Seguimos camino hacia una electrificación imparable, un futuro sin emisiones locales (habrá que ver de dónde sale tanta electricidad…) que busca reducir, obviamente, las concentraciones de polución originadas con el transporte. En un primer momento se pensó que no sería fácil ni tampoco sería rápido, pero finalmente sí que será rápido, pues muchos son los que están invirtiendo grandes cantidades de dinero en el desarrollo de tecnología eléctrica para, en la mayoría de los casos, estar plenamente transformados en fabricantes de coches eléctricos para no más allá de 2030.

No todos los fabricantes serán eléctricos al 100%, algunos seguirán con la combustión allá donde sea necesario y los clientes lo demanden, pero en Europa, pocos motores de combustión de nuevo desarrollo veremos en los próximos años. De hecho, ya tenemos otra marca que invertirá una enorme cantidad en electrificación de aquí a los próximos años, poniendo en circulación nada menos que 30 nuevos modelos puramente eléctricos a nivel mundial. Nos referimos a Honda, marca que ha anunciado una inversión de 43.000 millones de yenes, unos 315 millones de euros, en una nueva estrategia para la electrificación de sus productos.

El objetivo que se han propuesto en la firma japonesa, es lograr la neutralidad de carbono para el año 2050, algo que también pretende conseguir Mazda. Sin embargo, la marca también afirma que no sirve con el simple reemplazo de los motores de combustión por los motores eléctricos y sus baterías, la transformación debe ir más allá. Por eso, asignará parte del presupuesto a labores de investigación y desarrollo de sistemas de propulsión por hidrógeno y hardware de intercambio de baterías, como medio para facilitar la adopción de la tecnología eléctrica en lugar de los motores de combustión, durante los próximos 10 años. Por supuesto, también habrá una inversión (5.000 millones de yenes, algo más de 36 millones de euros) exclusiva para tecnología de software y electrificación.

Cada mercado donde está presente la marca, contará con sus propios modelos. Por ejemplo, en Estados Unidos se lanzarán dos nuevos SUV eléctricos en asociación con General Motors, uno será el Honda Prologue y el otro será un SUV de Acura del que no han dado datos. dos coches que estarían listos en 2024. Tres años después, lanzarán una gama de “coches eléctricos asequibles” que, según la marca, serán tan competitivos, por precios y prestaciones, como cualquier vehículo de combustión. Igualmente, se está barajando la posibilidad de abrir una nueva planta de producción de coches eléctricos en Estados Unidos.

En China, Honda pondrá en circulación 10 nuevos modelos para 2027, mientras que en Japón contará con un pequeño vehículo eléctrico comercial, cuyo precio será realmente bajo, alrededor de unos 6.000 ó 7.000 euros. En China también se planea la construcción de una planta dedicada a vehículos eléctricos en Guangzhou y Wuhan.

Para Europa ya conocimos algunos detalles, como el lanzamiento de una versión eléctrica del Honda HR-V en 2023, cuyo objetivo es alcanzar un 40% de ventas entre los eléctricos de la marca entre 2023 y 2030. Cuando llegue el año 2040, para el que todavía queda mucho tiempo, Honda quiere dejar de comercializar vehículos con motores de combustión interna.

No obstante, hay un detalle que llama mucho la atención, pues parece que habrá un reemplazo totalmente eléctrico para el Honda NSX y un nuevo Gran Turismo, que se presentarán próximamente (la marca los define como un “modelo especial” y un “modelo insignia”). La marca no ha dado detalles al respecto, aunque sí ha dejado declaraciones afirmando que Honda siempre ha estado comprometida con la deportividad y la diversión. Además, acompaña todo este anuncio con una foto donde aparecen, cubiertos por una lona, dos vehículos de corte claramente deportivo.