Era cuestión de tiempo, la misma marca lo avisó en su momento: Alpine tendría un SUV que ayudaría a su transformación a fabricante de coches eléctricos. Y aquí está, el Alpine A390_β, con el “beta” al final para que todo el mundo tenga claro que está ante un prototipo, el adelanto del modelo que llegará a producción y que, según afirman desde la marca, tomará el 80% del concept car, al menos en lo que respecta al apartado estético. También nos adelanta que tendrá u total de tres motores eléctricos

Hace ya tiempo que el concepto SUV, o al menos el concepto que se buscaba representar con los Sport Utlity Vehicles, difuminó sus barreras y se mezcló con otros estilos y otras ideas para dar lugar a coches que ni son SUV, ni son turismos “de toda la vida”. Por un lado, si lo piensas bien, es una buena noticia, pues la evolución natural de las cosas parece ponerlo todo en su sitio, al tiempo que no se pierden algunos argumentos que, de verdad, son interesantes en el segmento SUV. Argumentos como la imagen, una de las características que más ventas genera y que en el segmento SUV ha sido un pilar básico –por eso de desprender una imagen poderosa y demás… – o esa facilidad para entrar y salir del coche, tan argumentada por muchos usuarios.

Al fin y al cabo, los coches que se venden en masa los compran personas que buscan un medio de transporte y hay cosas que tienen más lógica que otras, como ofrecer un acceso al habitáculo más cómodo, algo que con el asiento rozando asfalto no se consigue. De todas formas, ese detalle también se ha difuminado un poco, sobre todo en los denominados crossover, que viene a ser una mezcla entre compacto y SUV, aunque a mí me gusta más usarlo para las rancheras con aspiraciones todoterreno, esas que todo el mundo llama “Scout”, aunque en Europa deberíamos llamarlos “Cross Country” –Volvo llegó antes que Škoda–.

El Alpine A390_β, al menos lo que podemos apreciar a través de las fotos y con la certeza de que miramos las imágenes de un prototipo, es que tiene de SUV muy poco: pasos de rueda con perímetro de plástico negro, protecciones plásticas también en los bajos de la carrocería, altura de dicha carrocería, superficie frontal… El resto, como el perfil, es más propio de un coupé, con un techo claamente curvo y que afectará, sin lugar a dudas, al espacio disponible para las plazas traseras. Habría que inventar una nueva denominación para este tipo de coches, SUV y crossover se quedan muy limitadas.

Sport fastback eléctrico con aspiraciones a ser un A110 con cinco plazas

No, el Alpine A390_β no crea un nuevo segmento, simplemente confirma que el segmento de los SUV cada día se aleja más de su idea original hacia algo más coherente y también, más deportivo. De hecho, la misma marca define al A390_β como “sport fastback”, así que podríamos mandar al carajo la idea de que estamos ante un SUV. Sí, tiene algunos rasgos, pero como se ha dicho antes, hay rasgos que no hace falta eliminar para la próxima generación de coches.

Desde Alpine dicen que la idea era diseñar un Alpine A110 con cinco plazas, y algo de A110 tiene, como las caderas y las líneas de carácter implementadas en las puertas. Es un coche que, en su vista lateral, resulta interesante y musculoso, pero que pierde cierto encanto en otras zonas por culpa de las dichosas modas actuales. El frontal, por ejemplo, carece toda personalidad, por culpa de las nuevas modas en cuanto a iluminación LED con la que se busca recrear toda clase de patrones y de iluminar todo lo iluminable –como el nombre de la marca–. Eso sin contar con la parte baja del frontal, donde aparecen nuevamente más motivos triangulares aplicados directamente sobre las planchas que dan forma a la carrocería.

Atrás encontramos más o menos lo mismo que en el frontal, más motivos triangulares en la carrocería –encima del difusor–, al tiempo que los pilotos adoptan tendencias como abarcar todo el ancho del coche. No obstante, aquí darle un pequeño tirón de orejas a los diseñadores, pues aparecen haberse inspirado en el Toyota C-HR. Al menos, visualmente y con la idea de que es un prototipo, la zona trasera es más atractiva que la delantera y tiene más carácter y personalidad.

