El Mercedes-AMG GT43 es la última incorporación a la gama del Gran Turismo alemán, aunque una incorporación que llega lastrada por su configuración, o mejor dicho, por su motor, un cuatro cilindros que, por muy potente que sea, no tiene ni el glamour y la esencia de un buen V8 “gordo” o un seis cilindros bien afinado. No obstante, un buen cuatro cilindros tampoco debería ser ignorado ni tampoco menospreciado, pues algunos de los coches más deseados entre los fanáticos montan motores tetracilíndricos y nadie se queja por ello. ¿O acaso el Honda Civic Type R o el Renault Mégane RS tiene motores de seis cilindros? Y esto es solo un ejemplo.
La cuestión es, más concretamente, combinar un Gran Turismo como el AMG GT, con un motor con la solera de un cuatro cilindros, que, por lo general, siempre ha sido un motor de menos caché. No obstante, la situación actual obliga a realizar estas curiosas combinaciones, que para colmo, se acompañan de un motor eléctrico y una batería para alimentarlo, grupo eléctrico al que debemos sumar un turbo que también tiene accionamiento eléctrico, una solución procedente de la Fórmula 1.
Dicho turbo eléctrico fue un desarrollo que acaparó bastante repercusión cuando se presentó, ya que, de un plumazo, había eliminado todos los problemas de un sistema de sobrealimentación por turbocompresor: eliminaba el ya casi desaparecido lag y además, también gran parte de las pérdidas por calor que se genera en el turbo. Es un sistema que se ha desarrollado en competición y que mejora el tacto y las prestaciones de cualquier motor turboalimentado. El turbo funciona con sistema eléctrico de 48 voltios, al igual que el motor eléctrico del grupo híbrido, el cual, también hace las veces de motor de arranque.
En el caso del AMG GT43, con dos litros y 421 CV a 6.750 revoluciones –el motor eléctrico rinde 14 CV– y 500 Nm de par entre 3.250 y 5.000 revolucion, resulta ser el motor del Mercedes-AMG A45 con un pequeño asistido por un pequeño motor eléctrico, que le permite lograr el consumo más contenido de toda la gama con 10,3 litros homologados cada 100 kilómetros. También es uno de los más ligeros, con 1.775 kilos según datos oficiales.
La incorporación del AMG GT43 a la gama, supone estrenar opción de acceso, es decir, que será la versión más económica de todas y por ello, prescinde de cosas como la tracción total aunque, en realidad, esto no es precisamente malo eso se nota en las cifras anunciadas por la marca, que afirma que logra el 0 a 100 km/h en 4,6 segundos y puede alcanzar los 280 km/h. Solo se podrá combinar con la caja de cambios AMG Speedshift MCT 9G de doble embrague.
Que sea la opción de acceso no quiere decir que se tenga que conformar con poca tecnología o pocas soluciones interesantes. Por ejemplo, esconde el sistema AIRPANEL, que controla de firma activa las lamas de las entradas de aire, que se pueden abrir horizontalmente según las necesidades de refrigeración o para mejorar el rendimiento aerodinámico. En la cola, un alerón trasero activo, emerge cuando se alcanza determinada velocidad, para mejorar la estabilidad del eje trasero.
Javi Martín
Si me preguntas de donde viene mi afición por el motor, no sabría responder. Siempre ha estado ahí, aunque soy el único de la familia al que le gusta este mundillo. Mi padre trabajó como delineante en una empresa metalúrgica con mucha producción de piezas de automóviles, pero nunca hubo una pasión como la que puedo tener yo. También he escrito un libro para la editorial Larousse sobre la historia del SEAT 600 titulado "El 600. Un sueño sobre cuatro ruedas".COMENTARIOS