Prueba: Nissan Qashqai e-Power (viaje de larga distancia)

Prueba: Nissan Qashqai e-Power (viaje de larga distancia)

Quizá fuera por las altas temperaturas, pero los resultados fueron ligeramente peores que la primera vez que lo probamos


Tiempo de lectura: 11 min.

Cuando le he contado a alguien a que me dedicaba, siempre, o casi siempre, me he tenido que enfrentar a la misma pregunta: “¿Y cómo pruebas los coches? O sea, ¿qué haces con ellos? Imagino que les dará mucha caña”. Una pregunta cuya respuesta suele ser algo larga, pero que se resume rápidamente: “uso el coche como si fuera el mío, es decir, para todo. Si hay que llevar al niño al colegio, voy con el de pruebas. Si tengo que ir al super, voy con el de pruebas. Si tengo que llevar a mi padre al hospital, voy con el de pruebas. Si salgo a cenar con la jefa, efectivamente, voy con el de pruebas”. Es la única forma de probar un coche, porque “darle caña” realmente solo es interesante en modelos deportivos –y aun así, obviamente, les doy caña, pero yo y cualquier compañero de profesión–.

En general, a un coche de prensa se le hacen, al menos en mi caso, entre 400 y 600 kilómetros de media, en toda clase de condiciones, excepto una: viajes largos. No sé si otros compañeros salen a rodar más allá de 200 kilómetros del tirón, pero yo no lo hago nunca, básicamente, porque no puedo. Por ello, cuando llega el verano, aprovecho la ocasión y me voy de vacaciones con una unidad para pruebas, porque es la mejor oportunidad de poder hacer un viaje largo con toda la familia, tal y como haría cualquier usuario normal. No sería la primera vez, ni tampoco será la última, que me dicen que le echo mucho morro, un error como una casa porque en realidad me llevo el trabajo conmigo. ¿Acaso se piensa alguien que me apetece salir a sacar las fotos y demás, cuando estoy muy a gusto en la tumbona con un helado en la mano –helado de turrón, para más información– y el mar de fondo?

Así pues, con la fecha de partida en ciernes, comencé a darle vueltas al asunto: “¿qué coche es más interesante para un viaje de larga distancia?”. Son, más o menos, 500 kilómetros con maletero lleno, mujer y niño, es decir, como todos los años. En otras ocasiones he completado el mismo viaje con Toyota Corolla sedán, coche que me dejó muy satisfecho, todo sea dicho, y también he hecho el mismo viaje con un Renault Arkana Hybrid, el cual fue toda una sorpresa. También he tenido para el mismo viaje un Opel Grandland X Hybrid4, pero su condición de híbrido enchufable resultó ser una opción poco recomendable para un viaje tan largo y por la falta de cargadores en la zona de Jávea, donde solo hay tres puntos de carga…

suzuki ignis prueba 21

De primeras, la opción más interesante fue el Toyota RAV4, pues hay muchas zonas de montaña que se pueden visitar, pero diferentes circunstancias me impidieron viajar con el SUV japonés, y eso que ya estaba la cesión programada. Cuando todo volvió a su cauce, en lugar de dar la tabarra nuevamente a Toyota, se me ocurrió que la opción de un Nissan con tecnología e-Power podría ser especialmente interesante. Sí, ya hemos probado el Qashqai e-Power y también el Nissan X-trail e-Power, pero la idea de hacer un viaje largo con un híbrido en serie y comprobar si realmente puede hacer frente a un híbrido convencional cobró un peso abrumador. Es más, me entraron unas ganas enormes de comenzar a conducir y comprobar que tal se porta en esas circunstancias, desde el mismo momento en el que Nissan me confirmó la disponibilidad de un Qashqai e-Power para las fechas solicitadas.

Todo como lo recordaba, o casi

Cuando llegó el día señalado habían pasado un par de días desde que recogí el Qashqai. Yo tengo la suerte –o la desgracia– de poder trabajar allá donde esté, pero la mujer no, además, le gusta demasiado su trabajo –auxiliar de enfermería a cargo de una señora la mar de maja– y hasta que no lo dejó todo bien atado, no pudimos irnos. La verdad es que no me importó, porque me sirvió para refrescar un poco la memoria de la vez anterior que tuve el coche en casa y para darme cuenta de lo poco que me gusta el mando de la transmisión. ¿Nadie se ha dado cuenta de lo incómodo que es o es que solo me lo parece a mi? Sobre todo cuando quieres accionarlo en marcha para activar la posición B, la de retención.