Si hacemos caso a los comentarios que ofrece la propia marca en su comunicado, nos encontramos con expresiones como “perfecta audacia e innovación”, “creación emblemática del saber hacer de la marca”, “ADN deportivo”… Puro marketing que en un catálogo puede ser lógico su presencia, pero en una nota de prensa, donde importa más la información que aquello que busquen desde el departamento de marketing, está de más.

Un interior de nave espacial, aunque según dicen, está inspirado en competición

Por lo general, un concept car como el Alpine A390_β –por cierto, deberías leerlo como A390 Beta–, presenta un habitáculo cuyo diseño y cuyas soluciones son inviables en un automóvil de producción. Al menos, inviables a nivel de costes, claro, porque recrear en serie lo que incorpora el sport fastback francés debe ser una odisea. De entrada, la combinación de colores me parece un error monumental, porque hace complicadísimo apreciar nada con claridad en el interior y da la impresión de ser todo un batiburrillo que resulta muy incómodo de mirar –la foto que tienes justo encima muestra claramente lo que se comenta–.

Desde Alpine destacan que ofrece una posición de conducción única e innovadora, que a simple vista podríamos decir que es incluso radical, con la base del asiento muy cerca del suelo –del suelo del coche, claro– y la zona donde se apoyan las corvas muy alta. Es una posición bastante deportiva, con un volante aparentemente muy vertical y cerca del cuerpo. De todas formas, el asiento esconde dos posiciones, una más cómoda y usable en el día a día y otra más deportiva y radical.

Obviamente, todo es muy tecnológico y futurista, como una instrumentación con efectos holográficos y multidimensionales, o un volante de formas casi rectangulares. La transmisión se gestiona mediante botones obtenidos de rocas talladas y pulidas. Mientras tanto, los asientos traseros, o mejor dicho, el asiento trasero, es de una sola pieza, aunque ofrece dos plazas claramente diferenciadas.

La verdad es que es de agradecer que interiores tan rebuscados no lleguen a producción. El único sentido que tiene algo así es llamar la atención, aunque en esta ocasión es mejor ni mirar por culpa de la combinación de colores y materiales. Es lo peor del coche, sin lugar a dudas…

Reinventar la deportividad en la era eléctrica

Uno de los objetivos que se han autoimpuesto en Alpine, ha sido la “reinvención de la deportividad en la era eléctrica”, es decir, intentar que un coche eléctrico sea deportivo, que imaginamos que alguien lo logrará algún día. No obstante, Alpine apunta hacia una idea que podría ser la clave: las sensaciones.

Desde hace un buen puñado de años, la deportividad se ha basado casi exclusivamente en potencia y velocidad, pero de las sensaciones nadie se ha acordado y, desde un punto de vista pasional, pura conducción espirituosa, como dirían algunos, las sensaciones son vitales. Ese apartado es el que ha hecho famosa a Ferrari, por ejemplo, el que ha logrado que coches como el Hyundai i30 N sean objetos de deseo y que coches como el Honda S2000 sean coches de culto; las sensaciones.

Y es ahí, en las sensaciones, donde los eléctricos fallan estrepitosamente. Conducir un coche eléctrico está falto de emoción, es como jugar a un videojuego, pero con una aceleración brutal durante los primeros 100 metros. El resto no ofrece ninguna retroalimentación y esa es una de las principales argumentaciones para considerar a un coche eléctrico una lavadora con ruedas.

Según la información que ha facilitado la marca, han buscado ofrecer las sensaciones de conducción del Alpine A110, pero proporcionadas por un coche con tres motores eléctricos –uno delante y dos detrás–, con gestión de par activa, que no es nada nuevo y menos en un coche eléctrico, que permite gestionar cada motor por separado y conseguir la máxima eficacia. Y quizá sea un problema, el tener una tracción tan perfecta y un control tan completo le resta emoción a la conducción…

En cuanto a sus prestaciones… pues ni la más remota idea porque Alpine no ha dicho nada al respecto, aunque tampoco es algo que podamos considerar importante al tratarse de un prototipo. Veremos por donde van los tiros cuando llegue a producción.