Variadas sensaciones dejó la 93° edición de las 24 Horas de Le Mans. Con Ferrari y sus victorias consecutivas, hemos vuelto a los años sesenta. A Porsche todavía le cuesta digerir el trago amargo y Cadillac quiere crecer a base de autocríticas. De los muros para afuera, las novedades comerciales que los fabricantes inyectan en fechas de júbilo automotriz como algún importante Gran Premio o, como en este caso, las de la Sarthe.
Como Volkswagen con su edición especial 50° Aniversario del Golf GTI y otras marcas, Genesis no se quedó afuera y, en el marco de la carrera de resistencia en Francia, anunció lo suyo para el mercado. ¡Con permiso, España! Pero Genesis no es una firma comercial más, que la confirmación de su llegada a las calles españolas la haya dado a conocer en el marco de Le Mans tiene sus argumentos. El alto rendimiento es su razón de ser, ser una suerte de anti-AMG es su razón de ser, correr en Le Mans también.
El 2026 es el año en el que Genesis debe cumplir con su claro objetivo: dar que hablar como nunca antes lo ha hecho. Adentro y afuera de las pistas, sobre el asfalto a velocidades desatadas y en la quietud de la concesionaria, las pruebas de manejo y los primeros avistamientos en las calles. Cuando en las 94° 24 Horas de Le Mans el hypercar GMR-001 haga su primera incursión en el World Endurance Championship, la marca propiedad de Hyundai habrá confirmado la experiencia acumulada en las escalas europeas de la Le Mans Series.

Lo que ocurra con el GMR-001 cuando le toque avanzar por Dunlop, Mulsanne, Maison-Blanche y el resto de los tramos de la Sarthe será una palanca de marketing para los modelos de calle que se lanzarán en simultáneo. Y me encantaría decirte que entre los coches que figuran como los de entrada al país aparece alguna versión para el cliente del Genesis X Gran Berlinetta Concept o, lo que resultaría un impacto aún mayor y pondría en alerta al Xiaomi SU7 Ultra, alguna versión de calle del concepto evolucionado: el X Gran Racer de más de 1.500 CV.
Pero no. De momento, el consuelo seguirá siendo acceder a esas bestias eléctricas mediante el Gran Turismo 7. La inminente realidad de Genesis, a su manera, marcará su intrínseca deportividad. Su lema, Elegancia Atlética, no puede evidenciar de una manera más literal la simbiosis entre firma de lujo y alto desempeño, y los primeros encargados de esparcirla por España serán tres modelos. ¿Cómo definiría este plan inicial? Ambicioso.
El GV60, SUV compacto, se alista como el que abrirá la puerta a la gama y nos invita a preguntarnos, con suma urgencia –no, no cuánto rendirá, porque ya sabemos que su nueva autonomía homologada es de 560 km–, si puede actuar más temprano que tarde como puente para que se sume la versión Magma. El GV70 Electrified, con estilo de familiar, plantará competencia a los exponentes en auge de los todocamino medianos eléctricos con tracción total. Hasta aquí, nada fuera de lo frecuente en el ámbito europeo. Todo cambia con su gran apuesta: los cinco metros de belleza de su berlina G80. El Mercedes-Benz EQE ya mira de reojo…
Mauro Blanco
COMENTARIOS