En estos días recientes hemos sabido que el Honda e finalizará pronto su comercialización. Según algunas fuentes, el pequeño urbano eléctrico japonés ya ha dejado de producirse y solo permanecerá disponible para su adquisición mientras queden unidades ya fabricadas a la espera de comprador. El Honda e:Ny1 ocupará el hueco que este pequeño urbano eléctrico dejará en el catálogo de los nipones, aunque, claro, se trata de un concepto completamente distinto. En realidad, con su carrocería SUV y su fabricación en China, a través de uno de los muchos proyectos de empresa conjunta que Honda tiene establecidos en aquel país, implica un cambio de tendencia de mucha importancia para la marca japonesa.
Un inicio ilusionante
Puede afirmarse, sin miedo a caer en el error, que el mercado ha decidido: mañana, SUV —y cada vez peor tiempo, por parafrasear a aquel—. Como también ha quedado demostrado que los fabricantes no tienen garantizado el éxito de ventas de productos derivados sin apenas modificaciones de sus más alabados concepts. Los orígenes de este modelo se remontan al prototipo Honda Urban EV Concept que los japoneses mostraron en el Salón del Automóvil de Fráncfort de 2017. Con él, Honda nos trasmitía sus ideas acerca de la movilidad urbana en clave eléctrica. La buena recepción generalizada, tanto por parte de la prensa especializada como por el público en general, impulsó a Honda hacia la fabricación de un modelo de producción basado en este concept.
Dos años después, en 2019, Honda volvió al mismo lugar con la versión definitiva del Honda e y el interés despertado entre quienes estuvieron allí presentes no hizo sino incrementarse. La expectativa de contar en el mercado con un vehículo eléctrico de pequeño tamaño —rara avis, en cierto modo— con aspiraciones urbanas —hábitat ideal para este tipo de automóviles— demostraba que se trataba de un producto muy funcional y práctico. Si a esto añadimos su condición de vehículo de propulsión, un reparto perfecto de masas entre cada eje y unos nada despreciables 113 kW —152 CV— de potencia máxima para su motor, el urbano eléctrico también demostraba cualidades como vehículo de conductor.
Golpe de realidad
Ahora bien, pese a su pequeño tamaño —3.894 milímetros de longitud—, sin duda ventajoso a la hora de callejear por las estrechas vías de los centros urbanos de las típicas ciudades europeas, y pese a que su batería es de solo 35,5 kWh de capacidad, el Honda e supera por poco los 1.500 kg de peso, por lo que su agilidad se ve comprometida. No obstante, probablemente el mayor problema que presentaba este modelo, como producto, pasaba por su elevado precio. En nuestro continente, no bajaba de los 30.000 euros su tarifa para una versión de acceso —37.000 euros piden hoy en su página web—. Por ese dinero, el mercado ya ofrece otras opciones de modelos eléctricos más capaces o, incluso, automóviles híbridos enchufables, mucho más polivalentes e igualmente aptos para circular por las Zonas de Bajas Emisiones. Este posicionamiento en términos de precio ha lastrado las ventas del modelo desde el inicio de su comercialización. Solo 10.000 unidades se vendieron en nuestro continente hasta finales del año pasado, según datos de Car Sales Base.
En este sentido, Autocar ha hablado con Rebecca Adamson, directora de operaciones de la división de automóviles de Honda en el Reino Unido. La directiva afirmó que la marca japonesa se centrará en la producción y comercialización de vehículos con carrocerías en formato SUV, “que es donde realmente está la demanda del mercado”, añadió. También descartó cualquier posibilidad de que Honda desarrolle un sucesor para el Honda e con un concepto equivalente, al menos en Reino Unido, una afirmación que podemos extender al continente europeo.
El pueblo pide SUV
Así, el sucesor espiritual del Honda e en el catálogo de la marca japonesa en nuestro mercado será el Honda e:Ny1, un SUV eléctrico que se fabrica en China para la marca nipona. Aunque sus precios de partida son más elevados incluso que los del Honda e —más de 50.000 euros, en todo caso, inferiores a los que habrían derivado de su fabricación en su propio país de origen—, los japoneses, como tantos otros fabricantes, están convencidos de que su aspecto SUV y el incremento de espacio disponible en su interior resultarán más seductores para los consumidores. Los 412 km que puede recorrer por cada carga completa de su batería de 68,8 kWh también lo hacen más polivalente que el Honda e, que no supera los 222 km de autonomía.
Por otro lado, que el Honda e abandone el mercado de forma abrupta puede también entenderse como un revés para las instituciones europeas, en nuestro caso, quienes ven con muy buenos ojos la popularización de vehículos eléctricos de este tipo, que necesitan baterías de poco tamaño y, por ello, reducen la demanda de materias primas para la fabricación de estas pilas.
El fracaso comercial del Honda e quizás nos puede dejar cierto poso de tristeza, al constatar la inviabilidad de uno de los escasos ejemplos de automóviles eléctricos que apuestan por limitar las consecuencias negativas de este tipo de movilidad… salvo el precio. Esta experiencia de los nipones, sin embargo, puede servir de aprendizaje para otras compañías que desean ofrecer un producto de estas características, esto es, un urbano eléctrico con un precio accesible. Desde Francia llegará pronto uno de estos vehículos, un Renault 5 eléctrico que, como el Honda e, también apuesta por el estilo retro para su diseño y que ya ha despertado el interés de todo el público. Ahora solo deben ser capaces de venderlo por un precio que impida que los compradores terminen también dándole la espalda, abocándolo así a su salida del mercado por la puerta de atrás.
David García
No conozco sensación mejor que la de un volante en las manos. Disfruto también con ellas sobre el teclado, escribiendo ahora para vosotros algo parecido a aquello que yo buscaba en los quioscos cuando era un guaje.COMENTARIOS