Era cuestión de tiempo que las consecuencias de la agresión de Rusia a Ucrania comenzarán a dejarse notar en la industria del automóvil. Aunque la guerra nos pille lejos, sus nefastos resultados al final nos afectan a todos de un modo u otro. Y uno de esos efectos, al menos de momento, es la retirada de algunos fabricantes del mercado Ruso y posiblemente, algunos problemas económicos. Hace poco Volkswagen y Jaguar Land Rover detenían las ventas de coches nuevos en Rusia.
Volkswagen por ejemplo envió una orden a todos los concesionarios Rusos, prohibiendo la venta de nuevos vehículos de Audi, Škoda y de la propia Volkswagen , producidos fuera de las fronteras rusas. Sólo tienen permiso para vender aquellos que se hayan fabricado localmente o los importados que ya hayan pasado por la aduana. Porsche también ha tomado la misma decisión (al fin y al cabo, forma parte de Volkswagen-Audi Group).
Jaguar Land Rover, por su parte, ha comunicado a sus concesionarios que se detiene el envío de coches a Rusia hasta que todo vuelva a la normalidad, salvo que futuras sanciones impidan comerciar cualquier producto europeo en Rusia. Las marcas de General Motors que operan en Rusia también detienen su actividad.
El fabricante sueco Volvo ha sido una de las últimas compañías en anunciar la paralización de envíos a Rusia, el argumento que han expuesto es que, existen potenciales riesgos asociados al material de transacción (los coches) con Rusia, incluyendo las sanciones impuestas por Europa y Estados Unidos. Una decisión que resulta obviamente lógica, pero que podría suponer una pérdida de ingresos a tener en cuenta, pues Volvo vende una media de 9.000 coches anuales en Rusia.
No obstante, el que peor parado saldrá de esto es el grupo Renault, que tiene en Rusia su segundo mercado más importante y contabiliza casi el 40% de la producción de todo el país. Renault es el accionista mayoritario de AutoVAZ (tiene el 69% de la empresa) y AutoVaz, a su vez, es dueña de Lada, la marca más vendida del mercado ruso desde hace muchos años. De hecho, Luca de Meo la incluyó en su estrategia “Renaulution”. Además, por si fuera poco, Renault tiene tres factorías en Rusia, plantas de producción que ya han anunciado la suspensión de algunas de sus operaciones.
Pero no son los únicos afectados, Hyundai fabrica unos 230.000 coches anuales en Rusia y copa el 12,3% del mercado con Kia y el 10,3% con Hyundai. Volkswagen fabrica el Tiguan y el Polo, así como motores para Audi y el Škoda Rapid.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS