Hemos visto durante los últimos años, como algunos fabricantes han recuperado nombres de antaño, para dar vida a nuevos modelos que nada tienen que ver con “viejos conocidos”. Han habido casos como el FIAT 500, que lleva unas cuantas décadas entre nosotros, o el del Volkswagen Beetle, que mantuvieron su idiosincrasia casi intacta, pero también ha habido casos que, según los aficionados, ha sido una violación absoluta del nombre y del concepto de vehículo.
Obviamente, hablamos de casos como el del Mitsubishi Eclipse Cross o el del Ford Mustang Mach-E. Son casos bastante sonados porque trajeron consigo muchas críticas, aunque en el fondo, las críticas de los aficionados siempre caen en saco roto y al comprador de estos coches le importa más bien poco el pasado del nombre o su peso en la historia. Sin embargo, la denominación del modelo tiene más importancia de la que se cree, porque todo el mundo conoce el nombre de Mustang, por ejemplo.
Y eso es, precisamente, lo que quieren hacer en Ford. No solo contará con una gama reconvertida a SUV y pick-up (salvo honrosas excepciones), también explotarán sus denominaciones más clásicas para, según el jefe de diseño de Ford, “emocionar el producto”. Es decir, Murat Gueler, jefe de diseño de Ford, deja claro que los nombres “viejos” como Puma, ayudan a dar una imagen diferente al producto y hacer que la percepción de los usuarios sea muy distinta.
Desde Ford no tendrán reparos en emplear nombres como Sierra Cortina para sus nuevos modelos. Ya lo ha hecho con tres SUV: Puma, Mustang y Ford Kuga (por si nadie se dio cuenta, Kuga hace referencia al Ford Cougar, al coupé que la marca puso en circulación en los 90 y al Mercury Cougar de la década de los 60).
La industria está en su momento más loco desde que me uní hace más de 20 años, y nunca la había visto tan disruptiva como ahora”. Murat Gueler, jefe de diseño de Ford
Uno de los posibles beneficiados de esta estrategia de Ford es el próximo eléctrico sobre la plataforma de Volkswagen y que por el momento, no tiene denominación asignada. Por otro lado, Ford podría usar nombres como Capri o Probe de la misma forma que usó Puma, según dicen desde Autocar. No en balde, tanto el Ford Puma, el coche más vendido de la marca en Europa, como el Ford Mustang Mach-E, son un éxito de ventas a los que su denominación ha ayudado más de lo que podría parecer a simple vista.
Creo que tenemos la ventaja única de tener placas de identificación del pasado que podemos aprovechar para emocionar nuestro producto y contar historias que ninguna otra marca puede contar”- Murat Gueler, jefe de diseño de Ford
Ford apuesta por darle al cliente lo que el cliente quiere, es decir, SUV, pero serán coches que ahondarán en el pasado de la marca a través de sus denominaciones. No sabemos cuáles serán las elegidas, pero está claro que podremos ver cualquier de los “viejos Ford” transformado como ha ocurrido con el Puma.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS