A día de hoy todo el mundo ha oído hablar de una maraña de siglas en los coches bi-fuel: GLP, GNC, GNL, GNV, Autogas, etc. Otro día tal vez hagamos un reportaje explicando qué es cada cosa, pero hoy nos vamos a centrar en el GLP -gas licuado de petróleo o autogas- por ser el más extendido y ser una alternativa más económica a los vehículos híbridos, pudiendo disponer de la etiqueta ECO, que permite circular en las grandes ciudades incluso en episodios de alta contaminación.

Si te vas a comprar un coche nuevo, estoy seguro que ya has valorado diferentes opciones, desterrando los diésel: híbrido o bi-fuel. Si tienes una cuenta corriente abundante, seguramente te irás a por un híbrido enchufable de gama alta, lo que te garantiza entre otras cosas, poder circular siempre con tu etiqueta ECO, o incluso la 0 si tienes más de 40 km de autonomía.

Pero si te pasa como a la mayoría, seguramente buscarás la mejor opción y que a su vez no destruya tus finanzas personales. Ahí es donde los vehículos de serie preparados para GLP pueden ser una buena alternativa a los híbridos como opción más económica.

El GLP

El GLP no es más que gas butano (C₄H₁₀) y propano (C₃H₈) mezclados, vamos lo que teníamos en casa en la bombona de gas de color naranja. Contiene más carbono que el gas natural que es básicamente metano (CH₄) -ya sea licuado o comprimido-, por lo que contamina un poco más, pero aún así, lo hace bastante menos que cualquier combustible fósil.

El depósito de GLP suele ir ubicado en el maletero, en el espacio de la rueda de repuesto, por lo que no nos quitará espacio para nuestras cosas y no está a muy alta presión -el riesgo de explosión es muy bajo-, almacenándose entre 6 y 10 bares. No es muy grande, de unos 35 litros de capacidad o más, pero puede añadir una autonomía considerable, alrededor de 200-300 km. Aunque su octanaje es superior -de entre 100 a 115 octanos- tiene menor densidad energética que la gasolina o el gasóleo, por lo que su consumo en litros será aproximadamente un 30% superior al de la gasolina.

El GLP es más barato

Pero ahora viene la parte buena. El litro de GLP cuesta hoy 0,70 euros, casi la mitad que la gasolina. Si hacemos la cuenta para un turismo de gasolina con un depósito de 40 litros, y un consumo de 8 l/100 km -unos 500 km de autonomía, que no es raro con circulación por ciudad- al precio de la gasolina que tenemos hoy de 1,3 euros/litro, tenemos un coste de 10,4 euros/100 km. Con GLP, y teniendo en cuenta el “aumento” del consumo, 7,3 euros/100 km.

Depósito toroidal en el maletero

Pensareis que la diferencia no es mucha, pero si te haces unos 15.000 km al año, con GLP te sale a 1.095 euros, mientras que con gasolina el coste es de 1.560 euros: 465 euros de ahorro. Vale, seguramente diréis que el coche a GLP es más caro, y eso requiere amortizarlo. Pero hay veces que no. Por ejemplo, el Dacia Logan Ambiance de GLP cuesta 9.196 euros, mientras el equivalente en potencia y equipamiento cuesta 10.097 euros.

Adaptación a GLP

¿Y si adapto mi coche de gasolina? Puedes hacerlo, pero tendrás que llevarlo a un buen instalador para que no haya problemas en el futuro. Además el coste arranca en 1.000 euros para motores de tres y cuatro cilindros. Para que te hagas una idea, los elementos que habría que instalar son los siguientes:

• Depósito, ya sea toroidal interno, externo o cilíndrico, almacenará el GLP de manera segura.
• Boca de carga, para llenar el depósito con seguridad.
• Tubería GLP, que une el depósito con la parte delantera en el motor.
• Electroválvula de corte, se encarga de cerrar el paso del GLP cuando el vehículo se para, se apaga el coche o se selecciona manualmente funcionar a gasolina con el conmutador.
• Reductor-vaporizador, es el encargado de pasar el GLP de líquido a gas (solo con inyección gaseosa) y tiene un filtro que debe cambiarse cada 20.000 km normalmente.
• Inyectores, se encargan de introducir la cantidad adecuada en el colector de admisión.
• ECU, es la centralita que controla los inyectores de GLP, junto con los demás parámetros.
• Conmutador, es el mando que se coloca en el interior, para seleccionar con qué combustible queremos circular.

Es posible adaptar sin apenas excepciones cualquier gasolina que cumpla por lo menos la Euro 3. Si cumple Euro 4 o superior, recibe el distintivo ECO tras gestionarlo con Tráfico.

Partes de un vehículo bi-fuel GLP

Vale, ¿pero donde puedo repostar?

En cuanto al repostaje, es cierto que no en todas las gasolineras existe GLP, pero si hay bastantes. En toda España hay más de 600 gasolineras donde se puede repostar autogas, así que probablemente si vives en una ciudad, tengas una gasinera cerca. Puedes consultar las gasineras que hay en este enlace.

Si la ventaja del precio no te convence, y vives en una gran ciudad, espera a que lleguemos a los escenarios de alta contaminación y tengas que dejar aparcado el coche lejos de donde vayas a trabajar. Es cierto que todos deberíamos emplear el transporte público para ir a la ciudad, pero a veces las circunstancias personales de cada uno te “obligan” a tener que utilizar el coche. Y es aquí donde los vehículos a GLP tienen mucha ventaja, pues disponen de la etiqueta ECO que expide la DGT, lo que te permite circular siempre con ellos, haya o no haya contaminación.

Estaciones de servicio con GLP

Estoy seguro que más de uno habrá pensado: “Para no dejar el coche nunca en casa y poder entrar en la ciudad, voy a comprar un coche GLP con su etiqueta ECO, pero paso de respostar GLP”. Sí, puedes hacerlo, pero tener la posibilidad de ahorrar algo de dinero, contaminar menos y tener más autonomía parece más sensato, a cambio de un pequeño esfuerzo para encontrar una gasinera donde repostar.

¿Notaré alguna diferencia en conducción? Probablemente no, pues circular con uno u otro combustible apenas tiene diferencia. Sí es cierto que con GLP la potencia disminuye, pero no es realmente apreciable en circulación normal. También depende del equipo que se instale, hay kits en los que la diferencia de potencia es inapreciable, lo único que se nota es el dinero que se ahorra: conducir como un gasolina, gastar como un diésel (e incluso menos).

Para terminar, si ya estáis convencidos de comprar un coche GLP, aquí os dejamos la lista de coches que se venden actualmente en España, adaptados de serie a este combustible. Es una tabla dinámica, así que podéis buscar una marca, modelo, ordenar por precio o potencia.