2030 será la fecha en la que muchos fabricantes de automóviles dejarán de ofrecer vehículos de combustión interna, por lo que en la actualidad nos encontramos en un período de transición. Las marcas están destinando la mayoría de sus recursos en I+D para desarrollar nuevas plataformas modulares, así como mejores plantas motrices y baterías, por lo que no dejan de sucederse anuncios de modelos electrificados que van poblando el mercado.

Mercedes-Benz por su parte se está tomando muy en serio el camino de la electrificación, y es que la marca alemana destinará, desde 2022 hasta 2030, unos 40 billones de Euros en investigación y desarrollo de vehículos impulsados por batería (BEV). De hecho, Mercedes espera completar su gama electrificada a lo largo de este año, con coches de este tipo en todos los segmentos del mercado.

Actualmente, la gama electrificada EQ de Mercedes-Benz, se compone de SUV compactos y medianos como el EQC, EQB o EQA, berlinas de lujo como EQS, así como furgonetas como el EQV

La última incorporación en el portfolio de vehículos eléctricos de la marca de la estrella se trata del Mercedes-Benz EQE, que podremos ver próximamente en nuestro mercado, no obstante, hoy os hablaremos de su versión más prestacional, el Mercedes-AMG EQE. Este modelo supone el segundo coche eléctrico de gran tirada que recibe el tratamiento AMG, tras el EQS; un paso más en el camino de la electrificación total de la división deportiva de Mercedes.
Mercedes-AMG EQE.

El Mercedes-AMG EQE está construido sobre la plataforma EVA2, a la que se han aplicado soluciones específicas que afectan a la conducción, la estética o el sonido. La variante AMG del EQE contará con dos versiones: la de acceso EQE 43 4MATIC y la EQE 53 4MATIC+, más deportiva. Ambas versiones ofrecerán dos motores eléctricos, lo que les proporcionará tracción total variable debido a su configuración de un motor por cada eje. Por su parte, la potencia variará desde los 350 kW (467 CV) del EQE 43 4MATIC, hasta los 505 KW (687 CV) del EQE 53 4MATIC+. Este último, podrá contar con el paquete AMG DYNAMIC PLUS opcional, con un extra de par motor, cifra que se sitúa entre los 858 Nm y los 1000 Nm según la versión.

La versión EQE 53 4MATIC+ se podrá equipar con el paquete opcional AMG DYNAMIC PLUS, el cual añade el sistema de salida RACE START, con el que se podrán alcanzar los 100 kilómetros por hora en 3.3 segundos, además de aumentar el límite de velocidad hasta los 240 kilómetros por hora, entre otros añadidos

En cuanto a la batería, en ambas versiones se dispondrá de una capacidad de 90.6 kWh, que proporcionará una autonomía de entre 444 y 533 kilómetros. En el caso del EQE 53 la batería contará con una puesta a punto específica de AMG. El sistema, por su parte, podrá recargar en estaciones de carga rápida de corriente continua 180 kilómetros en tan solo 15 minutos, según el ciclo WLTP. Por otro lado, la batería se podrá recargar en estaciones de 11 kW u opcionalmente de 22 kW, con corriente alterna.

El chasis y la puesta a punto: lo mejorcito de AMG

La suspensión AMG RIDE CONTROL+, similar a la utilizada en el AMG EQS o el AMG GT Four-Door, ha sido optimizada según los requerimientos de AMG. Así, elementos como los brazos de la suspensión, las barras estabilizadoras o el subchasis trasero son ahora más rígidos, mejorando por tanto la efectividad de esta suspensión neumática con amortiguación adaptativa.

Además del hardware de la suspensión, los diferentes modos de conducción que se pueden seleccionar desde el volante, permiten modificar los parámetros de la misma, rebajando la altura o modificando la dureza según se busque un comportamiento orientado al confort o al rendimiento”

Junto a la suspensión, el sistema de dirección a las ruedas traseras estándar en ambos modelos ayuda a mejorar la agilidad tanto a baja, como a alta velocidad. Las ruedas posteriores pueden girar hasta un máximo de 3.6 grados en el sentido opuesto a las delanteras, por debajo de 60 kilómetros por hora, y en el mismo por encima de dicha velocidad; un factor diferenciador que consigue el efecto de acortar o alargar virtualmente la distancia entre ejes del vehículo, permitiendo así reducir el radio de giro para maniobrar, al tiempo que se aumenta la estabilidad a altas velocidades.