Lógicamente, las sensaciones que tuve durante los días previos al viaje estaban en línea con las sensaciones que tuve la primera vez que lo cogí. Aunque era una unidad diferente, es el mismo modelo, con el mismo grupo motor y con un equipamiento similar, así que todo debería ser muy parecido, pero el caso es que no todo fue similar. Por un lado, al activar la función e-Pedal, esa que te permite conducir con un solo pedal, el freno adquiría un tacto extraño, muy duro y con un recorrido cortísimo. De hecho, si dejaba el pie en el pedal del freno, sin llegar a pisarlo, y activaba el sistema e-Pedal, podía notar como este se retraía un poco. No recuerdo que la otra unidad hiciera lo mismo, ni tampoco recuerdo que el tacto del pedal se hiciera tan duro. De todas formas, hace meses que tuvimos el Qashqai e-Power por primera vez, es posible que se me haya olvidado algo.

suzuki ignis prueba 8

Ups… aquí algo no cuadra

No se me olvidó lo agradable que resulta el coche, en general, en el día a día, como tampoco se me olvidó los buenos consumos que obtuve. Y es aquí donde todo empezó a torcerse un poco, porque todos los resultados fueron ligeramente peores. La primera vez que tuve el Qashqai e-Power, los consumos rondaron los 6 o 6,5 litros de media sin hacer nada especial, en recorridos mixtos y siempre según datos del ordenador –uso los datos del ordenador porque será la guía que siga cualquier usuario y creo que así tendrán sensaciones más cercanas a las que obtendrán ellos al usar el coche–, pero en esta ocasión no había forma de bajar la cifra de los 6,9 litros, y esta cifra fue un día, allí en Jávea, a velocidades moderadas. Por lo general, la cifra que marcaba la instrumentación variaba entre los 7,1 y los 7,3 litros. Y no solo eso, porque llegué a ver cifras más cercanas a los ocho litros en autopista a buen ritmo. Son números más altos que los logrados en otras ocasiones con otros coches…

Cada salida que hacíamos por allí, era una nueva oportunidad para intentar buscar explicaciones a un aumento de consumo como este, probé incluso a circular sin aire acondicionado a pesar de las protestas de la familia y todo seguía igual. Le di varias vueltas a la situación por si se me ocurría algo y un día, mientras el niño me preguntaba cuanto costaba ese coche que venía calle abajo, me vino la inspiración. El coche era un Tesla Model S y me vino rápidamente a la cabeza un reportaje que había leído sobre las baterías y las altas temperaturas… ¡¡claro!! Estábamos a finales de julio en plena zona de costa, con una temperatura que no bajaba de los 30 grados –a la sombra– y con un coche que se mueve gracias a un motor eléctrico, que recibe su energía de una batería de iones de litio y que cuenta con un motor de gasolina para recargar dicha batería; tenía que ser la temperatura, que afectaba al rendimiento de la batería y, por tanto, obligaba al motor de combustión a trabajar más de la cuenta.

La primera vez que conduje el Nissan Qashqai e-Power fue en febrero de 2023 y además, la mayor parte de los recorridos fueron por la sierra de Madrid, es decir, las condiciones eran casi opuestas. Pensarás que en las otras ocasiones, con el Corolla 122H y con el Arkana Hybrid tendría que haber encontrado algo similar, pero no es el caso, porque en esos coches el motor de combustión también actúa sobre las ruedas y el rendimiento de la batería es menos influyente. En el caso del Qashqai e-Power el rendimiento de la batería es importante porque solo el motor eléctrico actúa sobre las ruedas, si la batería no rinde como debe, el motor de combustión tiene que trabajar más para recargarla. Obviamente, solo estoy especulando sobre el posible motivo, habría que hacer más pruebas para comprobarlo.

suzuki ignis prueba 4

Un buen traga millas

No obstante, el tema de consumo bien podría ser cosa de la unidad en cuestión o por la orografía tan cambiante de la zona –que no se diferencia mucho de la zona donde vivo, todo sea dicho–. También podría estar motivado por la forma de conducir, aunque eso ya me resulta más extraño cuando el conductor es siempre el mismo. Me parece más importante otro tipo de cuestiones, como la estabilidad, el funcionamiento de los frenos o el tacto general a alta velocidad. Sí, salimos a carretera durante las pruebas, obviamente, pero no es lo mismo recorridos cortos por autopista –rara vez algo más de 100 kilómetros por este tipo de vías– y otra, darte un atracón de 500 kilómetros por carreteras por donde, en ocasiones, hay muy poco tráfico. Es más, en una ocasión, me “enganché” al coche que llevaba delante, una de esas veces que circulas al ritmo que van los demás sin pensar demasiado –mal hecho, lo sé– y cuando me fijé en el velocímetro, rozaba la velocidad máxima que Nissan homologa para este coche.

