Reuters ha informado que la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras de Estados Unidos (NHTSA, por sus siglas en inglés) ha comunicado que no requerirá de que los fabricantes retiren 56 millones de airbags Takata adicionales. El organismo privado alega que no representan un riesgo de seguridad como los demás dispositivos implicados en accidentes mortales previos de los que se tiene constancia.
Estos airbags en particular son más seguros que los 63 millones que ya han sido retirados del mercado en un proceso de varios años que ha afectado 19 compañías automotrices y millones de vehículos en todo el mundo desde que se reportaran los primeros problemas en 2013. En 2016 se retiraron 40 millones de airbags Takata y, en ese momento, la NHTSA dijo que revisaría otros 56 millones más para finales de 2019 con objeto de ver si tendrían que suprimirse también.
Si el tema ha quedado olvidado en tu mente, podemos recordar brevemente el fallo: algunos de los airbags de Takata podían enviar fragmentos de metal a las caras de los ocupantes en caso de accidente de tráfico. La NTHSA ha concluido que la exposición a largo plazo a altas temperaturas y humedad puede degradar los airbags, haciéndolos más propensos a las rupturas. Ha habido al menos 25 muertes relacionadas con el caso y casi 300 lesiones de notoriedad en todo el mundo.
En una declaración, David Kelly, que encabeza un grupo de pruebas de Takata, manifestó que, “después de 30 años de envejecimiento previsto, ninguno de los diseños de airbags estudiados y las combinaciones de propulsores predijeron efectos perjudiciales, excepto aquellos sujetos a las condiciones más severas y la temperatura del vehículo”. Un grupo de seguridad automotriz criticó la decisión en base a que es “imposible saber si confiar en base a la total falta de transparencia”.
La NHTSA dijo que seguirá monitoreando los dispositivos para asegurarse de que no representen un riesgo para los ocupantes y “determinar si pueden comenzar a mostrar una evidencia de degradación que, eventualmente, puede crear un riesgo de seguridad”. En enero de 2020, el organismo estadounidense afirmó que más de 36 millones de airbags defectuosos de la primera llamada a revisión habían sido reparados desde que el problema fuese difundido a nivel global.
Pero eso todavía deja casi 16 millones de airbags Takata sin reparar y, presumiblemente, en la carretera. La NHTSA defiende que la mayoría de ellos son viejos y, por ende, “inherentemente más difíciles de localizar” ya que los datos del propietario del vehículo no siempre son correctos. Por separado, la EuroNCAP del otro lado del charco también mencionó que el Grupo Volkswagen hará una llamada a revisión a 370.000 vehículos equipados con airbags Takata para evaluarlos.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS