Alfa Romeo, fundada en 1919 y una de las marcas automovilísticas más antiguas del mundo, tiene una rica historia en competición con elegantes y rápidos bólidos, como por ejemplo, el impresionante Alfa Romeo 33 Stradale de la década de los sesenta. Enzo Ferrari condujo para Alfa Romeo en los años veinte y otros ilustres como Tazio Nuvolari obtuvieron grandes victorias a los mandos de estos vehículos tan especiales.
La segunda guerra mundial lo cambió todo y la Europa de posguerra se recuperó con una nueva economía y la necesidad de vehículos fabricados a gran escala.
En 1954, Alfa Romeo lanzó al mercado el Giulietta Sprint. Al coupé 2+2 con carrocería Bertone, diseñado por Scaglione, le siguieron en 1955 un sedán de cuatro puertas y un llamativo convertible, cuyas carrocerías fueron diseñadas y construidas por Pininfarina. No os voy a aburrir con datos sobre sus capacidades, la belleza de este automóvil es más que suficiente para admirarlo, solo unas breves pinceladas técnicas.
Todos usaban el brillante y voluntarioso motor de cuatro cilindros en línea y doble árbol de levas en cabeza de 1.3 litros que sería el corazón de muchos Alfas en las siguientes décadas, especialmente cuando el cubicaje se amplió a 2.0 litros.
El Veloce era una versión mejorada del Spider, aunque todos los Giulietta usaban el mismo motor de 1290 cc, el Veloce estaba equipado con carburadores de doble cuerpo, Weber 40 DCOE y alcanzaba una potencia de 125 CV a 7.000 rpm. Con una caja de cambios manual de cuatro velocidades, suspensión por muelles (independiente en la parte delantera y un eje trasero rígido) y frenos de tambor hidráulicos en las cuatro ruedas, el juguetón Spider Veloce era justo lo que quería cualquier corredor de la época, un roadster liviano y rápido. En las décadas siguientes y hasta bien entrado nuestro siglo, las formas y proporciones casi perfectas del Spider lo han convertido en un clásico perdurable y plenamente actual entre los autos clásicos deportivos.
El Spider Veloce que se muestra aquí, está disponible a través de venta privada en Gooding, es realmente especial. Este Veloce no sólo se encuentra entre los automóviles de posguerra más raros y buscados, este ejemplar es particular ya que es uno de los primeros producidos y le valió a Alfa Romeo su primer premio FIA en Estados Unidos cuando ganó en su categoría las prestigiosas 12 Horas de Sebring. Este coche, que se encuentra en un estado muy original, es una pieza fantástica de la historia de las carreras italianas y seguramente uno de los ejemplos más significativos de esta rara raza de automóviles.
Con chasis No. AR 1495 00657, esta unidad fue pedida por Jake Kaplan, el distribuidor de Alfa Romeo en Providence (Rhode Island), quien se convirtió en el importador de Lamborghini en la costa este en 1964. Kaplan realizó el pedido a través del importador estadounidense Max Hoffman de Nueva York con la intención de inscribir el Spider en la carrera de Sebring, válida para el Campeonato Mundial de Fabricantes de Automóviles Deportivos de la FIA de 1957. La victoria le dio a Alfa Romeo su primer título en un evento estadounidense autorizado por la FIA. Al año siguiente, el coche de Kaplan quedó segundo en la misma carrera.
El prestigio que esta competición dio a Alfa fue incalculable, hay que tener en cuenta que para el público americano Alfa Romero era una pequeña marca extranjera (sin saber muy bien de donde procedía) con unos medios muy inferiores a los de sus rivales americanos por aquel entonces.
Los deportes del motor de la década de los cincuenta eran un poco como el Salvaje Oeste y el Spider fue modificado con un parabrisas reducido, un nuevo depósito de combustible dentro del maletero y luces de rally Lucas montadas en la parrilla, modificaciones que aún conserva a día de hoy. Como recuerdo de su procedencia de competición también conserva las pegatinas de inspección de la organización de Sebring originales de 1957 y 1958 en la guantera.
La cubierta de vinilo también es original, así como las gomas del suelo del habitáculo e incluso la rueda de repuesto (con su neumático de carreras Goodyear Blue Streak genuino) también permanece. Es importante destacar que el Spider todavía conserva su motor original, algo casi inaudito en un vehículo de competición histórico.
En 2002, el experto en la marca y por entonces propietario del Veloce, Keith Goring de Alfas Unlimited llevó a cabo una restauración muy respetuosa con el modelo original. El actual propietario encargó la reconstrucción del motor a DV Mechanics, donde además de poner el motor al día se respetaron los bonitos acabados con un toque ya envejecido por el paso del tiempo y uso.
Este Alfa tan especial, acompañado de fotografías originales, documentación, Pasaporte Histórico FIA y Tarjeta de Identidad FIVA, se presenta en su estado de carreras en gran medida original. No sabemos el precio de esta unidad ya que la venta se realizará por contrato privado. Ciertamente, no me importaría que estuviese en mi garaje.
Ángel Arias
La historia del automóvil está llena de grandes emprendedores, de ideas arriesgadas, curiosas casualidades, irreconciliables enemistades y muchos fracasos. Es un mundo intenso y fascinante del que muchos hemos quedado cautivados. Cualquier vehículo con un motor me parece interesante, ya sean motocicletas, automóviles, camiones, aviones o barcos; es estupendo sentir la brisa del viento en la cara sobre uno de ellos. Si estáis aquí es porque compartimos afición.COMENTARIOS