La industria automotriz se prepara ante las dos grandes revoluciones que están por venir, o, mejor dicho, ya han llegado: la electrificación y la conducción autónoma. De la necesidad de reinventarse para afrontar estos cambios no se libran ni las grandes empresas del sector, como el Grupo Volkswagen, tal y como afirma su CEO, Herbert Diess.
Pero no es fácil cambiar de forma drástica ciertas estructuras y mecanismos de una máquina bien engrasada como la alemana, y menos cuando viene siendo el líder mundial en ventas durante los últimos cuatro años. “Si funciona, no lo toques”, como se suele decir, y muchos dentro de la compañía pueden pensar de esta manera, y se muestran reticentes a los planes de Diess.
El directivo expuso en el periódico alemán Handelsblatt cómo ha pretendido renovar todo el Grupo VW para adaptarlo a los nuevos tiempos. Para ello expone dos ejemplos. El primero es el conjunto de modificaciones que se plantearon en otoño del 2015 para afrontar la fabricación de vehículos 100 % eléctricos por parte del Grupo, en medio del escándalo por el “Dieselgate”.
Decidieron desarrollar una plataforma exclusiva para coches eléctricos, la MEB. Además, se planteó una reducción de personal y una menor jerarquización desde la sede central, para que las divisiones regionales tuvieran mayor margen de maniobra para acomodarse mejor a las necesidades de cada mercado en particular.
Todo este proceso tuvo como resultado inicial, explica Diess, el lanzamiento del primer Volkswagen completamente eléctrico desde cero, el ID.3, pero los planes se extienden mucho más allá en el tiempo, con la llegada de 10 modelos de cinco marcas basados en esta plataforma solo en el próximo año.
Como segundo caso, y el más interesante a priori, Diess explica cómo algunas de las últimas decisiones del Grupo han ido enfocadas en un único objetivo, recortar la ventaja tecnológica en electrificación y en conducción autónoma que parece tener Tesla. Para ello, afirma que no pueden competir con la empresa californiana siguiendo la estructura tradicional de un fabricante de automóviles, si no que necesitan mayor flexibilidad para poder alcanzar ese ritmo de desarrollo.
Es por ello por lo que se decidió enfocar todos los esfuerzos en ese campo del Grupo en Audi, y en concreto en la creación bajo esta marca del proyecto “Artemis”. Este plan se basa en la idea de crear una unidad organizativa que no esté incluida en la jerarquía y burocracia del Grupo VW, si no que sea más similar a las empresas tecnológicas y a las start-ups, con una mayor capacidad de adaptación a un entorno cambiante como es el actual.
Sin embargo, Diess es consciente de que no todo el mundo acepta los cambios de buen grado. Como él mismo afirma, hay estructuras y procesos que llevan décadas realizándose de la misma forma, y es complicado cambiarlos o modificarlos sin encontrar oposición a ello. Relata cómo desde que llegó al Grupo VW ha pretendido “romper las viejas estructuras incrustadas y hacer la empresa más ágil y moderna”, pero en algunos lugares ha encontrado una fuerte oposición, como en la sede central de Volkswagen en Wolfsburgo, Baja Sajonia.
Es por ello por lo que, según informa Autocar, Herbert Diess habría pedido al consejo de administración del Grupo la renovación de su contrato antes de tiempo, ya que éste expira en 2023. Aceptar la petición y extender su contrato significaría un claro voto de confianza en los planes de Diess por parte de la dirección de la compañía, que es lo que el ejecutivo necesita para superar los obstáculos que se ha encontrado en el camino.
Uno de sus principales problemas es el bloqueo que han interpuesto los dirigentes sindicales a sus propuestas para reestructurar las fábricas de la empresa que tienen costes de producción demasiado elevados, unas modificaciones que él ve imprescindibles. Además de los representantes de los trabajadores, el Estado de Baja Sajonia, segundo mayor accionista con un 20 %, también se opondría a varias de estas importantes propuestas de reforma, motivos suficientes para que el CEO buscara que su liderazgo fuera respaldado por las altas esferas del Grupo VW.
Luis Martínez
Cuando era un niño, no podía pasar una semana sin el nuevo número de mi revista de coches favorita. De adolescente, descubrí que me apasionaba escribir, divulgar y comunicar ideas. Ahora me encuentro dando mis primeros pasos en la profesión que me apasiona de la mano de la afición que ocupó buena parte de mi infancia, toda una suerte que demuestra las vueltas que puede dar la vida.COMENTARIOS