Se ha dejado ver por las calles de Madrid con algo de camuflaje y ha sido fuente de debate y de especulación en algunos sitios de Internet, pero ahora es real, se presenta oficialmente y se posiciona como el tercer modelo totalmente eléctrico de Mercedes. La aparición del Mercedes EQA no es, por tanto, una sorpresa, como tampoco lo es su diseño o sus prestaciones.
Ya lo hemos comentado en alguna ocasión, la combinación de electricidad y formato SUV es una receta de éxito y si nos fijamos, las mayores novedades con esta tecnología son todas SUV. Es por ello que tampoco es de extrañar que el tercer modelo eléctrico de la firma alemana sea también un SUV, sorprende mucho más que saliera antes el Mercedes EQV, la versión eléctrica del Clase V, que el SUV compacto. Es apostar sobre seguro con una tecnología no es barata, aunque su coste se va reduciendo paulatinamente.
El nuevo Mercedes EQA tiene cierto parentesco con el Mercedes GLA, no modelos ligados entre sí, pero sí tienen cierto parecido. Las medidas son muy similares, el diseño también tiene algunos rasgos en común y la categoría en la que milita es la misma que en el caso del Mercedes GLA. Sin embargo, el EQA es un modelo aparte, con su propio desarrollo, su propia gama y sus propios clientes objetivo.
Por el momento, solo una opción mecánica
La parcela de los SUV compactos con motor eléctrico parece ponerse interesante. En estos momentos tenemos a tres gallos de pelea como son el Audi e-tron Sportback, el Volkswagen Id.4 y este Mercedes EQA. Se espera que lleguen más rivales con el tiempo, como el BMW iX3 y, aunque un poco más lejos en cuanto a prestaciones o categoría, los Citroën eC4 y el próximo Peugeot 3008, el cual debería tener también una versión eléctrica.
En lo que respecto al Mercedes EQA, la marca no ha querido arriesgar y adopta los rasgos de diseño que ya hemos visto en el Mercedes EQC400. La calandra “ciega” en color negro es la primera seña de identidad del nuevo EQA, al igual que los pilotos o las llantas. Donde sí han ido un poco más allá es en el apartado técnico, donde se ofrecerán varias opciones de potencia y baterías, así como dos opciones de transmisión delantera o tracción total.
De entrada, la gama estará compuesta únicamente por el Mercedes EQA 250, un tracción delantera de 140 kW y 375 Nm de par, cuyas baterías, colocadas en el piso, alcanzan una capacidad de 66,5 kWh, suficientes para una autonomía de 426 kilómetros (más adelante llegarán una baterías con más de 500 kilómetros). El consumo homologado por Mercedes es e 17, 7 kWh cada 100 kilómetros, un dato que quizá no comprendas del todo todavía, pero que no te queda más remedio que aprender siempre que quieras estar tanto de todo como siempre lo has estado ahora la llegada de los coches eléctricos.
La transmisión es de una sola velocidad, pero tiene un sistema de recuperación de energía con diferentes modos de funcionamiento. En total son cuatro modos de retención: D+. que da prioridad siempre que se pueda al avance por inercia y luego D, D- y D– para la retención, siendo el último la mayor retención posible con un nivel de frenado muy elevado. En caso de no querer estar jugando con las levas, se puede activar el modo Auto, que gestiona la retención según orografía y necesidades.
El nuevo Mercedes EQA 250 no es ninguna sílfide, más bien es como una ballena fuera del agua arrojando sobre la báscula 2.040 kilos en vacío (con los llenos sería a los 2.150 kilos incluyendo al conductor). Es nada menos que 555 kilos más pesado que un Mercedes GLA 200, fruto de su condición de vehículo de tecnología eléctrica, especialmente por sus baterías. Elementos, por cierto, que también merecen un poco de atención.
Todo el conjunto de baterías se compone de cinco módulos que integran 200 celdas en total, con una tensión nominal de 420 voltios. Uno de esos módulos está colocado bajo los asientos delanteros sustentado por un chasis que también hace como elemento estructural. La toma de carga es de tipo CCS y tiene un cargador embarcado de 11 kW para corriente alterna, pero que admite hasta 100 kW en corriente continua. Con esta última opción se puede obtener hasta el 80 % de la carga en media hora, partiendo siempre de un mínimo del 10 %. Por la parte baja, las baterías tienen un sistema de refrigeración líquida, que puede cambiar calor residual con el habitáculo mediante una bomba de calor.
Tecnología eléctrica a la venta el 4 de febrero
Mercedes ha querido ofrecer un funcionamiento óptimo en todo momento. Un coche eléctrico, al menos los actuales, son muy sensibles a la temperatura y no ofrecen el mejor rendimiento hasta que alcanzan una temperatura determinada. No es como un motor de combustión, porque éste funciona siempre con el mismo rendimiento y no se ve afectado por la temperatura de forma tan notable.
Con el objetivo de eliminar de la ecuación los problemas por temperatura, se han incorporado diferentes estrategias mediante el llamado “Electric Intelligence”. Entre las medidas que se barajan está el preacondicionamiento del habitáculo y, principalmente, de las baterías, programando el momento en el que se iniciará la marcha, programando el intercambio de calor entre baterías y habitáculo o acondicionado las baterías durante el trayecto para que al llegar al punto de carga, se encuentren en el estado óptimo de temperatura y pueda usarse la máxima potencia de carga.
Una de las mayores características de un coche eléctrico es el sonido, o mejor dicho, la ausencia del mismo. La normativa actual obliga que a baja velocidad (hasta los 30 km/h) el vehículo emita algún tipo de sonido para avisar a los peatones que hay un vehículo por las proximidades, pero no obliga a que haya sonido alguno en el interior. Por eso, Mercedes ha trabajado a fondo la insonorización, pero no ha usado material fonoabsorbente, lo ha hecho aislando de la estructura general toda la parte encargada de mover el coche (motor, ejes rodantes y baterías), mediante el uso de bastidores y uniones específicas.
El sistema Electric Intelligence también asiste en la navegación, asesorando sobre las rutas más interesantes por número de cargadores, según el estado de los elementos eléctricos, el perfil de la ruta, el tráfico, los límites de velocidad…
Las ventas del nuevo Mercedes EQA 250 se iniciarán el próximo día 4 de febrero, con un precio en Alemania de 47.540,50 euros. Por el momento la marca no ha facilitado los precios para España.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS