Construido por Fiat en 1975, el anillo de Nardò tiene una longitud de 12,6 kilómetros y un ancho de 16 metros, y se encuentra en la ciudad italiana de Nardò. La pista está inclinada hasta el punto en que los vehículos que circulen por allí pueden conducir a altas velocidades sin girar sus volantes. Porsche adquirió la pista en 2012, cambió su nombre a Centro Técnico de Nardò, lo ha renovado, y ya está listo para ser usado.
Una renovación que se ha llevado a cabo durante los últimos siete meses y ha costado 35 millones de euros a la casa de Stuttgart. Las mejoras incluyen nuevas barandillas y una nueva superficie de asfalto. El centro sigue siendo un terreno de pruebas para medir las velocidades máximas y aceleraciones, pero también para probar los sistemas de asistencia al conductor, la autonomía de vehículos eléctricos y la tecnología de conducción autónoma.
El presidente de la Junta Directiva del Centro Técnico de Nardò y el director general de Porsche Engineering, Malte Radmann, dijo: “Con la modernización de las vías, el desarrollo estratégico del Centro Técnico de Nardò avanza de manera decisiva. Este campo de pruebas siempre ha sido único y ahora es más que nunca una piedra angular de la estrategia de desarrollo de Porsche y de las actividades de prueba de vehículos en la industria automotriz en general”.
Más de 20 pistas se muestran en un área de más de 700 hectáreas, y más de 90 compañías automotrices con más de 150 empleados están probando sus coches allí. Se prevén varias ampliaciones y renovaciones para el futuro, incluido el crecimiento del ecosistema local. Las instalaciones también incluyen equipos de prueba para el comportamiento de carga rápida de vehículos eléctricos como el Taycan o los servicios conectados.
Respecto a los clientes externos, el director general del Centro Técnico de Nardò, Antonio Gratis, declaró que “el objetivo es que puedan probar la movilidad del futuro” con el mayor respeto a la confidencialidad de acuerdo con la protección de datos. En la época en que un teléfono inteligente puede tomar fotos de alta calidad de un prototipo de preproducción, la política de Porsche en Nardò es cuanto menos restrictiva; muy alemán.
Rodar en el anillo de Nardò puede ser una experiencia increíblemente divertida, pero también conlleva un gran riesgo para el conductor
Ahora, un poco de historia: en 1979, Mercedes-Benz alcanzó los 403,978 km/h con el C111-IV, completando así una vuelta al anillo en un minuto y 57 segundos. Posteriormente, Volkswagen estableció el récord de velocidad punta para un coche con motor diésel en 1980, 362 km/h con el ARVW (Aerodynamic Research Volkswagen). Más recientemente y antes de ser lanzado al mercado, se estrelló un prototipo del Bugatti Veyron contra la barandilla a 398 km/h. Al menos, la historia de este histórico circuito sigue adelante.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.Uno de mis primeros recuerdos de las revistas del motor es una donde narraban el intento de llegar a los 325 km/h con un Diablo, en aquellos momentos el coche de produccion mas veloz del mundo