¿Es posible que Aston Martin esté en uno de sus mejores momentos? Ha tenido mucha repercusión en Fórmula 1, lo que sirvió para que las ventas aumentaran, y no solo eso, han fichado al mejor ingeniero aerodinámico de las últimas dos décadas –el maestro Adrian Newey– y para rematar, tiene una oferta en catálogo que se postula como la más interesante y prestacional de los últimos años. Todo ello aderezado por el acuerdo de colaboración con Mercedes-AMG, quienes les suministran uno de los mejores V8 bitubo del mercado.
Así, pues, repetimos, ¿es posible que Aston Martin esté en uno de sus mejores momentos? Personalmente, me gustaría que así fuera, no voy a negarlo, justo ahora cuando la industria del automóvil viaja hacia un futuro incierto, este tipo de fabricantes siempre alegran el panorama con sus creaciones. Es cierto que la mayoría nos tendremos que conformar con ver las fotos, leer alguna prueba y verlos circular de vez en cuanto en eventos o en vídeos, pero, así es la vida del aficionado, ¿verdad?
Por eso, la etapa actual de Aston Martin es una de las más interesantes que ha tenido la compañía. Me recuerda a cuando Ford se hizo con el control de la marca británica y empezó a meter dinero para que sacaran nuevos modelos más avanzados, mejor fabricados, pero “auténticamente Aston”. Luego se quedó un poco en agua de borrajas, aunque a ellos les debemos coches como el Aston Martin DB7, por ejemplo. Sin embargo, ahora no están bajo el paraguas de nadie, así que no hay que convencer a dos grupos de accionistas, solo a uno y eso garantiza una mayor libertad. Además, los motores de AMG parecen sentarles como anillo al dedo.
Ahora, por si fuera poco, tiene una nueva mente pensante a mando, una que viene de haber estado al mando de casas como Bentley, lo que asegura experiencia y sí, conocimientos, Aston Martin no es un fabricante cualquiera, su producto es bastante especial, sus clientes son muy específicos y, ¿curiosidades de la vida?, son el cliente tipo que también se decantaría por un Bentley. Adrian Hallmark dirigirá los pasos de la compañía británica, de hecho, lo hace desde septiembre de 2024 y ya tiene muy claro cualquier debe ser el camino a seguir por la marca.
Y como cabe esperar, el camino que seguirá Aston Martin a partir de ya mismo, es el más lógico de todos: renovaciones de productos actuales, más opciones entre las que elegir y, sí, electrificación. Pero no hablamos de coches eléctricos, en esta ocasión se hace referencia a híbridos. El señor Hallmark pretende que la empresa sea rentable de forma continuada, la mayor odisea de quien ha estado al mando de Aston Martin, una empresa que ha sobrevivido contra viento y marea, con sus cuentas en números rojos durante décadas. Muchas otras marcas habrían desaparecido de encontrarse en una situación similar. Mirar, si no, a Volkswagen, todavía no ha entrado en números rojos y ya hay quien habla de quiebra o de serios problemas financieros de aquí a poco tiempo.
El primer paso, según parece, es ralentizar un poco las cosas. Hallmark afirma que Aston Martin necesita parar, respirar y analizar el futuro que tiene por delante. Según sus propias palabras: “nunca he visto tanta ambición. Cuatro coches en 18 meses. En 25 años, en cualquiera de las marcas con las que estuve asociado directa o indirectamente, nadie intentó eso. Pero nosotros [Aston Martin] lo hicimos”.
De todas formas, también deja claro, y reconoce, que esos coches no eran perfectos y que, además, hubo muchos retrasos por todo tipo de cosas. Tampoco había suficiente innovación para sacar provecho de esos coches. “Lo que tenemos que hacer es que aquellos clientes que compren un Vantage antiguo, un DB12, un DBX o cualquier otro, después de dos años, tengan una razón para comprar un Vantage mejor y, dos años después, otro Vantage”, comentó Hallmark. Al parecer, el ciclo de propiedad medio de un coche de superlujo es de alrededor de dos años y por eso se plantea las cosas cada dos años.
También comentó que: “Nunca habíamos tenido tanta intensidad en la innovación del ciclo de vida. Realmente hemos puesto mucho esfuerzo en los últimos meses en analizarnos a nosotros mismos y a la competencia y en desarrollar un plan para cada marca que la sostenga mejor a lo largo del ciclo de vida”. Esto se puede traducir de forma muy sencilla: veremos nuevos lanzamientos y versiones de los modelos actuales, como un hipotético descapotable del Aston Martin Valhalla.
Adrian Hallmark ha llegado a Aston Martin con una idea clara y no dejará piedra sin mover. El mejor ejemplo es una situación ocurrida en el seno de la marca. Según cuentan desde Top Gear Uk, Hallmark pidió al equipo que enumerara todas las opciones de cada marca de lujo, todos los extras que se podían añadir al coche base. Luego las sumó todas y dedujo la lista de opciones de Aston Martin para tener una idea aproximada, del dinero que se estaban dejando por el camino al no añadir determinadas cosas a la oferta.
Por ejemplo, podrían añadir cosas como línea de escape de titanio, llantas de fibra de carbono, un equipo de audio todavía más potente… Elementos que son muy caros, pero que dejan grandes beneficios en las arcas y muchos usuarios están dispuestos a pagar.
Otra cuestión importante es la hibridación. Los ingenieros de Aston Martin trabajan en la electrificación, pero no habrá muchas opciones, en realidad solo habrá un Aston Martin hibrido, que se verá acompañado por más modelos de aquí a 2030, pero siempre sobre coches ya en catálogo. El eléctrico también llegará en esta década, pues es importante de cara a la neutralidad de carbono que Hallmark se ha autoimpuesto como objetivo.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS