El deportivo Pantera es, y siempre será, el automóvil más famoso de De Tomaso, pero la marca fabricó otros deportivos igual de impresionantes. Este sorprendente De Tomaso Guara Barchetta derrotó al Pantera, al menos cuando se trata de llamar la atención, e incluso le pondría las cosas muy difíciles al nuevo De Tomaso P72. Solo existen 10 unidades de este modelo con la carrocería estilo barchetta, lo que lo hace muy especial, conozcamos su historia.

El Guara de 1996 tiene sus raíces en una serie de coches de carreras Maserati Barchetta construidos a principios de la década de 1990 para una serie monomarca, el Grantrofeo Monomarca Barchetta Maserati. Alejandro de Tomaso era propietario de Maserati en ese momento y tenía los coches de circuito construidos en su fábrica de Módena, junto con un prototipo de coche de calle, “Stradale”. Cuando Maserati fue adquirida por completo por parte de Fiat, De Tomaso alargó el chasis para sustituir el V6 de origen Maserati, dando cabida en su posición central a un motor V8 de BMW, creando el automóvil de calle Guara.

A día de hoy, si un particular cambia un V6 de Maserati por un V8 de BMW será poco menos que colgado del poste más alto, pero esto sirve para darse cuenta de que, incluso los fabricantes de mayor renombre, lo han hecho en alguna ocasión dando lugar a deportivos fascinantes. Alrededor de 52 fueron construidos a partir de 1993, la mayoría con carrocería de cupé, un par de ellos con carrocería Spider descapotable, y solo 10 con forma de Barchetta, capturando la esencia de los autos de carreras originales de la copa fundada por Maserati.

Este auto en particular fue comprado nuevo sin motor en 1996 por el jefe de Pantera Parts, lo que le permitió importarlo a los Estados Unidos, pero mantuvo su transmisión impulsando las ruedas traseras a través de una transmisión de seis velocidades. La palanca de cambios de corto recorrido y las luces traseras con listones son una gran muestra del diseño industrial italiano y del mimo que se le puso a este modelo. Pero nuestro detalle favorito es el espejo retrovisor de carbono que se encuentra en un tallo sobre el salpicadero acompañado del derivabrisas que apenas apartará un poco de viento de los sufridos ocupantes.

Este par de detalles nos retrotraen a las Leyendas de Targa Florio de principios de la década de 1970, como el Porsche 908, cuyos detalles comparte llevados al extremo debido a su origen de competición. Curiosamente, las barchettas de este De Tomaso Guara originalmente venían sin pantalla alguna, pero a esta se le ha dotado de esta para hacerla un poco más práctica para el uso en carretera sin estropear la apariencia o el atractivo del automóvil. De hecho, podrían decirnos que se diseñó tal y como está, y no tener que usar un casco necesariamente tiene un atractivo definitivo, aunque es probable que sea más que recomendable.

Si encuentras atractivo este De Tomaso Guara Barchetta y te sobran un buen puñado de billetes, está actualmente a la venta en Bring-a-Trailer, tendrás el coche perfecto para disfrutar del verano, con un buen bote de crema solar si no quieres que tu piel vaya a juego con el color del coche, claro.