Tras superar uno de los años más convulsos en la Fórmula 1 de la historia reciente, el máximo dirigente de la competición, Chase Carey, ha decidido dar un paso al lado cuando finalice esta temporada 2020. Su sustituto será Stefano Domenicali, quien abandonaría su puesto como CEO de Lamborghini para enrolarse en este nuevo reto. Esto aún no ha sido confirmado oficialmente, pero se da por hecho en el entorno de la F1, dejando así sin opciones a otros nombres que habían surgido en los últimos tiempos, como Toto Wolff o Zak Brown.

El italiano, de 55 años, tiene una dilatada trayectoria en el Gran Circo. Graduado por la Universidad de Bolonia en 1991, poco después se incorporó al departamento financiero de Ferrari. Entre 1992 y 1994 fue director de carrera del circuito de Mugello, para en 1995 ser nombrado jefe de personal en el departamento deportivo de Ferrari. Este cargo lo ocupó hasta 2001, cuando pasó a ser el director de logística de Ferrari. En 2002 vuelve a cambiar de trabajo, esta vez para ser el director deportivo de la marca. Después, a finales del 2007, comienza su etapa más conocida, cuando fue nombrado jefe del equipo de Fórmula 1 del fabricante italiano.

La Scuderia lograría el campeonato de constructores de 2008, y el subcampeonato en 2012. Además, es un nombre conocido en nuestro país, ya que coincidió con prácticamente la totalidad de la etapa de Fernando Alonso como piloto de Ferrari, con los subcampeonatos del título de pilotos que el asturiano logró en 2010, 2012 y 2013. Domenicali dimitiría en abril del año 2014 por diferencias con el presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo, quien quiso despedir al jefe del desarrollo del motor híbrido estrenado aquel año que tan malos resultados estaba dando para la Scuderia.

Uepa… Si lo dice Dieter Rencken es que es muy posible que se haga realidad. Chase Carey mira para la puerta… que entreabre STEFANO DOMENICALI (Curiosamente capo de Lamborghini, marca del grupo VW, que SI ha mostrado interés por la F1 si acaba usando combustible sintético) https://t.co/gfzhfs0LSG

— Virutas de Goma™ (@VirutasF1) September 22, 2020

Tras abandonar Ferrari, Domenicali fue nombrado presidente de nuevas iniciativas de negocio de Audi en noviembre de ese mismo año. Poco tiempo después, en 2016, pasaría a ser CEO del fabricante de superdeportivos Lamborghini, siguiendo así dentro del organigrama del Grupo Volkswagen. Logró un gran crecimiento en esta icónica marca, batiendo el récord de ventas de esta en 2019. Al mismo tiempo, también estuvo como presidente de la comisión de monoplazas de la FIA. Domenicali recuperó la categoría de Fórmula 2, que se convirtió en el último paso hacia la F1 en 2017, y también estableció una nueva Fórmula 3 en 2019. De esta forma, el camino del karting a la F1 quedaba mucho más claro para los jóvenes pilotos.

Chase Carey, el hasta ahora CEO de la Fórmula 1, abandona el puesto después de tres años en los que ha superado todos los desafíos que se le presentaron. Consiguió firmar un nuevo Pacto de la Concordia con los equipos, que también aceptaron la nueva normativa que entrará en vigor en 2022 e incluye sustanciales cambios en los monoplazas. También introdujo un nuevo límite presupuestario en el campeonato para tratar de igualar a las escuderías, y salvó esta temporada 2020 con multitud de pruebas canceladas por el coronavirus, creando un nuevo calendario a partir de julio con 17 carreras.

Domenicali será ahora quien recoja el testigo y se encargue de vigilar el cumplimiento de las nuevas normas, incluido el límite presupuestario. Además, debería lidiar con el escenario que se presenta en 2021, donde el coronavirus probablemente planteará las mismas dificultades vividas en este año a la hora de realizar los Grandes Premios de Fórmula 1. Cuando sea oficial, os avisaremos.