Overland y Rubicon llevarán faros y luces antiniebla de tipo LED y en la parte trasera, pilotos con iluminación LED opcional.
Para los amantes de los safaris, contará con un parabrisas plegable -una barra en la parte superior conecta los pilares A y permanece en su lugar incluso cuando el parabrisas está plegado, permitiendo que el espejo retrovisor también siga en su sitio al plegar el parabrisas- puertas desmontables de aluminio, en las que como curiosidad se indica el tamaño de la punta Torx directamente en la bisagra para eliminar las dudas sobre qué punta se necesita para desmontar las puertas.
Por suerte el kit de herramientas con las puntas Torx necesarias para quitar las puertas y bajar el parabrisas se proporciona como equipamiento de serie. Cuenta también de fábrica con un techo blando con posiciones de apertura parcial y total, además de cristal trasero desmontable, mientras que las versiones Overland y Rubicon comparten el opcional del techo rígido de tres piezas disponible en el color de la carrocería.
Además, y de manera opcional, todas las versiones podrán montar una fuente de alimentación externa cubierta de 400 vatios y 115 voltios para alimentar consumidores eléctricos en la caja.
Se comenzará a vender en EEUU en el segundo trimestre de 2019, desconociéndose su fecha de venta en el viejo continente.
Adrián Iniesta
Ingeniero electrónico industrial de profesión y amante de los coches por vocación. Dicen que aprendí a leer con las matrículas de los coches y que con 2 años me conocía todas las marcas y modelos. Cualquier cosa que me discutas sobre coches, te la intentaré rebatir ;)COMENTARIOS