Psicológicamente, el verano está acabado y comienza un nuevo ejercicio, un nuevo año aunque oficialmente el final de 2019 sea el 31 de diciembre. Llega septiembre y con este mes se da comienzo a un nuevo período en el que los peques vuelven al cole, se regresa a la rutina laboral, comienzan las típicas colecciones que nunca se acaban y, además, da comienzo la nueva fase de la normativa Euro 6d-TEMP, que recibe el apellido de EVAP-ISC.

Hemos ido viendo cómo las normativas de emisiones se han ido endureciendo poco a poco, se ha obligado a los fabricantes a reducir gases expulsados por el escape de sus coches de forma urgente y, como también hemos visto, haciendo trampas en algunas ocasiones. Está siendo un momento de cambio importante, tanto para la industria en general, como para los usuarios. Así, hoy 1 de septiembre de 2019 da comienzo una nueva etapa en esta persecución de la contaminación mediante una evolución de la normativa Euro 6 que además, representa el final de la moratoria que pidieron los fabricantes para la aplicación del protocolo WLTP.

Con la aplicación del sistema WLTP, como seguro ya sabréis, se pretende ofrecer cifras de homologación mucho más cercanas a las que, posteriormente, obtendrá el usuario al realizar sus desplazamientos. Es decir, se busca una forma de homologación más realista que la nefasta regulación NEDC, con la que cualquier parecido con la realidad era pura coincidencia y las diferencias eran muy acusadas. Demasiado.

Hoy 1 de septiembre entra en vigor la nueva normativa de emisiones Euro-6d-TEMP-EVAP-ISC

La puesta en marcha de esta fase de la Euro 6 no afecta a los usuarios que ya tengan comprado su automóvil, y en el fondo tampoco a los que quieran comprarse uno nuevo pues son los fabricantes quienes deben ofrecer un producto que pueda superar esta nueva normativa. Desde hoy mismo, todos los coches que estén a la venta deben superar pruebas diseñadas para evitar lo que ocurrió con aquellos motores con software especial (y al final, no fué sólo Volskwagen…).

Sin embargo, como paso intermedio (en 2021 se pone en marcha la Euro-6d-ISC-FCM), se admite que durante las pruebas de conducción real puedan emitir 2,1 veces más de NO_x (210 %) de lo reflejado en la ficha técnica. En enero de 2020 deberá reducirse este factor de conformidad a 1,5 para modelos nuevos, y en enero de 2021 para todos los vehículos nuevos. A más tardar en 2023 este factor de conformidad deberá ser igual a 1, con lo que todos los vehículos nuevos deberán emitir como máximo 80 mg/km de NO_x.

Para las pruebas de homologación se añaden novedades que serán importantes de cara a los resultados. Por un lado está el “Test EVAP” (Emisiones por EVAPoración), que mide la cantidad de hidrocarburos que se evaporan del sistema de carburante en un período de 48 horas y afecta esencialmente a la ventilación de los depósitos de los vehículos de gasolina. Por otro lado está el “Test ISC” (In Service Conformity), que afecta a los vehículos de menos de cinco años o 100.000 kilómetros ya en circulación, que deben seguir siendo conformes al conjunto de la normativa de emisiones.

Esta nueva normativa obliga a que los fabricantes se preocupen por cumplir los límites antes de poner el coche a la venta y además, durante los siguientes cinco años

El último apartado y el que mejor representará la realidad de las emisiones es el “Test RDE” (Real Driving Emissions). Se trata de las pruebas en conducción real y definirá la diferencia máxima admisible entre las emisiones medidas en el proceso de homologación y las obtenidas durante la conducción en tráfico abierto.

Si estás pensando en comprar un coche nuevo, este mes de septiembre es una buena ocasión. Si algún concesionario tiene unidades que no superen esta normativa, tendrán que matricularlos a nombre de la empresa, convirtiendo ese coche nuevo en un kilómetro cero y por tanto, perdiendo dinero por cada día que esté el coche en la concesión. Esto provoca la aparición de diversas rebajas y ofertas que hacen tremendamente interesante la compra de un coche nuevo durante este mes, pero por algo menos de dinero. Será muy similar a lo que ocurrió hace un año, cuando estaba cerca de ponerse en marcha el nuevo protocolo WLTP y las ventas de coches nuevos aumentaron de forma significativa.