smart siempre ha sido una marca muy particular. Desde que comenzó su andadura, siempre se ha mantenido fiel a su enfoque casi totalmente urbano: coches pequeños, motores con potencias contenidas y soluciones llamativas como su carrocería de paneles de plástico intercambiables han sido sus señas de identidad. De hecho, sus coches rompieron tantos moldes, que en 1998, fecha de su inicio de comercialización, supuso todo un shock.

Tampoco extrañó a nadie cuando anunciaron que haría su conversión a la tecnología eléctrica antes que nadie, teniendo ahora mismo en catálogo únicamente vehículos de motor eléctrico. smart es un fabricante centrado en vehículos urbanos, así que su paso a lo eléctrico tiene muchísima lógica. La electricidad, al menos a día de hoy, ofrece su mejor rendimiento en entornos urbanos y en smart le quieren sacar partido.

De todas formas, no siempre se han centrado en coches exclusivamente urbanos, no podemos olvidar la primera generación del smart Forfour, cuya plataforma se compartía con el Mitsubishi Colt y cuyo rango de uso iba más allá del mero entorno urbano. Y si, también estaba el smart Roadster y el smart Coupé, que se diferenciaban básicamente por la su parte trasera. Pero ninguno suponía un cambio tan importante como el que planean aplicar ahora, poniendo en circulación un SUV de motor eléctrico, el cual acaba de tener un adelanto con el smart Concept #1.

smart Concept #1, el primero desarrollado por Geely

La aparición de este SUV, que aunque se ha presentado en forma de concept, está destinado a llegar a producción, no es ninguna sorpresa. Se lleva tiempo hablando sobre esta posibilidad y la propia marca ha publicado algún que otro teaser con el objetivo de ir calentando el ambiente. Además, llega con el revulsivo de ser el primer producto desarrollado bajo el amparo de la nueva “aventura” entre Daimler y Geely. Recordemos que en 2019, Geely compró el 50 % de smart, para desarrollar coches eléctricos en China.

El próximo SUV de la marca será el primer proyecto de la asociación y promete transformar la marca por completo. Para empezar, el diseño es completamente rompedor dentro de la propia marca, dejando atrás los rasgos que han caracterizado a todos los smart hasta el momento, con cierto “regusto” a Mercedes EQ. Ciertos trazos, las combinaciones de colores e incluso el diseño de los pilotos, recuerdan a la familia eléctrica de Mercedes.

Y en realidad, casi tiene más de Mercedes que de smart. Mide 4,29 metros de largo, 1,91 de ancho y 1,70 de alto. Es, comparado con cualquier otro producto de smart, enorme. Es más grande que un Opel Mokka-e y casi a la par que un Peugeot 2008, uno de los modelos más grandes del segmento. La distancia entre ejes llega a los 2,75 metros, es decir, un smart EQ fortwo cabe entre los ejes del smart Concept #1.

Por suerte, este Concept #1 huye de las modas actuales, donde los trazos se mezclan, las líneas acaban en ninguna parte y ciertas cosas se llevan al extremo. No, este SUV eléctrico presenta un equilibrio estético que se agradece, con superficies lisas y sencillas, sin protuberancias, sin cortes ni aristas; un diseño limpio y ordenado, pero no exento de atractivo o de personalidad.

Nueva plataforma para coches electrificados

La base sobre la que se sustenta el smart Concept #1 es completamente nueva, desarrollada para vehículos electrificados (incluyendo los eléctricos de “rango extendido”), pudiendo contar con la entrega de potencia a uno o a los dos ejes. Una plataforma que, como cabe esperar, dará también vida a otros modelos más adelante, todos ellos con la batería colocada en el piso, con todo lo que ello conlleva.

Gracias a eso, el smart Concept #1 presume de habitáculo espacioso y diáfano, pues no tiene túnel central. Por diseño, se ha incorporado una consola central flotante, pero el suelo el completamente plano, mejorando la comodidad interior mucho enteros. La decoración dorada del prototipo no debería llegar a producción, aunque sí podría lanzarse tal cual en cuanto a diseño o equipamiento, teniendo únicamente una pantalla táctil central con 12,8 pulgadas y cuyo menú central es un globo terráqueo en tres dimensiones.

El sistema multimedia tiene algunas funciones de inteligencia artificial, que aprende el comportamiento del usuario pudiendo adaptarse a sus preferencias y el teléfono móvil puede hacer las funciones de llave e integrar algunas funciones del vehículo. Además, el 75 % de las funciones de control se pueden realizar de forma inalámbrica.

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