Coche del día: Suzuki Grand Vitara 2.0 16v (1998)

Coche del día: Suzuki Grand Vitara 2.0 16v (1998)

Solo disponible con carrocería de tres puertas, se podía considerar el más deportivo de la gama


Tiempo de lectura: 3 min.

El Suzuki Grand Vitara 2.0 16v fue uno de esos coches que podrían haber pasado desapercibidos ante cualquier usuario, en una época en la que todo estaba dominado por los diésel. Un motor gasolina de dos litros en un vehículo de aspiraciones todoterreno no era una combinación que pudiera considerarse ganadora, pero en esta ocasión, el conjunto conseguido era merecedor de todas las atenciones.

La familia Vitara tiene una larga tradición tras de si, en eso de poner en circulación modelos interesantes, pero también relativamente económicos, en un segmento donde los precios nunca son bajos. Los todoterreno siempre han sido coches grandes y caros, pero los Suzuki Vitara se colocaban en el escalón contrario: eran pequeños y baratos –comparados con el resto de todoterrenos, claro–.

El Suzuki Grand Vitara apareció a comienzos del Siglo XXI como segunda generación del modelo japonés y ciertamente, poco tenía que ver el uno con el otro. El Grand Vitara era totalmente diferente, más grande, más capaz, más potente, mejor acabado… Era una notable evolución que tenía en el motor de dos litros y culata multiválvulas una de sus mejores opciones, y no lo decimos nosotros, lo dice la prensa de la época y en especial Coche actual, de la mano del periodista L.M. Vitoria, quien pudo probar el Grand Vitara 2.0 16v.

Con 128 CV a 6.000 revoluciones y 174 Nm a 2.900 revoluciones, el motor del Grand Vitara 2.0 16v, un cuatro cilindros de 1.995 centímetros cúbicos, ofrecía un buen rendimiento para mover con soltura los 1.286 kilos que pesaba todo el conjunto. No era un coche veloz, por lo general, los todoterreno no son rápidos, pero sí era bastante capaz en conducción off road y muy divertido en pistas de tierra por la rápida respuesta del propulsor a cualquier régimen y el elevado par a bajas revoluciones disponible.

En carretera la suspensión presentaba un tarado muy blando que provocaban movimientos de la carrocería, al tiempo que la dirección resultaba muy lenta y el selector del cambio muy duro de accionar. Sin embargo, según cuentan en la prueba de Coche actual, no se trata de un coche delicado o complicado de conducir, simplemente tiene las reacciones de un coche pensado para ofrecer un mejor comportamiento fuera del asfalto, que además tiene una batalla corta y propulsión. Propulsión que puede convertirse en tracción total, que se combinaba a la perfección con una reductora.

No obstante, había algunos detalles que merecían ser tenidos en cuenta. Por un lado, el Suzuki Grand Vitara 2.0 16v solo se ofrecía con carrocería de tres puertas. La firma japonesa ligaron los motores a una carrocería en concreto –por ejemplo, el V6 de 2,5 litros solo se podía escoger con carrocería de cinco puertas–, para evitar la canibalización entre sus variantes. Por otro lado, el Grand Vitara 2.0 16v no tenía ABS de serie ni posibilidad de montarlo como extra y los consumos, con una medía de 10,7 litros, se podían considerar contenidos para el tipo de vehículo.

Para rentar, los 3.140.000 pesetas –18.872 euros de la época, sin IPC– que se pedían por el Suzuki Grand Vitara 2.0 16v no eran pocos, pero en el segmento resultaban bastante interesantes.

COMPARTE
Sobre mí

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

COMENTARIOS

avatar
2000
 
smilegrinwinkmrgreenneutraltwistedarrowshockunamusedcooleviloopsrazzrollcryeeklolmadsadexclamationquestionideahmmbegwhewchucklesillyenvyshutmouth
Foto
 
 
 
  Suscribir  
Notificar de


NUESTRO EQUIPO

Pablo Mayo

Ingeniero de profesión, la mayor pasión de mi vida son los coches desde que era un chaval. El olor a aceite, gasolina, neumático...hace que todos mis sentidos despierten. Ahora embarcado en esta nueva aventura, espero que llegue a buen puerto con vuestra ayuda. Gracias por estar ahí.

Javi Martín

Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".

Ángel Arias

La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.

Alejandro Delgado

Jesus Alonso

Javier Gutierrez

Mauro Blanco