Cuando lo vi aflojé un poco y rápidamente eché un vistazo al pasaje, pues en cuanto alcanzamos una velocidad demasiado alta saltan las alarmas en seguida. Sin embargo, nadie parecía haberse dado cuenta; el niño, atrás, iba con el móvil –es el encargado de poner la música, y ojo con la música que escucha el individuo… – y la madre iba con la vista perdida en el horizonte y con una cara de estar a punto de dormirse. Vamos, que nadie se dio cuenta de que íbamos lanzados y eso es, básicamente, porque el coche tiene una estabilidad muy alta y además, está muy insonorizado. No importa que se pise el pedal a fondo, el motor de combustión es un simple rumor muy lejado y unas mínimas vibraciones llegan a la zona de los pies que no rompen con la tranquilidad general que se vive en el coche. Resulta un coche muy agradable para viajar, realmente cómodo. Los frenos no hubo que accionarlos en exceso, pero como en todo híbrido, si se quiere frenar fuerte, hay que pisar más de medio recorrido. El primer tramo solo frena el motor eléctrico y luego saltan los frenos mecánicos, algo que, por cierto, no está todo lo bien conseguido que sería deseable porque costaba mucho detener el coche totalmente sin que hubiera un ligero tirón.

El buen hacer del coche en carretera abierta me deja con ganas de pedirlo de nuevo y hacer el mismo recorrido pero en octubre, para ver si los consumos se ven afectados por la temperatura. Podría ser una idea interesante, quizá una comparativa con algún híbrido rival… y esto lo digo porque de verdad, el coche te ofrece un comportamiento muy sano y muy controlable por cualquier usuario. Es evidente que se trata de un modelo pensado para las masas y ofrece un conjunto muy interesante. No tiene alardes, no tiene una imagen tan rompedora como el Hyundai Tucson, pero es un buen conjunto si no tenemos en cuenta que gasta un poco más que otras opciones híbridas.

Datos técnicos

FICHA TÉCNICANissan Qashqai (J12)
MODELOe-Power Tekna+
MOTOR TÉRMICOGasolina de 1.498 cc. 3 cilindros en línea con turbo en posición transversal por delante del eje delantero con 158 CV. No está conectado a las ruedas y solo hace las veces de generador.
MOTOR ELÉCTRICODelantero transversal, 140 kW (190 CV). Es el encargado de mover el vehículo.
BATERÍAIón Litio de 2,1 kWh
AUTONOMÍA ELÉCTRICA (WLTP)0 km (recuperación de energía y apoyo en aceleración)
RENDIMIENTOPotencia máxima140 kW (190 CV)
TRANSMISIÓNTracción delantera, transmisión de una sola relación
SUSPENSIÓNDelanteraMcPherson
TraseraMultibrazo
DIMENSIONES Y PESOSLargo por ancho por alto (mm)4.425 x 1.848 x 1.625
Batalla2.665 mm
Vías del./tras.1.590 mm / 1.596 mm
Peso declarado1.687 kg
MALETEROEn litros479
NeumáticosMichelin Primacy 4 con medida 235/45 R20
DATOS PRESTACIONALESAceleración de 0 a 100 km/h7,9 segundos
Velocidad punta170 km/h
Relación peso potencia8,8 kg/CV
CONSUMOSConsumo medio homologado (WLTP)5,3 l/100 km
Consumo medio durante la prueba6,5 l/100 km
PRECIO UNIDAD PROBADA43.050 euros

Galería de fotos

Nissan Qashqai e-Power

43050 euros
Nissan Qashqai e-Power
6.3

Comportamiento en carretera

7.0/10

Comportamiento en ciudad

7.0/10

Confort

7.5/10

Consumo

6.0/10

Habitabilidad

7.0/10

Infoentretenimiento

7.0/10

Prestaciones

6.5/10

Relación valor/precio

7.0/10

Seguridad

8.0/10

espíritu RACER

0.0/10

A favor

  • Suavidad en la entrega de potencia
  • Finura general de funcionamiento
  • Agrado de uso

En contra

  • Peso
  • Selector del cambio feo e incómodo
  • Consumos elevados
COMPARTE
Sobre mí

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

Alejandro Delgado

Jesus Alonso

Javier Gutierrez

Mauro Blanco