Ya que de repente se nos ha subido la fiebre de los mitos de Le Mans, es acertado contextualizar la versión que aquí me convoca dentro de la historia grande de la carrera de resistencia más importante. Esto, más allá de que este ejemplar, que espera ser vendido el próximo 17 de enero durante la subasta de Mecum Auctions en la floridana Kissimmee, no haya sido fabricado para competir en el circuito de la Sarthe precisamente. El taller Holman & Moody, uno de los responsables en llevar al GT40 a la gloria frente a Ferrari en la emblemática pista francesa, acto seguido destinó sus servicios al que sería campeón en Estados Unidos en 1968. No en carreras de resistencia, sino en las drag racing, la especialidad de la casa.
El aporte del amplio álbum de fotos publicado por Mecum está fuera de discusión, en especial cuando hacemos zoom a las firmas estampadas en el capó y leemos “Jerry Harvey”, el piloto que le dio la fama en el ambiente automovilístico. Sin embargo, las imágenes de época, a excepción del documento que comprueba la autenticidad y que adjunta una página de época, brillan por su ausencia, de manera que me he visto obligado a adentrarme en la búsqueda e ir por ellas. ¡Adivinen! El modelo cuenta con sitio web propio y, debo decir, su contenido es por demás generoso y complementario.
Algo de historia para poner en contexto
Allí me he topado con una fotografía que, de seguro, los protagonistas se habrán llevado de recuerdo a sus casas: cuatro de los seis ejemplares que participaron en el Winternationals ’68 organizado por la National Hot Rod Association. Cada uno con su correspondiente piloto. De izquierda a derecha en la imagen, el segundo es el número 983. Sí, el mismo que hoy luce tal como lo ven en las fotos de Mecum. Junto al 983 posa Jerry Harvey, ganador de aquella edición en su clase.
He aquí lo importante, y es que todos esos coches pertenecen a la misma especie: el Ford Mustang 428 Cobra Jet, una tanda configurada para dicha competición en las instalaciones de Holman & Moody con sede en Long Beach. Allí ingresaron como modelos de producción del Mustang con motor 390 y salieron convertidos en el 428 Cobra Jet. Además de sus pergaminos en el deporte de motor –ganador del Campeonato Nacional de Estados Unidos 1968 y poseedor del record nacional de aquel año–, el número 983 presume del hecho de que es uno de los apenas 11 construidos de su tipo. Especial por donde se lo mire.
El material del portal Mustang 428 Cobra Jet Registry es para destacar, insisto. Allí podrán encontrar lo necesario para proponerse un viaje al pasado: algunos datos de tiempos, las categorías en las que cada ejemplar corrió, fotos de la época tanto a color como en blanco y negro e, incluso, los patrocinadores de cada Cobra Jet. Estarán familiarizados los eruditos del tema con el icónico sponsor del número 983, al cual estéticamente se lo reconoce, en gran medida, por el ploteado lateral de su auspiciante principal: Paul Harvey Ford, concesionaria de Indianápolis que, además, representaba al número 985 de Hubert Platt.
Nombre no menor el de este último. No sólo por haber sido el rival al que Jerry Harvey venció en la final de la clase Super Stock E del Winternats –como popularmente se la conoce a la carrera–, sino por haber sido quien presentó al Cobra Jet en primera instancia –antes de la presentación grupal de los 428 en aquel febrero del ’68– días atrás, durante unas drag en Los Ángeles. Acerca de la final Harvey vs. Platt, no he podido rastrear los tiempos, pero algo que cuenta Registry me ha parecido interesante: según cuentan, Harvey había tenido unas no muy alentadoras primeras impresiones de su 983, ya que sentía que no era tan potente como otros coches de carrera que había pilotado. El resto es historia…
Ford Mustang 428 Cobra Jet 983, hoy
Las fotos actuales tomadas por Mecum nos confirman que, quien se haga del número 983, recibirá un Cobra Jet en perfectas condiciones. Promete el estado en que se encuentra el interior tapizado en negro y con asientos individuales. Allí, al momento de la catalogación por la casa de subastas, su odómetro marcaba apenas 108 millas. También obtendrá una mecánica original: tanto su caja de cambios manual de cuatro velocidades como el V8 de 428 centímetros cúbicos por cilindros y potencia de casi 340 CV van dentro. Sin lugar a dudas, todo un pony car de colección.
Mauro Blanco
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