A lo anterior, hay que añadir un equipo de frenado compuesto por discos delanteros de seis pistones delante y uno detrás, con rotores de gran diámetro. Aunque, teniendo en cuenta la aceleración del modelo y el peso, que superará las dos toneladas, la opción de frenos carbonocerámicos, asociados a las llantas de 21 pulgadas, no es mala opción.

Finalmente, el broche en el manejo del AMG EQE lo ponen unos neumáticos especiales diseñados para cumplir con los requisitos de rendimiento de los vehículos eléctricos de AMG, tarea encomendada a Michelin, que ha desarrollado los Pilot Sport EV, diseñados para vehículos deportivos impulsados por electricidad.

Diseño made in AMG

Si AMG ha estampado su sello en el comportamiento dinámico del EQE, es obvio que también han hecho lo propio con el diseño del mismo. Al fin y al cabo, los coches que salen de la división de alto rendimiento de Mercedes-Benz siempre suelen destacar de entre la multitud.

En cuanto al diseño exterior del EQE, la versión AMG añade una parrilla negra con lamas verticales cromadas y el anagrama “AMG” característico. También se ha incorporado una proyección específica a los pilotos delanteros con tecnología DIGITAL LIGHT de serie, al abrir y cerrar el vehículo. Junto a estos añadidos, la zona inferior del paragolpes cuenta con elementos pintados en negro brillante, para destacar las entradas de aire del vehículo.

Los motivos en negro brillante continúan en las taloneras y llegan hasta el difusor trasero (funcional), específico para la versión AMG del EQE. Para rematar la zaga, un Spoiler de cola de pato se erige sobre la tapa del maletero, mejorando la eficiencia aerodinámica

El interior del EQE AMG se distingue del resto de la gama ofreciendo a sus ocupantes una atmósfera más deportiva, a la que ayudan sus asientos específicos. Éstos vienen de serie recubiertos por cuero sintético ARTICO con microfibra MICROCUT y costuras rojas. Para quien prefiera algo más “tradicional”, los asientos pueden estar tapizados en cuero Napa. En ambos casos, las placas AMG en el respaldo de los asientos y los escudos AMG cosidos en los reposacabezas vienen de serie.

En cuanto a los elementos que están directamente involucrados en la conducción, como es el caso de los pedales y el volante, también se les ha aplicado el tratamiento AMG. El volante de radios dobles achatado ha sido tapizado con cuero Napa micro perforado y cuenta con levas de aluminio en color plata para configurar los niveles de regeneración eléctrica. Los pedales deportivos, por su parte, son exclusivos AMG, rematados en aluminio.

Además del cuidado de los materiales y elementos presentes en el interior, también se han incorporado alfombrillas AMG y listones en el umbral con el distintivo AMG iluminado

Pasando al apartado del infoentretenimiento, ambos modelos podrán equiparse con la unidad MBUX Hypersescreen. Se trata de un novedoso sistema conformado por tres pantallas que se fusionan para formar una sola unidad de 141 centímetros de largo. El conductor dispone de un display de 12,3 pulgadas, a continuación una pantalla central de 17,7 pulgadas y finalmente, para el copiloto, una pantalla de 12,3 pulgadas cierra el conjunto que queda integrado como una sola unidad curvada. Además de las pantallas, el sistema incluye el asistente virtual de mercedes MBUX.

No hay duda de que los coches eléctricos pueden ser realmente emocionantes de conducir, y desde AMG se encargarán de aportar el extra de picante que les caracteriza, a las versiones más “mundanas” de Mercedes-Benz. En cuanto a la fecha de lanzamiento del AMG EQE, aún no se ha desvelado, aunque, teniendo en cuenta que el Mercedes EQE saldrá al mercado durante el transcurso de este año, es lógico esperar que para su variante AMG haya que esperar aún más.

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