Mercedes-AMG volverá a usar un motor V8 en 2026 para el C63. Al menos eso dice un informe del que se han hecho eco infinidad de medios y no es para menos, ya que supondría un duro palo, tanto económico como moral. La apuesta por la electrificación es obligada, pero quizá, y solo quizá, en Mercedes han creído demasiado en la confianza de los usuarios…

Es de sobra conocida la polémica que se creó con el Mercedes-AMG C63 y su motor de cuatro cilindros turbo e híbrido enchufable. Sí, tiene más de 600 CV, pero en AMG han tenido que darse de bruces con una realidad: la gente no compra un AMG si tiene un motor de cuatro cilindros, a no ser que hablemos de un A45. Y este, para colmo, no lo compran los típicos clientes de AMG. ¿Qué significa esto? Que aquellos que compran un AMG, solo quieren “motores gordos”.

Desde que se presentó el modelo, han salido varias voces desde la marca defendiendo el grupo motor del C63. Incluso han llegado a comentar que la gente acabaría por entender el concepto, que se basa en la máxima tecnología, en un motor realmente avanzado y, aunque nadie quiera reconocerlo, es una verdadera obra de arte de la ingeniería. Pero eso no importa, o ponen un V8 o no van a vender ni uno solo. De hecho, quien lo haya comprado, será mejor que lo guarde, dentro de unos años podrían valer varios cientos de miles de euros como coche de colección.

El caso es que, según parece, ha salido a la luz un informe donde se dice que Mercedes-AMG volverá a poner un V8 bajo el capó del C63. Será para 2026, según la revista británica Autocar, quienes apuntan a fuentes anónimas dentro de la misma Mercedes. Las filtraciones, y más en cuestiones como esta, no existen o son muy raras, así que bien podría ser una estrategia de la marca. Actualmente todo vale para generar expectación y que hablen de ti, y con el barullo que se ha montado alrededor del motor de cuatro cilindros, es la solución perfecta.

No obstante, pensar que es una estrategia no quiere decir que sea mentira. De hecho, no sería raro que la marca quiera evitar que la gente critique su modelo y les haga desviar la atención hacia lo que, en verdad, ocurrirá, que sí, será el regreso del motor V8. De todas formas, el primero en recibir este ocho cilindros será el Mercedes-AMG CLE63, el bonito coupé de la marca, el cual, ya ha sido visto durante algunas pruebas en carretera abierta.

El mencionado informe también está acompañado de algunos datos sobre el motor. La base de partida es el actual V8 4.0 biturbo, pero contará, para la ocasión, con un cigüeñal plano. Además, se añadirá un sistema de hibridación ligera, tal y como se comentó desde la revista americana Road & Track recordando que hace no mucho, la propia marca les confirmó el desarrollo de un V8 electrificado de última generación y alta tecnología.

También merece la pena mencionar que, desde Mercedes-AMG, se afirmó que los motores V8 no desaparecerían, obviamente, mientras les dejen usarlos, claro. Uno de los ejecutivos de la marca, durante una reunión de inversores, comentó que “Mercedes-AMG planea superar el mercado de alto rendimiento, gracias a una línea de modelos muy renovada a partir de 2026 y una evolución estratégica de su cartera, que incluirá un V8 electrificado de alta tecnología de próxima generación y modelos eléctricos de alto rendimiento basados en AMG.EA –la plataforma para coches eléctricos de AMG–”.