Hay ocasiones en las que cuesta un poco entender las cosas. A día de hoy, todo lo que no sea apostar por le tecnología eléctrica, no parece tener mucho sentido, ¿verdad? Pues hay quien lo hace, como Mazda, que invirtió una buena cantidad de dinero en el desarrollo de un nuevo motor diésel, ¡¡diésel!! La tecnología más denostada actualmente, ni más ni menos. Además, no es un propulsor cualquiera, sino un seis cilindros en línea de 3.3 litros, que ocupará el hueco bajo el capó del nuevo Mazda CX-60.
Según nos cuenta la marca, este movimiento responde a la “estrategia multisolución” que ha puesto en marcha la marca, con el objetivo de atender las necesidades de clientes que buscan un coche eficiente para cubrir largas distancias y con una gran capacidad de remolque. Una explicación muy coherente, pues todavía no se ha inventado nada mejor que un motor diésel para recorridos de larga distancia por carretera. Y si hay que tirar de un remolque, menos todavía.
El nuevo motor e-Skyactiv D de seis cilindros y 3,3 litros, se ofrecerá con dos niveles de potencia. El primer nivel será una versión con 147 kW (200 CV) y la segunda será una versión con 187 kW (254 CV) y 550 Nm de par. Esta versión, además, contará con sistema de tracción total Mazda i-Activ AWD. Ambas versiones disponen de hibridación ligera con sistema eléctrico de 48 voltios llamado “Mazda M Hybrid Boost”.
Desde Mazda también nos cuentan que este nuevo motor diésel no solo es micro híbrido, sino que se han desarrollado varias cosas expresamente. Por ejemplo, para mejorar la eficiencia, se ha adoptado un nuevo tipo de tecnología de combustión denominada “Distribution-Controlled Partially Premixed Compressión Ignition”, o dicho de otro modo, “encendido por compresión controlado por la distribución con premezcla parcial”. La marca no da muchos más detalles, pero si ha dado los datos de ambas versiones. Así, el menos potente, el de 200 CV, tiene un consumo de 4,3 litros cada 100 kilómetros y unas emisiones e 127 gramos de CO2 por kilómetros. El más potente, con 254 CV, anuncia un consumo de 5,3 litros y unas emisiones de 137 gramos de CO2. Son datos oficiales, cifras que no siempre es sencillo igualar en una conducción diaria, pero igualmente son buenas cifras (pongamos que en conducción real el consumo más alto ronde los 6,5 litros). Puede remolcar hasta 2.500 kilos.
El Mazda CX-60 es un coche grande, con una longitud de 4.745 milímetros, una anchura de 1.890 milímetros y una altura de 1.680 milímetros, mientras que la batalla es de 2.870 milímetros.
Llegará al mercado en 2023, junto a las versiones de gasolina con el nuevo seis cilindros 3.0. No hay precios todavía, pero es evidente que no será un coche barato.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS