Tras una pausa desde octubre, los equipos volvían a Hockenheim a demostrar quien ha conseguido sacar el máximo del nuevo reglamento del DTM –Deutsche Tourenwagen Masters-, el campeonato alemán de turismos. Como te adelantábamos, este año los antiguos y ruidosos V8 se jubilaban para dar paso a unos mucho más eficaces molinillos de cuatro cilindros y más de 600 CV. También era el momento de despedir a Mercedes como fabricante, que era reemplazada por los chicos de Aston Martin tutelados por la misma empresa que llevaba los coches de la estrella, HWA.

En las jornadas de pruebas celebradas en Lausitz veíamos unos Audi muy fuertes. No lejos le seguían los BMW, cuyo jefe, Jens Marquardt, no descartaba problemas de fiabilidad a lo largo de la temporada con los nuevos motores. Y los gran desaparecidos hasta el último minuto eran los Aston. Los de Gaydon llegaron por los pelos a probar en las últimas jornadas de test y consiguieron acabar el cuarto coche justo a tiempo para la carrera de Hockenheim. De hecho, Daniel Juncadella nos confirmaba que el coche acababa prácticamente de llegar de fábrica y aún tenían que aprender cómo funciona y seguir desarrollando.

Para la clasificación del sábado, el circuito de Hockenheim se empeñó en que los chicos de Aston Martin echaran de menos Inglaterra lo menos posible, al menos en cuanto al tiempo se refiere. En una lluviosa y fría mañana, los pilotos se peleaban con sus nuevas monturas para conseguir poner a los neumáticos en temperatura, y el que mejor lo conseguía fue el alemán Marco Wittmann, seguido por escasas 66 centésimas del piloto de Audi, Mike Rockenfeller. El tercero en la parrilla era Paul di Resta, que milagrosamente consiguió colar su recién estrenado Aston Martin en tercer posición, justo delante del Audi de René Rast.

La carrera del sábado

Se apagaban los semáforos en el trazado alemán a las 13.30 del mediodía y arrancaba el DTM 2019 con la pista empapada. Wittmann hacía una salida estupenda, mientras que di Resta notaba las limitaciones de su montura y se quedaba rezagado. En la primera curva Rast, que había sido adelantado por Timo Glock, tocó al piloto de BMW y el antiguo piloto de Toyota perdía posiciones que luego pelearía por recuperar a lo largo de las 35 vueltas de la carrera.

Tras la colisión con Glock, que los comisarios decidieron no sancionar, Rast emprendió una furiosa persecución hasta la cabeza de carrera con el BMW de Wittmann en el punto de mira. A base de velocidad en la parabólica y valor con la frenada en la crítica Spitzkehre (horquilla al final de la parabólica) Rast consiguió quitarse de en medio a todos los que le separaban de Witmann, llegando a estar sólo detrás del piloto de BMW en la vuelta 13.

Los dos coches que encabezaban la carrera estaban estirando al máximo su parada obligatoria en boxes, cuando a falta de cinco vueltas para el final, un problema con el embrague puso fin a la persecución de Rast, permitiendo a Marco entrar a cambiar ruedas, faltando tres vueltas para el final y ganando con una desahogada ventaja de casi 14 segundos por delante de Rockenfeller.

Por su parte, Aston Martin tuvo que retirar a dos de sus coches, uno de ellos el de Paul di Resta, cuando peleaba por mantenerse en los cinco primeros puestos, aunque finalmente lograba sus primeros puntos gracias a Juncadella, que logró una novena posición arriesgándose a hacer su parada obligatoria en la primera vuelta y manteniendo a su Vantage en pista durante 33 vueltas sin pausa.

En la mañana del domingo, las inclemencias meteorológicas habían cesado y con una temperatura fresca, pero más amable y la pista seca, salían los bólidos en busca del mejor tiempo para la clasificación. El mejor tiempo lo marcó el austriaco Phillip Eng, con 1:29,388, un poco más de 3 segundos más rápido que el anterior récord de la pista marcado con los antiguos V8, que le servía para resarcirse tras unas sesiones de prácticas plagadas de problemas con la electrónica de su M4.

Detrás de él salía su compañero de escudería Marco Witmann y el top 3 lo cerraba Frijns con su Audi. Los Aston Martin se veían relegados a las últimas posiciones de la parrilla con René Rast intercalado entre ellos por problemas de nuevo con la caja de cambios que le impidieron luchar por mejores tiempos.

La carrera del domingo

Con los coches preparados en la parrilla de salida y nuevamente con un BMW al frente del pelotón arrancaba la segunda carrera del DTM 2019.

Tras una salida sin incidentes en la que Eng conseguía ampliar su ventaja sobre el grupo y Witmann quedaba algo rezagado entre los Audi. Las vueltas avanzaban con normalidad hasta que Duval acababa en la grava en la Sachs-Kurve lo que provocó la salida del coche de seguridad. Esta oportunidad la aprovecharon Paul di Resta para conseguir gomas nuevas y también René Rast. El alemán quedaba completamente descolgado del grupo al que lograba alcanzar después de dos vueltas contrarreloj, justo antes de la salida lanzada al retirarse el safety car.

Y es después de esta nueva salida cuando Rast aplastaba sin piedad a cada uno de los coches que tenía delante, beneficiándose de los tres segundos de ventaja que le daban sus neumáticos nuevos y ya calientes frente a los del resto, que tras rodar detrás del safety car, habían quedado demasiado fríos para oponerse al número 33. Sólo 5 vueltas le bastaron al subcampeón del año pasado para rebasar a Phillip Eng en el paso por la horquilla de la vuelta 13.

Aquí comenzaría un paseo triunfal que tendría que interrumpir cerca del final para cambiar de nuevo los neumáticos y acabar con una ventaja de casi 12 segundos sobre el Audi de Müller. La tercera plaza caía en manos de Frjins y el pole-man Phillip Eng se tenía que contentar con un cuarto puesto.

Los recién llegados al DTM, Aston Martin, tuvieron su momento de gloria gracias a la pronta parada de di Resta mientras que el safety car estaba desplegado y consiguieron liderar brevemente la prueba, hasta que tuvieron que pasar por boxes a cambiar nuevamente los neumáticos y le pasaron el testigo al imbatible Rast.

El podio de la primera carrera fue el siguiente:

1. Marco Wittmann (BMW) 34 vueltas en 1h 03′ 30,158”
2. Mike Rockenfeller (Audi) +13,727”
3. Robin Frijns (Audi) +34,681”

Y en la segunda carrera el podio quedó como sigue:

1. René Rast (Audi) 37 vueltas en 58′ 53,819”
2. Nico Müller (Audi) +11,922”
3. Robin Frijns (Audi) +12,184”

La próxima cita será en el circuito de Zolder, en Bélgica y se disputará del 17 al 19 de mayo. Nuevos motores, nuevas reglas, pero la emoción continua intacta en el DTM.