Volkswagen acaba de revelar el prototipo de 680 CV de propulsión puramente eléctrica que utilizará en el ascenso de Pikes Peak en el mes de junio: el Volkswagen I.D. R Pikes Peak. Con el objetivo de establecer un nuevo récord, Volkswagen necesitaba a un piloto del palmarés de Romain Dumas, campeón de las 24 Horas de Le Mans en 2010, 2013 y 2016 y vencedor del Pikes Peak International Hill Climb en 2014 y 2016, entre otros títulos.
Esta máquina, que ha sido diseñada exclusivamente para la mítica subida de Colorado (EE.UU.) de 20 kilómetros y 156 curvas, cuenta con dos motores eléctricos que se combinan para ofrecer 650 Nm de par motor sobre las cuatro ruedas. Según la empresa de Wolfsburgo, el I.D. R Pikes Peak pesa menos de 1.100 kg, incluido el conductor, y alcanza los 100 km/h desde parado en tan solo 2,25 segundos, más rápido que un Fórmula E e incluso un Fórmula 1. La velocidad punta se queda en unos “modestos” 240 km/h, más que suficientes para recorrer el ascenso norteamericano.
Este corredor alemán mide 5.200 mm de largo, 2.350 mm de ancho y 1.200 mm de alto, con una distancia entre ejes de 2.850 mm. Cuenta con suspensión de doble horquilla, un chasis construido alrededor de la celda de seguridad (monocasco, por supuesto), baterías de iones de litio montadas en el suelo del coche, un alerón trasero de generosas dimensiones y diversas piezas aerodinámicas diseñadas para garantizar el máximo agarre a pesar de las grandes altitudes. Sin embargo, Volkswagen dice que el foco del I.D. R Pikes Peak no está en el rendimiento absoluto, sino en el equilibrio de la capacidad y el peso de las baterías.
El récord absoluto de Pikes Peak de 8 minutos y 13,878 segundos fue establecido por Sébastien Loeb en el Peugeot 208 T16 Pikes Peak en 2013
Y es que Volkswagen se está preparando para lanzar la denominación I.D. de vehículos eléctricos al mercado a partir de 2019. El jefe de desarrollo, Frank Welsch, describió el evento de Pikes Peak como una “prueba de fuego real” para el programa eléctrico de Volkswagen. “Los clientes siempre se han beneficiado de los hallazgos en el automovilismo, y esperamos tomar estos hallazgos y usarlos como un ímpetu valioso para el desarrollo de futuros modelos I.D.”, dijo Welsch.
El coche está alimentado por baterías de iones de litio desarrolladas en colaboración con la planta de baterías de Volkswagen en Braunschweig, Alemania, teniendo como objetivo garantizar la mayor potencia de salida en lugar de buscar el mayor rango de autonomía absoluto. La marca afirma que alrededor del 20% de la energía utilizada por el I.D. R Pikes Peak se creará mediante la recuperación de la misma durante las frenadas. Un sistema de carga rápida permitirá que las baterías se carguen en aproximadamente 30 minutos.
Sven Smeets, director deportivo de la marca, insinuó que podría ser el primero de varios proyectos de vehículos eléctricos de competición: “Al igual que los vehículos de producción de la marca Volkswagen, los coches de carreras totalmente eléctricos también desempeñarán un papel cada vez más importante para nosotros en el futuro”.
El I.D. R Pikes Peak fue desvelado en el circuito Pôle Mécanique en Ales, Francia, poco antes de comenzar un programa de pruebas allí. Debido a que el tramo de carretera de Pikes Peak es público, los participantes no pueden realizar pruebas antes del evento; incluso en la práctica oficial, solo se ejecutan en secciones cortas. El I.D. R Pikes Peak participará en la categoría de prototipos sin limitación, donde solo se estipula que los coches cumplan con ciertos requisitos de seguridad.
A pesar de que el récord absoluto pertenece a Peugeot y Sébastien Loeb, Volkswagen tiene como objetivo el récord de un eléctrico, concretamente uno de 8 minutos y 57,118 segundos conseguido por Rhys Millen en un Drive eO PP100 en 2016. Ese coche constaba de seis motores eléctricos y ofrecía una potencia máxima superior a los 1.600 CV, así que no será tarea fácil.
El Pikes Peak, que se celebra el 24 de junio, está considerado como uno de los ascensos montañosos más duros del mundo. Además de los 156 giros en su ruta de 20 kilómetros, los competidores también deben hacer frente a la elevación: la línea de salida está a 2.860 metros sobre el nivel del mar y se eleva hasta una altura final de 4.300 metros. El desnivel de la carretera promedia el 7,2 %, no es moco de pavo.
Volkswagen compitió anteriormente en Pikes Peak entre 1985 y 1987, con Jochi Kleint corriendo con un Golf bimotor. Ese compacto tenía dos motores turboalimentados de 1.8 litros que empujaban sobre cada eje, dando una potencia de salida máxima de 660 CV. Kleint fue el piloto más rápido en la primera mitad del trayecto de 1987, pero se retiró con una falla en la junta de suspensión a menos de kilómetro y medio del final.
Luis Blázquez
Aficionado al mundo del motor desde que fui concebido. Aprendí a leer con revistas de coches y, desde entonces, soy un completo enamorado de la gasolina. Como no se nace sabiendo todo, cada día es importante aprender algo nuevo y así ampliar los conocimientos. Este mundillo tiene mucho que ofrecer, al igual que un servidor a vosotros los lectores.COMENTARIOS