¿Puede un apasionado piloto de circuitos fabricar su coche soñado? Si se lo preguntáis a Vern Schuppan, la respuesta será un sí rotundo, aunque con matices. El Schuppan 962 surge de la pasión del piloto australiano Vern Schuppan, quien compitió en disciplinas como la Fórmula 1, las 500 Millas de Indianápolis y las 24 Horas de Le Mans, esta última competición a bordo del Porsche 956. La especial relación entre Schuppan y el 956 le llevó a la fabricación de un modelo de calle basado en el Porsche 962, evolución del 956, como tributo a su victoria en Le Mans en el año 1983, y en el Campeonato Japonés de Sport Prototipos en el mismo año.

En 1987, Vern creó su propio equipo, Team Schuppan, que utilizó el Porsche 962 para competir. Con idea de mejorar el chasis, Schuppan acudió a Advanced Composite Technology Limited para que construyera un chasis en fibra de carbono. Norbert Singer, entonces ingeniero de Porsche, le proporcionó los planos y el proyecto se hizo realidad. Así nació el Schuppan 962LM.

A través de otra de las empresas de nuestro protagonista, Vern Schuppan Ltd., se estableció una joint-venture con Art Sports Corporation con el fin de construir un modelo homologado “de calle” que fuera lo más parecido posible al Porsche 962. Vern Schuppan Ltd. puso en marcha la maquinaria para fabricar este modelo. En Art Sports Corporation, que había adquirido la exclusiva para su comercialización, estaban interesados en un cierto número de unidades (las fuentes varían en la cantidad inicial solicitada), en un primer momento con la carrocería del 962LM, pero posteriormente solicitaron que estos modelos tuvieran un aspecto más GT. Este modelo se convertiría en el Schuppan 962CR.

El 962CR contaba con un nuevo chasis, fabricado por Reynard, que era una evolución del chasis del 962LM pero con un poco más de espacio en el habitáculo. Para el diseño exterior, se buscó un nexo de unión con Porsche que recordaba innegablemente al 959. Como resultado, el aspecto era impactante a la vez que bello.

En la parte mecánica nos encontramos con algunas diferencias relevantes: mientras que el Schuppan 962LM estaba equipado con un motor 2,65 L de origen Porsche Motorsport y 630 CV, el Schuppan 962CR contaba con un propulsor de 3,4 L de 600 CV suministrado por Andial.

Como se ha comentado, las fuentes difieren en el número inicial de unidades solicitado. Pero en lo que sí coinciden es en que las previsiones se fueron recortando progresivamente, poniendo en grave peligro la viabilidad del proyecto. El problema se agravó cuando Art Sports Corporation sustituyó el logotipo de Schuppan por el de Porsche. La marca de Stuttgart reaccionó interrumpiendo el suministro de motores para el 962CR. A esto se le sumó que Art Sports incumplió su parte del acuerdo, lo que llevó a Vern Schuppan Ltd. a una situación económica insostenible. El sueño se había convertido en una pesadilla.

Con Vern Schuppan Ltd. ya desaparecida, la empresa ADA Engineering Ltd. construyó una última unidad que resulta ser un curioso híbrido, un 962LM con la parte trasera de un 962CR. Si bien los Schuppan 962 habían sido concebidos como vehículos exclusivos, el escaso número de unidades producidas los han convertido en modelos más raros todavía.

En el vídeo que os mostramos a continuación, podéis contemplar al Schuppan 962CR en todo su esplendor en un circuito… y también en la calle. No olvidemos que está homologado para circular por vías públicas. Una auténtica belleza que vio su vida comercial truncada por unas circunstancias adversas.